domingo, 23 de agosto de 2020

LA CONSTRUCCIÓN DEL FUTURO MEXICANO

 

LA CONSTRUCCIÓN DEL FUTURO MEXICANO

 

Los mexicanos en conjunto no hemos podido, hasta ahora, lograr dar rienda suelta a toda la creatividad contenida en nosotros mismos. En todo momento hemos estado a merced de los gobernantes en turno. Hemos sido determinados, muchas veces, a ser lo mínimo y lo hemos aceptado; con todo, es posible que este sea el momento de que, el pueblo pueda, en realidad, determinar la forma de gobierno y hacer que funcione el Estado mexicano con las correspondientes sanciones administrativas, civiles o penales a todos los servidores públicos que cometan faltas o delitos. Que realmente el pueblo sea soberano y que, todo el poder que, de él, dimana sea en su propio beneficio.

 

La construcción del futuro de los mexicanos debe iniciar ahora, los elementos para ello ya están en la propia Constitución General en el artículo 39 constitucional que contiene dichos elementos y que en general son los siguientes: La soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para beneficio de éste. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno. Lo aquí contenido son principios.

 

A saber, estos principios son:

 

a) Que es del pueblo de donde emana la soberanía nacional; es decir, que, si bien esa soberanía emana del pueblo, esa misma soberanía no se traslada en ningún órgano o institución, sino que vuelve soberano al pueblo mismo.

 

b) De lo anterior se sigue que, todos los cargos públicos son un atributo del pueblo y es quien debe elegir en forma democrática, legal, legitima y real a las mujeres y hombres que deben detentar los puestos sin que los titulares de los órganos Ejecutivo, Legislativo y Judicial puedan siquiera llamarse soberanos pues nos surgiría una pluralidad de soberanos y los intereses generales del pueblo entrarían en conflictos con los intereses particulares. La soberanía popular no puede tener rival alguno. Los titulares de los órganos no son soberanos, eso es un contrasentido.

 

c) El pueblo en uso de su soberanía puede decidir la forma de gobierno que se debe dar.

 

Estos tres principios. a) Origen de la soberanía, b) El ser soberano y c) el uso del poder soberano son los principios sobre los cuales se debió haber construido el Estado mexicano, pero hasta el 2018, no se habían puesto en la práctica, ni siquiera se había pensado en hacerlo. El Estado mexicano había sido tratado como cosa privada en beneficio de los militantes más prominentes del partido único de Estado y de los empresarios que hacían negocio con los gobernantes en turno.

 

A contrario de lo que se piensa de común, si ha habido mexicanos que han trabajado a favor del pueblo mexicano y tratado de construir un Estado democrático, legal, legítimo y justo y la teoría de Juan Jacobo Rousseau fue adoptada por los legisladores mexicanos pero truncada por los gobernantes al escamotear la soberanía al pueblo y someterlo a la servidumbre y en el mejor de los casos a la minoría de edad. Pero la servidumbre y minoría de edad se acabó el 1 de julio de 2018, y es responsabilidad del pueblo mantenerse libre y en su mayoría de edad. Y será culpable si se deja manipular y se le vuelve a escamotear su soberanía.

 

En efecto, estando los elementos políticos y jurídicos en manos del pueblo este, debe iniciar la construcción del nuevo régimen y Estado mexicano siguiendo todos los principios contenidos en nuestra Constitución Política y en su caso implementar otros que sean benéficos para la nación mexicana. La construcción, modificación o reforma del Estado nunca debe parar pues la vida siendo dinámica le es menester un Estado dinámico y no uno estático.

 

Por otro lado, se tienen dos principios en el lema “Sufragio efectivo, no reelección”, a saber: 


a) Que las elecciones sean reales, sin simulaciones ni fraudes y 


b) Que los presidentes de la república no puedan reelegirse para evitar los dictadores.

 

Estos principios políticos y jurídicos deben ser enseñados al pueblo en las escuelas y Universidades para que, conociéndooslos desde la niñez se vuelvan de saber común y su práctica sea normal y no una excepción. Si el pueblo mexicano se decide podrá construir el futuro México, desde hoy con mucho esfuerzo, muchos sacrificios, pero más con inteligencia y cuidando en todo momento a los gobernantes, políticos y a los empresarios nacionales y extranjeros que hagan negocios con el Estado mexicano.

 

Por lo que se ve, primero se necesitan a los mexicanos que piensen correcta y profundamente para plantear las mejores ideas que puedan contribuir a la construcción del nuevo régimen y Estado mexicano. Las ideas europeas ya están en las cabezas no solo de los mexicanos sino de la mayoría de los latinoamericanos, sin embargo, es necesario corregir esas ideas o adecuarlas a la realidad concreta. Por ello, se deben convocar a los profesionistas y adelantados para que propongan ideas al respecto. Sin un plan con ideas nuevas o ideas puestas a la realidad concreta no se podrá avanzar.


jueves, 20 de agosto de 2020

EL FIN INEVITABLE DE VARIOS PARTIDOS POLÍTICOS EN MÉXICO

 

EL FIN INEVITABLE DE VARIOS PARTIDOS POLÍTICOS EN MÉXICO

 

Los políticos no son los seres más inteligentes del mundo ni los más sabios pues su materia es el poder público. En México, desde el inicio de las privatizaciones a la par del cambio económico neoliberal se ponía en marcha el cambio político, social y todo lo que forma parte de la vida en los mexicanos. Los cambios de este tipo son lentos, casi imperceptibles. Para la mayoría, incluso para sus autores, les parece que las circunstancias generales no han cambiado. Las apariencias engañosas atrapan al conjunto, hace falta del análisis profundo. Esto no se hizo y tomó por sorpresa a propios y extraños.

 

Se esperaba que la oposición pudiera reaccionar y si bien, de manera individual no pudieran presentar frente y armas, a los menos lograrían formar un frente de alianzas. Esta es una posibilidad que, pueden elegir panistas, priistas y perredistas entre otros. Con todo, el escandalo hace improbable que sea viable tal alianza pues los electores, para cuando sean las elecciones en el 2021, tendrán el pleno convencimiento de que, votar por una alianza de esta naturaleza seria votar por una alianza de corruptos.  

 

No hay opciones reales que puedan salvar a la oposición. El Partido Revolucionario Institucional está hecho polvo. Ya no tiene razón de existir. Si a esto se le suma que este partido no fue hecho para la lucha política pues nació desde el poder y para el poder. En la mayoría de las elecciones que ganó fueron elecciones de Estado, dado a que se usaban todo el poder presidencial, todos los recursos económicos, políticos, sociales, artísticos, burócratas, de caciques y toda la estructura del Estado, ya sea llevando el control de las elecciones ya sea imponiendo al árbitro electoral.  El PRI ya no tiene el poder presidencial ni el dinero público a nivel nacional; esto es la mayor limitante para sus aspiraciones. A nivel estatal pasa lo mismo. En muchos estados de la Federación ya no figuran como actores principales ni secundarios como en Puebla. A nivel municipal pasa lo mismo. Se sabe que este sistema de gobierno es piramidal. Los niveles estatal y municipal dependen del federal. Esto ha pasado por la falta de credibilidad y no se ve como puedan, los priistas, ganar el mínimo crédito sino todo lo contrario. Este partido desaparecerá.

 

El Partido Acción Nacional, está en total decadencia y en lugar de aportar positivamente para una alianza con otros partidos, llevaría su descrédito. Los militantes de este partido por su dogmatismo religioso no han logrado seguir el dinamismo de la vida y siguen pensando como en los tiempos de la Guerra de Reforma o en la época de la Revolución Cristera. La cerrazón de creerse ungidos para gobernar al pueblo de México, de ser de una calidad superior al promedio y su conservadurismo aderezado todo esto por su corrupción imparable los tiene en franca decadencia, con un descrédito inaudito en un pueblo religioso. Perder la fe de un pueblo religioso hasta el fanatismo es muy mala señal pues de ahí se venían nutriendo políticamente.

 

A los militantes del PAN les pasa lo mismo que a los del PRI, no están hechos para la lucha política en las calles para buscar votos que los hagan ganar el poder político. Los panistas se cansaron de ser oposición y en la primera oportunidad lograron una concertacesion al lograr su primera gubernatura en Baja California en 1989. A partir de este año supieron que el camino al poder era aliarse con el PRI siempre que así les conviniera y lograron llegar al poder por dos sexenios (2000-2006-Vicente Fox), (2006-2012-Felipe Calderón). Y, a partir de ahí sus errores y corrupción han puesto al PAN, al borde de la catástrofe. No hay forma de que, se puedan reponer por el momento de su debilidad. Lograrán sobrevivir pues tienen una gran veta de posibles simpatizantes y militantes en el pueblo católico.

 

El Partido de la Revolución Democrática, ha caído en un descrédito por haber caído en manos del grupo llamado de los “Chuchos”, que usaron al partido para no quedarse atrás en las negociaciones privatizadoras. De esta manera el partido perdió el rumbo democrático, social, ideológico y de credibilidad. Ya no tienen los personajes que los hicieron lograr el inicio del cambio y ahora se presentan como obstáculo para la democracia. Este partido desparecerá al haber perdido si razón de ser y estar ya en calidad de agencia de colocaciones menor.

 

Estos tres partidos fueron los principales actores para formar y firmar el “Pacto por México”, que ahora se sabe fue un plan para que las cúpulas de estos partidos se volvieran ricos por la vía de la corrupción. No hay forma de que, vuelvan a tener la fuerza ni la oportunidad de volver a conformar una alianza de este tipo que sea viable.

 

En resumen, el poder político se puede obtener a largo plazo con un partido único de Estado, acorazado por capas y capas de totalitarismo como el PRI; también se puede acceder al poder político al aliarse con el partido único de Estado como en el caso del PAN y por último, se puede lograr a través de las bases sociales como en el PRD pero únicamente el primero fue exitoso por su largo tiempo en el poder pero las cúpulas de los tres partidos ignoran que, han vivido del crédito de sus militantes pero más de la fe y que, perdido en ambos rubros no hay forma fácil de recobrar esa fe, ese crédito. No va más este régimen.


domingo, 16 de agosto de 2020

LA POBREZA DEL ÉXITO MERAMENTE MATERIAL


LA POBREZA DEL ÉXITO MATERIAL

 

Existen males que no tienen su real apariencia, sino que se nos aparecen con los ropajes de la virtud y se vuelven, en determinados casos, el único objetivo a perseguir, dando como resultado males que le vienen aparejados. Es sabido que existen valores morales y que a estos se le oponen sus correspondientes antivalores. Al amor se le opone el odio, al trabajo la pereza, a la amistad la traición, a la solidaridad el egoísmo y así de esta manera en lo consiguiente.

 

En el rubro de la justicia pasa lo mismo, se nos puede presentar como justo un hecho o un acto cuando en realidad en el fondo es todo lo contrario. La justicia puede ser un instrumento de sometimiento o para que una determinada clase política, social o ambas se encumbren en lo más alto de una sociedad en detrimento del resto. Ahora bien, se debe distinguir entre legalidad y justicia pues la primera puede estar condicionada por la segunda. En efecto, el fascismo, el nazismo y el régimen presidencial no puede decirse que no fueran legales pues las leyes se seguían, aunque se debe decir que siempre los gobiernos, en lo particular, cometen delitos con toda impunidad. Es decir, que no se debe pensar o creer que la legalidad y la justicia son en la realidad hechos o actos puros, sino que tienen sus excepciones.

 

Si bien la legalidad vigente determina la justicia real sabemos sin lugar a duda que existe un concepto de justicia que va más allá del ius positivismo y que radica en el ius naturalismo y se nos presenta como una estrella sideral que nos exige actuar en consecuencia. Es decir, que los seres humanos al vivir con toda su complejidad no deben atender únicamente a las leyes vigentes que son impuestas por el Estado y no deben permitir una legalidad torcida que dé como consecuencia una justicia retorcida. En el ámbito de la justicia no se debe quedar una sociedad determinada en el Derecho positivo, sino que, debe buscar el concepto, el valor, el ideal de lo que intuye como verdaderamente justo.

 

En México, hay muchos nostálgicos que añoran el regreso del viejo régimen que implantó, en apariencia un Estado legal, legitimo, democrático y justo cuando en realidad se implantó un solo objetivo, alcanzar el éxito material a través de todos los métodos ilegales. Dichos vulgares se acuñaron como consecuencia de vivir con antivalores. “El que no transa no avanza”, “Chinga que atrás vienen chingando”, “Vivir fuera del presupuesto, es vivir en el error” y “El PRI, roba, pero deja robar”. Todo esto significa que la corrupción del Estado había permeado desde la cúpula administrativa federal, es decir, desde el presidente de la república en turno, pasando por los órganos judicial y legislativo federales, pasando por gobernadores presidentes municipales y hasta los más modestos presidentes auxiliares hacia la sociedad civil. Claro este tipo de expresiones nos indican con toda certeza que se le hizo participativo al pueblo de la corrupción total del Estado.

