LA DERECHA, LOS LIBERALES. PUNTOS DE PARTIDA
Tras las ideologías de la derecha y de los liberales
existen formas de ser en el campo de la moral. Se nos ha enseñado a estudiar el
campo total del saber de forma parcial. Para ello se han creado la física, matemáticas,
biología, filosofía, medicina y todas las demás áreas del saber. De esta manera
se especializa el saber, pero se niega conocer más allá de una parcialidad. Sin
embargo, la vida es un todo conectado que no se puede dividir. Veamos como la
moral cristiana deriva en una forma de política. Lo mismo sucede con los
liberales.
Los conservadores derivan su vida de la religión católica
y en específico del Génesis. El mito narra como el Dios cristiano crea a los
seres humanos. Primero crea al hombre a su imagen y semejanza. Después crea a
la mujer de la costilla del varón. De esto se sigue que, el genero masculino es
lo mas cercano a la divinidad. La mujer al ser una creación diversa a la imagen
y semejanza del Dios católico no puede tener igualdad y mucho menos
preeminencia con el hombre. Su papel queda en segundo y ulteriores grados. Esto,
aunque no lo diga de manera expresa el Génesis. Esa es su interpretación y su práctica
real. Es a lo que llamamos “Machismo” y que no es ideología del género
masculino sino también del femenino, sin la participación de las mujeres su
continuidad no seria posible. Bien volvamos al punto.
De lo anterior, se conforma la familia tradicional.
Padre madre e hijos y este modelo es para los católicos rígido, dogmático y sin
cambio posible. Casi toda la vida de los conservadores se rige por la religión excepto
la corrupción, la comisión de delitos entre otros rubros. Esto los lleva a
tener dos morales. Una aparente y que, se encargan de predicar y la otra, totalmente
opuesta a los valores. Esta base religiosa, siendo fundamental la extienden a
la política.
En política los de derecha negaran el derecho al
aborto, al matrimonio igualitario que, consiste en la unión legal entre
personas del mismo sexo; el control natal, los derechos a homosexuales,
lesbianas y todo aquello que no se ajuste a la religión. Están en contra de la
democracia popular pues se sienten designados por derecho divino a gobernar.
Las élites deben gobernar sobre las masas pobres e ignorantes. En suma, quieren
que, el Estado eclesiástico este por encima del Estado civil. El dogma sobre la
razón. Estas son algunas de las razones por las cuales han fracasado en la política.
Mientras la vida es dinámica, mientras la ciencia y la tecnología llevan a
nuevos descubrimientos y formas de ser, los conservadores se mantienen
petrificados, atrapados en dogmas que mucha gente ya no cree por falsas. Esas
contradicciones se les han hecho insalvables. Esto es la regla general con sus
salvedades.
Por el contrario, los liberales parten de la razón, de
la ciencia y la tecnología, del humanismo solidario sin que esto sea absoluto porque
también entre estos hay sujetos con doble moral, delincuentes, corruptos y toda clase de tipos indeseables. Con todo, los liberales pueden corregir su marcha pues al
no estar basados en dogmas religiosos pueden adoptar cambios sobre el camino.
Espero no este de mas señalar que, los liberales están
a favor del aborto, del matrimonio igualitario, de los derechos a las personas
diferentes a los géneros femenino y masculino, a que los ciudadanos decidan la
cantidad de hijos que tendrán, a la separación del Estado eclesiástico del
civil y que, haya una democracia directa en la medida de lo posible.
Es evidente que estas dos formas de pensar no únicamente
parten de pensamientos diferentes sino contrarios. Esta es la razón principal
por la cual estas dos formas de pensar la vida y su práctica son
irreconciliables. Están en los extremos de una línea recta y de frente, su colisión
es inevitable en cada momento fundamental de la vida pública. Por el momento la
derecha ha perdido en buena medida el voto de los ciudadanos, pero esto no debería
tener por satisfechos a los liberales pues en política los triunfos nunca son
totales ni definitivos.