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FIN, E INICIO DE
UN NUEVO MODELO DE ESTADO NACIONAL EN MÉXICO
“dejad, los que aquí entráis, toda esperanza”: Dante
Alighieri
Toda
la oposición ha soñado y sigue soñando con regresar a gobernar al estado
mexicano sin responsabilidad y culpabilidad alguna para ello; en especial los
panistas se habían aferrado a la falsa idea de ser designados por la divinidad
para imponer “El Reino de Dios en la Tierra”. El Neoliberalismo vino y desató
todas las fuerzas mantenidas bajo la coraza del viejo régimen priísta. Parecía
indestructible, pero resultó estar debilitado y vacío. La sorpresa fue
mayúscula para casi todos. La vieja dictadura de partido único de Estado se
esfumaba sin remedio para dar paso a una democracia ciudadana incipiente. Todos
los peligros provenientes de los conservadores y de los viejos priístas se
arremolinan para destruirla o por lo menos atenuarla. No hay camino. Se debe
construir y eso no es fácil. A los peligros internos se han sumado los externos
en la persona de Donald Trump y las elites conservadoras estadounidenses. La
última esperanza de la oposición se basa en Trump. Pero, Trump es obtuso. No
lucha contra seres humanos como gobernantes sino contra todas las fuerzas
desatadas por el Neoliberalismo y contra eso poco se puede hacer. El resultado
será un rotundo fracaso. No se pueden devolver las viejas glorias a los Estados
Unidos de América, mediante los hechos y actos descabellados implementados por
el gobierno estadounidenses.
Recordemos
el viejo y largo conflicto entre Atenas y Esparta. Al final no hubo ni vencedor
no vencido sino el advenimiento de un nuevo orden impuesto por la realidad y no
por ninguna de estados dos Ciudades- Estado. Quedaron tan agotadas que no pudieron
seguir sus fines de dominio. Ha pasado lo mismo entre los Estados Unidos de
América (USA) y la Unión de Repúblicas Socialista Soviéticas (URSS). Cayó
primero la URSS y se pensó que, USA había salido victoriosa para siempre.
Error. Se embarcaron al dominio del mundo mediante gastos de locura. El
resultado es la actual debilidad. Las élites gobernantes han reaccionado de una
manera irracional y poco efectiva. El mundo ha cambiado y ya no son los únicos
con el poder político, militar y comercial. China, Rusia, Brasil, la India
entre otros Estados empujan con las mismas armas Neoliberales y están en la
repartición de las gananciales. USA se va a llevar una sorpresa porque quieren mágicamente
cambiar la realidad y eso no es posible. Su poder fue producto de muchos factores
internos y externos y fueron forjando en un proceso su poder. Hoy, quieren
volver a ser los numero uno mediante ideas y prácticas descabelladas inviables.
En
lo que, respecta a los Estados Unidos Mexicanos (México), ha tomado un
derrotero contrario al Neoliberalismo y eso es bueno de inicio, pero no hay
camino y los peligros d ellos traidores, de los conservadores es permanente. No
son menores los peligros. Lo único que, ha mantenido a los empresarios,
sacerdotes, cúpulas partidistas y sociales en implementar un golpe de Estado ha
sido la decidida participación del pueblo. Ese pueblo sometido durante cientos
de años. Siempre menospreciado por las élites ya mencionadas y contra el cual
no tienen la más mínima idea de cómo tratarlo y seguirán así por su
incomprensión de la realidad y su torpeza increíble. No hay forma de volver al
viejo sistema político dictatorial. La hora de los ciudadanos ha llegado y no
dejará vivir lo obsoleto. No hay más opciones.
La
reunión de este pasado nueve de marzo de dos mil veinticinco, ha de haber hecho
abrir los ojos y la mente a los lideres de la oposición. El final del Partido
Revolucionario Institucional (PRI) está cerca y no hay salvación alguna. En el
Partido Acción Nacional (PAN), se encendieron las alarmas. Su dirigencia
vislumbro la realidad. Tienen todo perdido. Eso es tanto como descender a los
abismos, al infierno de Dante y del cual no hay salida, pero como son obtusos
no pierden la esperanza a pesar de los pesares y de las sentencias en su contra
de las dos pasadas elecciones pasadas. La esperanza muere al último. En el
último estertor la esperanza y con el escenario vacío la marchita esperanza se
esfuma.
El
destino del pueblo mexicano está en sus manos y debe cuidarse de que, se lo
arrebaten las élites ya mencionadas e incluso las nuevas élites políticas que,
se están conformando con lo viejo y nuevo. Al final los políticos terminan por
traicionar al pueblo y se inicia nuevamente la lucha.
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