 

Durante el Presidencialismo, el Derecho positivo en México sirvió; primero, para que los funcionarios corruptos, de todos los niveles de gobierno, tuvieran toda la impunidad posible y; segundo, para que el Derecho penal sirviera de juego perverso contra la sociedad civil. No es una casualidad que los maestros de Derecho penal, en las Universidades hayan recogido de la realidad lo que era la aplicación de este rubro de le justicia y, decían los afamados docentes que el Derecho penal era de las tres Ps pues únicamente se aplicaba a “los pobres, a las putas ya los pendejos”, y con toda su crudeza y vulgaridad era cierto pues como había un pacto político de corrupción con su correlato de impunidad, la aplicación de la ley no tocaba a los altos funcionarios ni a todos aquellos que tuvieran dinero para la corrupción impunidad. En esto convirtió el Partido Revolucionario Institucional al Estado mexicano en un nido de decadencia imparable. Y, esto se enseña en la Universidades públicas de mayor fama.

 

Hoy, hay muchos que, al haber perdido esa fuente de corrupción e impunidad piden con toda gritería el regreso de ese régimen y anuncian con toda trompetería la inutilidad de este incipiente nuevo régimen. No hay tal. No volverán esas oscuras golondrinas a tocar nuevamente el poder de la república; desaparecerán y si los miembros del Partido Acción Nacional no cambian su rumbo de política para entrar en el círculo de los valores ya anunciados tampoco volverán a gobernar. Las circunstancias ya cambiaron y no hay forma de darle marcha atrás.

 

Ahora bien, la oposición se lanza contra el Andrés Manuel López Obrador como si él, fuera el responsable y culpable de las actuales circunstancias. No hay tal. Este cambio tiene diversas fuentes, tanto internacionales como como nacionales y la misma oposición con su corrupción, impunidad y ciega soberbia contribuyeron a dar fin a un régimen que ya no tiene sentido de ser. Uno de los pilares del cambio lo fue el pueblo que, desde antes de las elecciones del 1 de julio de 2018 ya se había dado plena cuenta de lo nefasto que resultaba para todos que unos cuantos saquearan lo público y dejaran migajas de corrupción y de impunidad al pueblo. La privatización orilló al pueblo a cambiar y este dio una sorpresa mayúscula. En un solo día todo el viejo régimen había sido tocado en su centro neurálgico y la caída ha sido gradual, dramática, trágica con cada nuevo escándalo de corrupción.

 

Creer que, por la simple acumulación de riquezas, ya sea legal, ilegal o injusta, y que, con eso basta para ser apreciado como si esto tuviera un verdadero valor apreciable más allá de la burda materialidad, es un craso error que hemos pagado caro, por muchas décadas y esto no termina aquí, se extenderá como maldición sobre las nuevas generaciones. Se debe reflexionar sobre el tema y, en consecuencia, hacer el sacrificio de aportar, en la medida de lo posible, para crear una nueva sociedad con valores, un nuevo tipo de gobernantes; en suma, un nuevo Estado que sea democrático, legal, justo, legitimo donde se privilegie las acciones positivas y que no se admire a los delincuentes de todo tipo y se les tenga como ejemplos a seguir. Que, en la educación, se vaya al saber más profundo posible.

 

Se trata pues, y esta es la tarea más importante del pueblo mexicano, de refundar al Estado mexicano sobre valores que se observen de común y a quienes se aparten de la senda de la justicia como ideal y como práctica se les apliquen las normas legales y sea reparado el daño y se cumplan las condenas correspondientes. Dejar el viejo régimen no basta se debe crear un Estado fuerte, bien constituido y con los vicios menos posibles en todos los ámbitos, pero más en el público.

 

Que las cosas materiales no sean la medida con que se pondere a los seres humanos. Los seres humanos no crecen en su ser con la acumulación de riquezas sino con el desarrollo de todas sus capacidades; es decir, con el crecimiento de su ser. La pobreza del mero éxito material se nota inmediatamente en el hablar, en el comportamiento humano, en el escribir y hasta en los gestos más mínimos. El éxito material es para nosotros el fracaso más enorme que hemos construido y heredado de generación en generación.


sábado, 15 de agosto de 2020

UN SÍMIL DE LA EDAD MEDIA A LA MANO

 

UN SÍMIL DE LA EDAD MEDIA

 

A menudo nos maravillamos de los adelantos de la ciencia y la tecnología y no es para menos. Hace escasos 20 años era imposible comunicarnos como hoy ni encontrar tanta información en las bibliotecas con la facilidad que hoy podemos. Es extraordinario poder ir comprendiendo gradualmente la vida y su hogar el vasto espacio llamado Universo. De común tenemos la idea de que el remoto pasado, en la Prehistoria y al inicio de la Historia junto con la Edad Media entre otras épocas son abismos de oscurantismo. No hay tal. Si se quiere sentir como seria vivir en alguna de esas épocas no es menester viajar en el tiempo pues todos los miedos, los prejuicios, lo irracional y lo monstruoso.

 

No importa si se vive en un Estado nacional de los llamados del “Primer Mundo” o de “Tercer Mundo”, en ambos existen teorías conspirativas, dogmas, mitos, fanatismo e ignorancia. Hoy día hay gente que no cree en la existencia probada del Coronavirus, pero si cree en la existencia del alma, de Dios, del Diablo por nombrar a unas cuantas creencias de locura. Lo más sorprendente es encontrar a personas con títulos universitarios y doctorados que, ingenuamente, tienen creencias populares y es extraordinario ver como defienden ficciones, invenciones o mitos con gran pasión. Esto es sentir, de primera mano, un ambiente similar a este tipo de épocas. El resultado es escalofriante si cae uno en la cuenta de estas torceduras y retorceduras.

 

En México, por estos días, hemos visto salir a la clase pudiente y ha sido un espectáculo sorprende ver a los ricos protestar con cartulinas y pancartas mal escritas, con discursos sobre el comunismo y socialismo propios de personas incultas. El no saber expresar una concepción del mundo racional muestra la pobreza mental por falta de educación de calidad. No espanta oírlos decir las palabras consideradas como “insultos y groserías”, sino porque, en lugar de transmitir su mensaje de manera clara y positiva muestran y demuestran que no están a la altura de su momento y, por lo que se ve, no lo estarán nunca. Traen arrastrando todos los males de sus antepasados, los conservadores del virreinato, de la independencia y de la Reforma; en resumen, traen el Génesis como base de su tradicional modo de ser.  


viernes, 14 de agosto de 2020

LA CREACIÓN DE LA FEDERACIÓN: ESTADOS LIBRES Y SOBERANOS. UN FATAL ERROR

 

LA CREACIÓN DE LA FEDERACIÓN: ESTADOS LIBRES Y SOBERANOS

 

Después de la independencia política de México de España, inmediatamente surgieron logias francmasónicas basadas en el rito escoces; “…entre ellas la que se llamó del Sol, de la que dependía el periódico del mismo nombre, redactado por son Manuel Cordoniu…[1]”, que sostenían ideas liberales. Por otro lado, surgieron los conservadores quienes se decantaban por la monarquía, así sucedió de manera breve con creación del Imperio Mexicano encabezado por Agustín de Iturbide. Si por un momento los conservadores tomaron la ventaja al imponer una monarquía esta no tenía viabilidad pues los nobles prehispánicos habían desparecido como gobernantes y no se había creado ninguna nobleza mexicana después de esto. El inicio del Estado mexicano fue un hervidero de ideas y no siempre de buena calidad. En este contexto también surgieron los borbonistas. El escenario estaba listo para que los conservadores y liberales iniciaran una lucha encarnizada por imponer cada bando sus ideas políticas y hacerlas realidad. Los males de los mexicanos vienen de este periodo al crearse la Federación.  

 

Contra el emperador Agustín I, se sublevaron diversas facciones entre las que se encontraban las comandadas por un singular militar y que “Echávarri no había podido reducir a Santa Anna, que resistía en Veracruz. Púsose, entonces al habla con él, y entrando en arreglos formaron la que se llamó Acta de Casa Mata”[2], con lo cual se daba terminó al imperio. Es de señalarse que ya estaba en el escenario nacional Antonio López de Santa Anna. Con fecha 26 de marzo de 1823 es desconocido Iturbide y el 30 de marzo del mismo año, “En consecuencia del convenio, las fuerzas sublevadas avanzaron hasta los suburbios de la ciudad e Iturbide, seguido de su familia y de algunas personas que le eran adictas. Salió de Tacubaya para Tulancingo el 30 de marzo (1823)[3].

 

Restituido el Congreso se verificaron elecciones y “…Resultó elegida una mayoría de republicanos federalistas, y una minoría de republicanos centralistas. Los monárquicos quedaron excluidos. El Congreso cerró sus sesiones el 30 de octubre de 1823”[4]. Como se advierte el nuevo Congreso, dominado por los federalistas, tenía toda la fuerza suficiente para fundar una república federal.

Fundada la Federación se procedió a seguir la creación del Estado mexicano. 1.  Entre los sucesos más interesantes de aquellos días aparecen la expedición del acta constitutiva y de la Constitución. Determinado ya por primera vez el sistema federal, aquietáronse los ánimos, y los Estados de México, Oaxaca, Yucatán, Tabasco, Veracruz, Jalisco, Querétaro, San Luis Potosí, Zacatecas, Durango, Chihuahua Coahuila y Texas, Sonora y Sinaloa, Tamaulipas, Michoacán y Guanajuato, ya declarados independientes y soberanos, diéronse a preparar cuanto era necesario para constituirse bajo el nuevo sistema, aun enteramente desconocido”[5].

 

Es entendible que al estar en pleno vigor la teoría de Montesquieu, se impusiera la misma en la creación de la Federación en México; esto sin dar estudio a dicha teoría para tratar de investigar si la misma era correcta plenamente o era posible su mejoramiento continuo. Claro, no se debe ser tan rigoristas con estos políticos muchas veces improvisados, sin las facultades académicas relativas al rubro e incluso, como siempre sucede ineptos, arribistas y quienes únicamente ocupan los puestos para vivir de lo público sin aportar lo mínimo para los gobernados.

 

El mal de seguir sosteniendo en lo formal y en la práctica hoy día, es inadmisible pues han pasado 179 años de aquel suceso y tanto los conocimientos como los medios para adquirirlos se han desarrollado a grados inimaginables y de forma popular. Es lamentable que se siga aceptando que, las partes integrantes de la Federación son estados libres y soberanos. Esto es una contradicción evidente pues al crearse el Estado federal, sus partes perdieron formalmente y en los hechos su libertad que no su autonomía en su régimen interior. Mucho menos pueden, los estados de la Federación, ser soberanos; se sigue que si los órganos federales ejercen la soberanía popular los órganos de los estados integrantes carecen de facultades para ello. Si los estados integrantes del Pacto Federal, fueran “libres y soberanos”, cualquiera podría separarse de la Federación y crear su propio régimen de gobierno a placer con su Banco Central, su Suprema Corte de Justicia, su Congreso General, su Ejecutivo, ejercito y todo lo que se deprende de ser libre y soberano.

 

Y, es este Congreso el que determina la implantación de la “División de Poderes”, con todas sus virtudes y todos sus defectos que hoy día no hemos podido superar por más increíble que parezca al haber pasado 197 años. 2. El Congreso general estableció la independencia del poder judicial, la organización de los poderes ejecutivo y legislativo, la intolerancia religiosa y los fueros del clero y de la milicia”[6]. Es evidente que, si bien se había implantado la teoría de Charles Louis de Secondat, señor de la Brède, barón de Montesquieu y en este sentido se había avanzado hacia la construcción del Estado mexicano, se dejaron los elementos que darían paso a mas discordias y luchas fratricidas; los fueros.  Y, no podía ser de otra manera en ese momento. Pero eso debería ser insostenible en este momento.

 

En aras de creer que las partes de la Federación son “libres y soberanos”, tal y, como hasta ahora se sostiene se han creado pugnas entre el gobierno federal y, los estados integrantes del Estado mexicano al sostener precisamente que son libres y soberanos y que la Federación no tiene injerencia en los asuntos de corrupción e impunidad. Esto ha sido un error monumental que ha mantenido al Estado en franca decadencia.

 

Por otro lado, se ha creado la confusión al creer que existen “Poderes”, en lugar de “Órganos”, y que los titulares de los mismos, a nivel federal, no hacen más que ejercer la soberanía popular a través de las facultades, atribuciones o funciones que les da la Constitución General. Por el contrario, los titulares de los tres órganos: Ejecutivo, Legislativo y Judicial se han creído y muchas veces hasta constituido como verdaderos soberanos y no es raro oírlos decir, sin ningún pudor “Esta soberanía”. Son funcionarios públicos y no soberanos.

 

Lo mismo pasa con los tres órganos que gobiernan los estados que conforman la Federación, siguiendo estas ideas equivocadas y con una perversidad sin par, se dicen soberanos y usan todos los medios para actuar como verdaderos soberanos y d esta manera han postergado el buen funcionamiento del Estado mexicano y de cada una de sus partes. Tales ideas han sido usadas para corromper hasta la medula a todo el Estado mexicano. Esta ideas y conductas se deben combatir en favor de la generalidad y no como hasta ahora en bien de una clase política y social de los pudientes materialmente. Es deseable que se construya un nuevo Constitucionalismo que sea fuente de igualdad ante la ley y ante la realidad en lo más posible y se siga con la simulación.



[1] Riva Palacio Vicente y otros. Resumen integral de México a través de los siglos.

México. 1969. Editorial Compañía General de Ediciones S. A. Página 34.

[2] Riva Palacio Vicente y otros. Resumen integral de México a través de los siglos.

México. 1969. Editorial Compañía General de Ediciones S. A. Página 72.

[3] Riva Palacio Vicente y otros. Resumen integral de México a través de los siglos.

México. 1969. Editorial Compañía General de Ediciones S. A. Página 74.

[4] Riva Palacio Vicente y otros. Resumen integral de México a través de los siglos.

México. 1969. Editorial Compañía General de Ediciones S. A. Página 82.

[5] Riva Palacio Vicente y otros. Resumen integral de México a través de los siglos.

México. 1969. Editorial Compañía General de Ediciones S. A. Página

[6] Riva Palacio Vicente y otros. Resumen integral de México a través de los siglos.

México. 1969. Editorial Compañía General de Ediciones S. A. Página 88.


miércoles, 12 de agosto de 2020

PRIVILIGIARSE EL TRABAJO Y LA CREATIVIDAD

 

PRIVILIGIARSE EL TRABAJO Y LA CREATIVIDAD

 

El Presidencialismo mexicano fue un régimen que en sus últimos 50 años por lo menos se corrompió a tal grado que, era del conocimiento público y práctica cotidiana la corrupción y la impunidad; eso tanto a nivel particular como en el gobierno. En el segundo caso es de tal gravedad pues el presidente de la republica era el gran promotor de la corrupción, así como de la impunidad. Es increíble que un Estado como el mexicano tenga una duda de alrededor de once billones de pesos que equivale al 44% del Producto Interno Bruto, que es el resultado del valor de bienes y servicios que se producen en un año. Es de locura. Eso es lo que nos heredó el Presidencialismo priista y panista.

 

En el régimen Presidencial se veía bien hacer dinero a cualquier precio y con cualquier método y el método más eficiente lo es la corrupción institucionalizada; es decir, el gobierno, comenzando por el presidente en turno hasta el más modesto de los presidentes auxiliares participaban en el saqueo, rapiña, malversación de bienes y servicios que requiere el Estado. Contratos a los amigos o a cualquiera que reporte alguna ganancia pingue sin importar las leyes ni la mortal. De esta forma han hecho fortunas muchos de los personajes más conocidos, ya sean de la iniciativa privada o del gobierno pues hay una complicidad inseparable para que funcione la dupla corrupción/impunidad.

 

Los ejemplos cotidianos de corrupción e impunidad se volvieron tan comunes que los ciudadanos adoptaron este modelo y hasta se acuñó la frase “El PRI roba, pero deja robar” y esto es muy significativo pues se hizo partícipe al pueblo para hacerlo sentir vergüenza de sus acciones corruptas y callara al tener la certeza de que era cómplice de la corrupción. Para que esto funcionara existía toda una trama dentro del Estado mexicano que, a pesar de ser evidente la corrupción no hubiera sanción alguna a los responsables y en consecuencia, únicamente a los más torpes se les aplicaba la ley.

 

Es sabido y es una vergüenza nacional que, en las Universidades, en particular en los colegios de Derecho se enseñaba que, en el caso el Derecho Penal, el mismo solo se aplicaba a las tres Ps, a los pendejos, a los pobres y a las putas. Semejante concepción de la justicia no solo es vergonzante sino clarificadora del funcionamiento del Estado mexicano. Simulación en todos los ámbitos.  La sucesión de presidentes del mismo partido único de Estado y de los panistas aseguraba que la corrupción tendría su correlato de impunidad. Todo asegurado por el pacto de los gobernantes.

 

Ahora bien, el pueblo se cansó de este pensamiento y, su práctica debido a que todas las fuerzas, hechos, actos y conciencia nacional y extranjera dieron ese resultado y se decantaron por dar fin a toda una época. No hay ya futuro para el priismo y el panismo tardará un buen tiempo en recuperarse y será según se alejen de la corrupción, no antes. Toda la gritería vulgar que tienen no tiene como fin lograr posiciones positivas en la política, se trata únicamente del estado psicológico de la derrota. Desde la Reforma e intervención francesa los conservadores no habían sufrido una derrota de esta magnitud. Lo peor para los panistas no es la derrota sino estar realmente impotentes para poder reaccionar y menos accionar; ni siquiera pueden ser reaccionarios; se quedan en la simple histeria. De la misma manera, para los priistas la derrota no es lo peor sino el abismo que se les presenta como única vía: su desaparición inmediata.  

 

En efecto, esto no tiene vuelta y de lo que se deberían estar preocupados y ocupados los políticos, gobernantes, simpatizantes y pueblo en general, es de cambiar en ciento ochenta grados este régimen y que, en lugar de desear, premiar y seguir las conductas corruptas seguidas de la impunidad se privilegie el correspondiente buen pago a los mejores trabajadores, a los que tienen creatividad y ni se diga s los que inventan en beneficio de los demás. Se debe aportar antes de pedir o solicitar a la república.  

 

Que no se engañen los nuevos y viejos políticos que han llegado al poder público del partido MORENA, no se les firmó, por pate de los electores, un cheque en blanco para que hagan lo mismo que los priistas y panistas. Si no se vuelcan a la democracia, a la legalidad, a la legitimidad y no observan una moral superior tendrán que enfrentarse al pueblo y tengan por seguro que no habrá cuartel ni perdón ni olvido por su mal comportamiento. No más corrupción, no más impunidad.  

 

La base del nuevo régimen debe ser la justicia positiva y efectiva, la legalidad y legitimidad sin simulación ni torceduras, la solidaridad y oportunidad irrestricta a todos. Que las virtudes, las capacidades, la observancia a las leyes benéficas sean las únicas ventajas que tengan los que los tengan y que las mismas no sean extremas. Porque dos defectos humanos se saben: la pobreza extrema y la riqueza extrema. Siempre se puede corregir y por esta corrección yo venero al pueblo mexicano.

 

Volvamos a decirlo, si este gobierno no tiene la intención de poner las virtudes y la ley como eje de la vida del pueblo mexicano el esfuerzo de millones será nulo; habrán echado al cesto de la basura la vida de todos estos buenos mexicanos. No crean que el esfuerzo es menos, no crean que se les eligió para ser priistas o panistas sino para que cumplan con la voluntad soberana del pueblo. Yo hago responsable a todos y cada uno de los servidores públicos que están ejerciendo por MORENA y que no les quepa duda de que serán combatidos oportunamente. Hagan su trabajo y muchos no son merecedores de estar en esos puestos, pero ya están ahí, hagan su mejor esfuerzo y en caso contrario, la nación, el pueblo se los va a reclamar. Todo ha cambiado.


jueves, 6 de agosto de 2020

RELIGIÓN Y FUEROS, AYER. CORRUPCIÓN E IMPUNIDAD, HOY.

 

RELIGIÓN Y FUEROS, AYER. CORRUPCIÓN E IMPUNIDAD, HOY. 

 

Con la llegada de los religiosos a México se gestó el conservadurismo que tiene como base para la vida “La Biblia”, con todos sus dogmas estáticos. La guerra de Reforma fue la confrontación sin cuartel entre liberales y conservadores. Los primeros querían poner coto al enorme poder político, social y económico que habían acumulado las órdenes religiosas.

 

Los primeros religiosos que llegaron al imperio mexica fueron modestos y con la firma intención de convertir, a los que llamaban idolatras, al cristianismo, pero pronto se hicieron adictos al poder terrenal y a las riquezas; muestras de lo anterior son los suntuosos templos, iglesias y conventos construidos en esas épocas. Las constantes confrontaciones entre las órdenes religiosas y los virreyes se sumaron, a las confrontaciones entre los propios españoles por el poder y las riquezas. La acumulación de poder terrenal que acumularon los religiosos se fue acrecentando hasta el punto de abarcar toda la vida de los mexicanos. La separación del Estado eclesiástico del Estado Civil era una necesidad que iba a decantarse en una confrontación entre los conservadores, en su especie de religiosos y en su especie de sociedad civil contra los liberales puros y moderados por la reforma que les quitaba fueros a religiosos y soldados.

 

Todo se trata de poder terrenal obtenido sin trabajar y sin responsabilidad alguna y esa fue la base de la contrarrevolución que hicieron los conservadores contra las Leyes de Reforma y su instrumento lo fue el general Rómulo Díaz de la Vega. Si bien había elementos armados, del ejército y, sacerdotes que pretendían que los fueros religiosos y castrenses no perdieran su vigencia también había conservadores civiles que luchaban por la misma causa a efecto de seguir viviendo con todo lujo y pompa a costa del pueblo. Este ha sido el mal del conservadurismo: Creer que están destinados por derecho divino a liderar y gobernar al pueblo mexicano sin ninguna responsabilidad. El problema viene de lejos y parce interminable, aunque hoy, los conservadores se encuentren en la misma situación de derrota moral, política y social que los mantiene en le descredito total.

 

Ahora bien, los métodos que han utilizado los conservadores en su lucha política son de no creerse: los rumores, las mentiras, las invenciones y toda una gama de recursos propios de pillos y delincuentes a los grados inauditos. En efecto, la prensa conservadora se encargaba de esparcir los más grandes y absurdos rumores como el siguiente: “…que los caudillos de la revolución habían celebrado un tratado con el gobierno de Estados Unidos para establecer en México un protectorado norteamericano. Los periódicos liberales lo desmintieron enérgicamente, y dos Juan Álvarez expresó su indignación contra semejante infundio afirmando que sólo podía ser obra de un miserable. A su vez el ministro norteamericano, MR. James Gadsden público una declaración oficial que desmentía formalmente el absurdo rumor”[1].

 

Por el otro lado, el liberal “También reinaba el desconcierto en el seno del mismo gobierno. La crisis ministerial provocada por la renuncia de Ocampo no tuvo termino en el corto periodo de la presidencia de Álvarez. No admitieron la cartera de Relaciones dos Joaquín Cardoso, don José María Lafragua, don Luis de la Rosa y don Pedro Escudero y Echánove, que fueron sucesivamente nombrados; lo mismo que don Santos Degollado, a quien se ofreció la de fomento. Por último se hizo cargo de la de Relaciones dos Miguel Arrioja”[2].

 

Es interesante saber que las mismas viejas pasiones y los mismos métodos han sido usados por las partes políticas en conflicto. Estamos viendo en el presente (06/08/20), un símil de aquellas viejas pugnas entre conservadores y liberales. Hoy, se trata ya no de quitar fueros eclesiásticos y militares sino de entrar a la democracia, la legalidad, la legitimidad, la justicia y quitar los viejos fueros no escritos de la corrupción e impunidad. Y, precisamente se da principalmente entre liberales (panistas, priistas y sacerdocio) versus liberales (las llamadas izquierdas mexicanas); esto, debe decirse que no es en pureza pues pueden verse elementos conservadores integrados a las izquierdas y esto es puramente por conveniencia política y de puestos en el gobierno.

 

Las estrategias metodológicas del panismo son los rumores absurdos tales como que, este nuevo régimen gubernamental va a transformar el Estado mexicano en otra Cuba, en otra Venezuela. En esta misma línea inventan que el presidente de la república es comunista y hacen un llamado al pueblo para destituirlo u orillarlo a renunciar. Con indecible candidez, los conservadores, se han lanzado a las calles con la mayor pompa posible a dar el espectáculo más esclarecedor de su naturaleza pues han mostrado y demostrado que tienen un conocimiento muy magro o de plano torcido de la realidad; esto, debido a su educación que no alcanza a llegar al nivel de preparatoria y hay muchos ejemplos de franca ignorancia. En este contexto, bien puede decirse que no son obstáculo para que se imponga el nuevo régimen estatal que además seguirá siendo Neoliberal.

 

Finalmente, se debe decir que el actual gobierno está compuesto por políticos poco duchos, otros llevados por intereses económicos, otros mas que han hecho de la política su forma de vida y muchos ignorantes. Y, es paradójico y la oposición ve con total desconcierto como avanza el nuevo régimen político sin que el gobierno pierda la popularidad necesaria para sepultar al viejo régimen.

 

Los superfluos y románticos esperan que una transición sea tersa, perfecta, sin exabruptos, errores y de plano dislates, pero la realidad es como es y no admite apelación alguna en su marcha. La oposición debería comprender que, debe abandonar sus métodos inocuos y hasta infantiles además de perversos para tratar de volver al poder. Tienen un gran problema de credibilidad y con rumores y noticias falsas no van a lograr recuperar la credibilidad que algún día tuvieron si no se vuelven políticos serios, honrados y que en verdad se preocupen y ocupen del pueblo; es decir, que se vuelvan democráticos y abandonen totalmente la corrupción y la impunidad. Pero mucho me temo que no tienen la materia gris para ello.



[1] Vicente Riva Palacio y otros. Resumen Integral de México a través de los Siglos Tomo V.

México. 1969. Ed. Compañía General de Ediciones, S. A. – México. Pág. 26.

[2] Vicente Riva Palacio y otros. Resumen Integral de México a través de los Siglos Tomo V.

México. 1969. Ed. Compañía General de Ediciones, S. A. – México. Pág. 35.

 


martes, 4 de agosto de 2020

EL ARTE POPULAR EN MÉXICO


EL ARTE POPULAR EN MÉXICO

 

El arte es una de las pautas que hay que seguir para saber hacia dónde se dirige una sociedad. Y, los mexicanos hemos estado perdidos, siguiendo caminos extraviados sin poder encontrarnos; es interesante y será sorprendente cuando el pueblo mexicano se encuentre, asimismo. La dictadura del partido único de Estado trajo como consecuencia la estrechez de la creación en todos sus ámbitos y el arte fue uno de ellos. En la música se impuso el machismo como forma de ver y actuar en la vida. Con todo el potencial que tiene el pueblo mexicano se le sujetó a formas desviadas del verdadero arte libre. Dos ejemplos.

 

En la comicidad en, donde los griegos son modelos a seguir se prefirió crear y difundir la más ñoña de las formas que encabezó Roberto Gómez Bolaños. Bolaños, supo de inmediato que incursionó en el arte que, no tenía la mínima posibilidad de alcanzar las alturas a las que pretendía. Al leer a William Shakespeare, Bolaños se sintió tan pequeño, tan insignificante que se auto impuso el mote de Chespirito como estigma para engañar a las masas latinoamericanas y estas cayeron en el garlito. Pasarían décadas antes de que este mal cayera. Para bien o mal esto empieza terminar. ¿Cómo pudo un personaje símbolo de la decadencia haber cautivado a millones?. Las masas eran decadentes. Aceptar la estupidez como forma de distracción fue un error fatal. Todos los personajes de Chespirito son decadentes, son basura. Afortunadamente esto empieza a cambiar y los mexicanos deberíamos crear una nueva mentalidad que sea aún más fuerte y proyectarla en héroes imaginarios que vayan acordes.  

 

El otro ejemplo, es Alejandro Lora, este hombre nació sin las limitaciones económicas, académicas y sociales que a las mayorías aquejan. Con todos los elementos básicos de sobra Lora, pudo haber alcanzado la finura en el blues, en el rock y, sin embargo, prefirió ser otro Chespirito, en este caso del rock. Se hizo una caricatura, se vendió a granel entre el público inculto y con esto llevó a la mediocridad a un sinnúmero de mexicanos. Esto es lastimoso y de vergüenza.

 

Que deben existir mediocres en el arte es innegable, pero un pueblo no debe tener como paradigmas a héroes con pies de barro pues eso muestra y demuestra su decadencia. Que esto ocurra en México no es motivo de orgullo sino de preocupación y de ocupación para redirigir estos hacia nuevos horizontes que lleguen redescubrir al verdadero pueblo mexicano como creador, como artista de largos alcances. Esto no es una mera especulación si no un llamado a pasar de la potencia al cato mismo y hay con que responder a este llamado pues nuestro asado genético está latente en espera de ser escuchado.


miércoles, 22 de julio de 2020

LA MORAL DEL PUEBLO MEXICANO


LA MORAL DEL PUEBLO MEXICANO

 

Es interesante ver como durante el Presidencialismo aun siendo el pueblo mexicano muy religioso su moral era, evidentemente, discorde con el catolicismo y esto permitió que todo el Estado mexicano se corrompiera hasta su médula. El régimen tenía necesidad de ciudadanos sumisos, pero altamente corrompibles y mas tarde corruptos durante generaciones al punto de parecer que era imposible terminar con esta época. Esto no fue así; la economía Neoliberal necesita de un Estado donde impere la legalidad, legitimidad, libertad y los derechos humanos y esto no lo podía proporcionar el viejo régimen. Era menester de terminar con el Presidencialismo (gobierno de un solo hombre, de un solo partido), e imponer un Estado democrático; sin que esto signifique por si, justeza sino el inicio de una nueva era con un nuevo régimen que será el resultado de todos los actores internos y externos ni más ni menos.

 

Es de resaltar que, la moral de una buena parte del pueblo mexicano haya cambiado de manera positiva porque en tiempos de zozobra como en estos momentos se podría esperar que, el pueblo llano se volcara hacia los saqueos acicateado por el hambre, las enfermedades y la economía tan difícil; pero no, eso no ha pasado y difícilmente va a pasar. Esto es lo que sostiene al actual gobierno, la moral de una buena parte del pueblo mexicano, sin este elemento moral no habría gobierno sino caos.

 

Esto es lo que no logran asimilar los políticos opositores al actual gobierno que haya un pueblo que se libró de la moral conservadora e hipócrita del viejo régimen y haya elegido una moral positiva y activa que impulsa el cambio de régimen cerrado y totalitarista hacia un régimen abierto en donde los ciudadanos son parte activa de la vida nacional pública.

 

Los políticos de los diversos partidos pueden hacer las alianzas que gusten pues en una democracia no se debe ni se puede coartar la libertad política; con todo, querer obtener el poder público a través de la vieja política con políticos viejos o a la vieja usanza es garantía de fracaso. Los partidos deben renovarse y seguir la senda de la moral y no únicamente de la política para tratar de volver al poder; eso, los partidos que tienen sentido su existencia pues hay algunos que inevitablemente desparecerán. Lo quieran o no. La derrota moral a pasado más que la caída política y esto va para largo.


martes, 21 de julio de 2020

EL IMPERIO MEXICA SIN IDENTIDAD NACIONAL


EL IMPERIO MEXICA SIN IDENTIDAD NACIONAL

 

El pueblo mexica es sorprendente en toda su historia, incluso en su caída pues fue un pueblo nómada que llegó al Anáhuac y, se instaló en el lago y fundó la ciudad de México- Tenochtitlan, corazón del imperio. El rápido expansionismo de lo que llegó a ser el imperio mexica fue sorprendente por su rapidez pues ya con Moctezuma I (1398-1469), quien fue electo como Huey Tlatoani en 1440, se profundizó el expansionismo y no hubiera parado sin el hecho de la llegada de los españoles. Con todo, la propia caída de los mexicanos es gloriosa pues nuca se rindieron a pesar de las condiciones de hambre y de estar sitiados por muchos de los pueblos que tenían sometidos.

