Tan
fanáticos son los que van a realizar la misa satánica a las 20:00 en Harvard como
aquellos que rezan y la quieren impedir. El satanismo, en el fondo, tiene la
misma base que las religiones: la ignorancia y los dogmas. No se puede tomar en
serio al satanismo como opción de vida. Más aún, si se mira bien; tanto
personas religiosas como los que se denominan satánicos están en franca lucha
para ver quienes hacen más daño a los demás seres humanos con su locura rabiosa.
Me atrevería a decir, que los fanáticos religiosos van a la cabeza. Por lo
pronto pongámonos cómodos y estemos atentos para ser testigos (no de Jehová) de
los ridículos que hacen en la misa satánica anunciada en ese nido de histericos. Que
no cunda la histeria hacia otros lados; no son espantajos ni seres inmateriales los que creen ver
moverse en el espacio; es solo el viento moviéndose y tocando a las ventanas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario