QUINIENTOS AÑOS DE CONSTRUCCIÓN DEL PUEBLO MEXICANO
El
saber ahora esta mucho mas al alcance de nosotros para poder ver el pasado sin
rencor (Son hechos consumados), pero si con una actitud critica a lo que se ha
escrito sobre la llamada conquista que, inicia con una revolución de los
pueblos sometidos e incluso de los aliados como Texcoco; eso sí, azuzados y
encabezados por Hernán Cortés y sus escasas tropas. Hay que ir con precaución al
leer los libros de historia, poniendo cuidado en el contexto en el que se
escribe cada obra y las intenciones de cada autor en particular.
Es
increíble que hasta nuestros mas importantes historiadores tengan la idea de
que, el descubrimiento de lo que ahora es América, fue el encuentro de dos
mundos: españoles y mexicanos. Quizá sea debido a que nuestro pueblo se decantó
por denominarse mexicano. Sin embargo, la pregunta salta inmediatamente. ¿Cuántos
pueblos había a la llegada de los españoles, demás europeos y africanos?. Según
los datos del INEGI, mediante COMUNICADO DE PRENSA NÚM. 392/2020, DE FECHA
SIETE DE AGOSTO DE 2020, existen hoy sesenta y
ocho lenguas indígenas nativas (SIC). Esto nos da una idea de la pluralidad de
pueblos que existían ya desde antes de la llegada de los europeos. Claro, esta
cifra no es precisa, pero por el momento nos sirve únicamente para darnos cuenta
de un hecho, había tantos pueblos nativos que, no se sostiene la idea de que,
el hecho fundacional no fue el encuentro de dos culturas, entre españoles,
otros europeos y africanos sino una interacción entre muchos pueblos originarios
y estos últimos.
En
consecuencia, no somos el mestizaje de españoles y mexicanos que, por lo pronto
ese mestizaje es artificial pues se basa en la idea errónea de dar por sentado
la existencia de razas. Lo cual es falso. Hay una sola especie, la humana que
es tan diversa en sus accidentes o elementos secundarios, pero en lo principal existe
una sola especie como pasa con los demás seres. Los filósofos griegos buscaban
el origen de todas las cosas de una fuente común. Carlos Darwin escribió su
obra: “El origen de las especies” y no de las razas. Y por el momento sabemos
que, todo lo existente tiene un mismo origen que, es el Big Bang. Por si esto
fuera poco los genetistas han logrado descubrir que, los seres aparentemente más
disímbolos como ratas, simios y humanos comparten una elevado numero de sus
genes, siendo mínimas las diferencias, resultado de un mismo origen.
Los
mexicanos somos, como la mayoría de los demás pueblos, la combinación de muchos
pueblos. No es tan simple la realidad. Se entiende que, para la mejor comprensión
de la realidad se simplifiquen los hechos, se hagan esquemas y toda clase de
atajos para darse una idea de lo que nos rodea, pero eso debe quedar en
suspenso a la hora de pensar profundamente y no en definitiva porque se estaría
encontrando lo contrario al saber, la ignorancia.
Esta
mezcla fue gradual y aun hoy día existen pueblos que podríamos llamar “puros”, pues
por diversas razones han preferido o han sido orillados a no interactuar con el
resto de los mexicanos. La mexicanidad es tan diversa que, únicamente a un
poeta con un Nobel se le ocurrió definir a los mexicanos por una visión muy
borrosa y que por desgracia permeo en el pueblo a través de la enseñanza de su
literatura.
En
este contexto, los españoles y los mexicanos no son la base de nuestra mexicanidad
pues esto seria injusto para pueblos como los de Michoacán, Texcoco, Tlaxcala,
Huejotzingo, Cholula, Tepeaca y Xochimilco por nombrar solo algunos. Si se
hiciera una investigación más profunda se vería la gran variedad de pueblos que
integran lo que somos. En este caso, bien se puede decir que, había aproximadamente
sesenta y ocho pueblos originarios importantes más los españoles, a pesar de su
gran influencia durante tres siglos serian una mínima parte de lo que hoy es México.
A
todo esto, se le debe de sumar los pueblos que han aportado a la construcción de
esta nación y me estoy aventurando con este término. En México existen
influencias genéticas de árabes, franceses, chinos, japoneses, italianos y una
lista larga que, si bien es mínima su influencia no se puede dejar de lado su
importancia para nuestro conocimiento de quienes somos. Se requieren estudios
profundos y que se aparten de los estereotipos impuestos desde el oficialismo y
la visión española y europea.
Ahora
bien, no se trata de quitarle ningún merito a ninguno de los actores
importantes y secundarios de esa revolución civil que, derivó en conquista sino
de analizar los hechos históricos desde la razón y las pruebas. No podemos ser
pasivos y permitir que se nos determine al antojo de cualquiera, esta de por
medio nuestro ser, nuestras vidas y razón de ser. Todo esto lo debemos hacer
sin prejuicios, sin rencores y con el mejor ánimo de seguir construyendo
nuestra nación.
En
efecto, se nos ha llamado “indios” por un error Cristóbal Colón, buscaba las
Indias y no esta mal ser indio pues debe ser un orgullo, con todo, aquí había una
larga variedad de pueblos ya determinados. Para mi cada vez que un extranjero
dice que somos indios no hace mas que mostrar su ignorancia. Y ejemplos como
estos hay muchos y, sobre los cuales se debe trabajar arduamente y sin
descanso. Por mi parte soy partidario de los pueblos originarios que, tuvieron
que ser debilitados para dominarlos. Sin embargo, he visto esa fuerza yacer en
todos los lugares de México. Tenemos nuestra problemática política, económica,
social, cultural, artística y en todos los demás rubros sobre los cuales
debemos pensar las mejores soluciones sin tener la idea romántica de poder
solucionar todos los problemas en corto tiempo y de manera definitiva, pero en
la medida que acortemos la corrupción, los delitos y se premie a los virtuosos
habremos iniciado un nuevo derrotero.