 

Ahora bien, la derrota del imperio mexica, no se puede explicar sin tener en cuenta la gran variedad de pueblos que habían dominado que no por estar en estas condiciones, sentían la imperiosa necesidad de mantener su identidad; se sentían tan ajenos a sus conquistadores y los mexicanos nunca les importó tratar de crear una identidad nacional. No había una nación sino una pluralidad de pueblos o naciones con francas diferencias de identidad. En efecto, el sentimiento de identidad de cada pueblo era tan arraigado que incluso, aunque los mexicanos hubieran tratado de crear esa identidad, nunca lo hubieran logrado. Es bien sabido que, nuestra identidad como mexicanos se forjó (no totalmente), después de 400 años con un esfuerzo enorme de muchos intelectuales mexicanos junto con todo el pueblo.

 

Bien, la grandeza guerrera no fue suficiente para mantener el imperio, hacía falta una identidad que quizá nunca se pensó y nunca se hizo. Quizá los gobernantes mexicanos junto con toda la nobleza se dieron cuenta del peligro respecto a la falta de identidad de su imperio y por ello no incitaron a los pueblos que gobernaban a dar batalla contra los españoles que, a más, nunca llegaron a mil en la hora decisiva de la caída del imperio mexica. Esa falta de identidad fue, a mi perecer, el elemento más importante para la derrota de los mexicanos. Si hubiera habido identidad nacional, mil aventureros no habrían logrado su fin. No le demos más importancia de la que tuvieron los españoles en este hecho histórico pues lograda la identidad nacional incipiente, los españoles dejaron de tener el poder político, económico y social al lograrse la independencia de los mismos.

 

En estos temas como en todos hay que mantener la frialdad e imparcialidad suficiente para no extraviarse y encontrar la salida segura del laberinto que nos presentan los hechos narrados, por lo menos de Hernán Cortes y Bernal Díaz del Castillo, que quieren a toda costa ser ponderados como súper hombres que lograron lo impensable por derecho propio. No hay tal. Las condiciones y circunstancias estaban dadas. De otro modo hubieran sido un chiste. Los mexicanos de antaño y de hoy no somos ni más ni menos que cualquier otro pueblo que se jacte de ser valeroso, artístico, inteligente y lo que se pueda decir. Quitémonos los prejuicios y las malas ideas. Seamos actores principales en este mundo sin cerrase a las demás posibilidades de ser de otros pueblos. No tengo duda alguna de esto.


viernes, 17 de julio de 2020

DERECHOS GANADOS CON LA CAÍDA DEL PRESIDENCIALISMO


DERECHOS GANADOS CON LA CAÍDA DEL PRESIDENCIALISMO

 

En el régimen Presidencialista los ciudadanos eran meros comparsas del presidente en turno pues este decidía tanto en lo público como en lo privado como debería ser la vida. Prácticamente no había ciudadanos sino una especie de siervos sometidos al partido único de Estado liderado por el presidente de la república en turno. El totalitarismo político, económico y social derivaba en lo artístico, en lo religioso, en la forma de ser de los mexicanos, se quisiera o no. Esto empezó a terminarse el 1 de julio de 2018. 

 

Con la caída del régimen priista, los mexicanos pasamos de ser siervos o semi siervos a ciudadanos libres, en el contexto de la democracia burguesa neoliberal, este sistema económico tenia menester de que se impusiera una democracia con los elementos inherentes al mismo sistema. Esto no es malo por sí mismo pues son los pueblos los que en primera y última instancia pueden decidir el derrotero que deben tomar.

 

Entre los derechos ganados está el derecho soberano que tiene el pueblo de pedir cuentas a sus gobernantes que hayan sido electos legal y legítimamente; no más ciudadanos pasivos. Bien, este derecho se había ejercido ya en el viejo régimen Presidencial pero pocas veces se hacía efectivo el lema “…o que la nación me lo demande”, a través de las acciones legales civiles, administrativas y menos las penales. Esto ha cambiado de manera hoy, hay diversos personajes de primera línea como secretarios de gobierno o gobernadores enfrentando las consecuencias legales por su proceder corrupto mientras fungían como servidores públicos. Eso es lo correcto y no debe desviarse el camino.

 

No hay movimiento, cambio político o de cualquier índole que sea puro pues esto cae en el quehacer humano imperfecto por donde se le quiera ver. Con todo, la gran tarea que tienen los militantes de MORENA, es tratar de mantener al partido lejos de la corrupción e inmediatamente que se localice un foco de corrupción actuar en consecuencia. Esto puede pasar o no pues hay fanatismo y dogmatismo en muchos miembros de este instituto. Sin embargo, es el pueblo el que debe no pedir sino exigir que se rindan cuentas claras de los funcionarios públicos; desde el presidente de la republica hasta el más modesto de los funcionarios. Es un atributo del pueblo ser soberano y, por ende, portarse como tal y no dejarse engatusar y volver al pasado con el camuflaje del futuro.

 

Hay quienes no quieren y a toda costa tratan de impedir que se cuestione a los funcionarios actuales y eso va en contra de los principios democráticos y los intereses del pueblo soberano. A esos ciudadanos les debe quedar claro que la época de “Los caudillos”, ha terminado y que ha llegado la hora de los ciudadanos. Tratar de callar al pueblo es antidemocrático. En todo caso, se debe ver bien para saber cuándo es un hecho o acto político de una exigencia de rendición verdadera de cuentas y de este procedimiento no debe quedar ni uno solo de los funcionarios públicos pues esto es fundamental para mantener la salud el Estado mexicano.

 

Sería una locura que, el pueblo haya logrado conquistar los derechos democráticos en la realidad y, por meros deseos y viejas prácticas renuncie a su soberano derecho de exigir cuentas a sus gobernantes; esos son polvos del lodo priista. Es de no creerse que los propios militantes de Morena pidan se vuelva al pasado. La lucha habría sido infructuosa. ¿Acaso ignoran que entre los funcionarios del actual gobierno hay delincuentes, pillos, arribistas, recomendados y toda clase de fauna nociva que el único fin que tienen, sin tener calidad alguna, de hacerse ricos y vivir a costillas del pueblo como si este fuera ganado?.

 

Se debe luchar por ideales, por derechos nunca más por caudillos, partidos o clases sociales aisladas dentro de las libertades de todo tipo. Este y no otro es el sentido de la democracia actual. En este contexto, si la Cuarta Transformación, se tuerce, se debe volver al campo de batalla político e imponer el poder soberano del pueblo para corregir las torceduras de todo tipo.  Que todos los funcionarios corruptos se les aplique la ley no más impunidad.