El
problema del consumo de mariguana ya es tan grande en México que, no se puede
soslayar. Los consumidores están en todos los estratos sociales y en todos los
grados educativos. La penalización de la mariguana ha sido impuesta por los
Estados Unidos y los gobiernos de mexicanos han acatado fielmente los deseos y
órdenes. ¿Por qué es un delito?. Por intereses morales torcidos, por
conveniencia del gobierno que se entromete en lo que debe ser decisión de los individuos.
En todas las cosas quiere el gobierno que el ciudadano tome la decisión y haga
con sus propias fuerzas su vida. Pero en lo relativo al uso de la mariguana se
siente como buen padre de doble moral que decide que puede o no consumir. El
alcohol y los cigarros son legales aunque causen daños severos a la salud de
los ciudadanos. Claro, están las grandes empresas vitivinícolas y las
tabacaleras legislando y empujando con toda clase de corruptelas a los legisladores
para que, alcohol y cigarros sean legales. Vaya valores. La prohibición de la
mariguana va en contra de la libertad de los seres humanos. Pongo otro ejemplo.
El consumo de mariguana, se dice, atenta contra la salud y por ello, es,
delito. No se piensa lo mismo del suicidio que no atenta contra la salud sino
acaba con la vida misma cuando se consuma el hecho.
Es
hora de ver y tratar la siembra, cosecha, transporte, distribución y venta de
la mariguana de una manera diferente a la tradicional y eso, le corresponde no
a los legisladores solamente sino a la sociedad civil que es, donde se encuentran
los consumidores. Despenalizar todo lo anterior, no significa que, se aliente
el consumo y todo lo que ello involucra sino que, se saque a la luz lo que
ocurre en la oscuridad. Nos asombraría, de primera, ver quiénes son los
consumidores, quienes pierden con su legalización y quienes ganarán, volviéndose
empresarios del cáñamo hindú. Como
siempre en estos casos se deben seguir los diversos caminos del dinero.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario