No
bien había llegado Miguel Ángel Osorio Chong, cuando sacó la cartera del erario
y sin más, pródigamente, ofreció la friolera de $60 millones de pesos por información
que lleve a la captura de Joaquín “El Chapo” Guzmán. Esto es, insólito. Primero,
Osorio Chong, no tuvo el cuidado para vigilar al “El Chapo” Guzmán (Peña Nieto
dice que todos los días, le decía a Osorio Chong, que lo vigilara bien), a
pesar de ser su trabajo. Segundo, no quisieron extraditar hacia los Estado
Unidos al Chapo. Murillo Karam, el ínclito, entonces Procurador dijo que eso sería
después de 300 años, poniéndose autosuficiente. Tercero, Osorio Chong, el
encargado de la seguridad interna, se fue a Francia. ¿A que fue al extranjero?,
¿Quién o quienes se quedaron a cargo del gobierno?. Cuarto, después de la fuga
del Chapo, el responsable de su custodia y vigilancia, quiere pagar con dinero público
sus errores. Quinto, sin un dejo de vergüenza manifiesta que no renunciará.
¿Por
qué no vemos a los gobernantes pródigos hacia el pueblo?, ¿con que derecho
gastan sin dar explicaciones al pueblo?. ¿Por qué no se les fincan
responsabilidades a los funcionarios de primer nivel?. Estas y más
interrogantes exigen respuestas claras y rápidas, mientras no sea así,
seguiremos en la misma simulación del Estado de Derecho y con la corrupción como
base de la vida de los políticos mexicanos y la impunidad como el manto mágico que
hace la maravilla de perpetuarlos en el poder.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario