lunes, 29 de octubre de 2018

DE LOS ANTIGUOS MEXICANOS




Sobre los mexicanos se han dicho más mentiras o prejuicios ideológicos que de muchos otros pueblos y esto no puede ser de otra forma pues se trataba y se trata de someter el peligro. Y, vaya que los mexicas eran bravos como pocos. Es una lástima que se haya perdido su bravura general y su cultura por una forma cultural ñoña. Decadente y sin futuro glorioso. .Me basta con repasar la historia de estos seres humanos para ponderar bien sus costumbres, su arte, su economía, su filosofía, su estructura social. Los romanos se tardaron alrededor de siete siglos para imponer su fuerza y crear un imperio; los mexicas doscientos años. Claro, la historia la escriben los “vencedores” pero la escriben mal.

Hernán Cortés al escribir sus “Cartas de Relación”, tuvo mucho cuidado de seguir el camino de Julio César al escribir los “Comentarios a la Guerra de las Galias”, quedar bien con el Senado romano y con el pueblo. Se entiende perfectamente la necesidad de Cortes por pasar por un semidiós que dominó a capricho al pueblo más adelantado de lo que hoy llamamos México y como consecuencia el imperio mexica. La verdad es otra. El mismo Cortés nos la cuenta. Pero nos cuenta la revolución de los pueblos sometidos a los mexicanos con él, y los demás españoles como los actores principales. Como casi todos los extranjeros, Cortés no entendió ni conoció a los mexicanos. Fue beneficiario de la derrota que le infringieron los pueblos sometidos al poder mexica pero no su vencedor.

Mil españoles no hubieran podido derrotar a los mexicanos y Cortes lo sabía pues se regocija con los apoyos que va recibiendo en su travesía y se envalentona y no se trata de quitarle méritos de ninguna clase pero tampoco aceptar la ideología de la superioridad de ninguna clase pues allí donde se esgrime superioridad de raza o de cualquier otra clase yo veo prejuicios, ideología y miedo disfrazado de superioridad.

Hay episodios que se ve calaron hondo en Cortés y no pudo dejar de darnos testimonio de ello. Pensando en poder amedrentar a los mexicanos cuando ya estaban disminuidos por la peste; había ya muerto los mejores gobernantes y guerreros; con muchos pueblos ya aliados o confederados en contra de los mexicas  se atrevió a amenazarlos con dejarlos morir de hambre y esto es lo que le contestaron en ese episodio para mi lleno de valor y de alegría por la vida y la muerte:

“”Y muchas veces fingían que nos daban lugar para que entrásemos dentro, diciéndonos: “Entrad, entrad a holgarnos”; y otras veces nos decían : “¿Pensáis que hay ahora otro Mutezuma, para que haga que haga todo lo que vosotros quisiéredes?”. Y estando en estas pláticas yo me llegué una vez cerca de una puente que tenían quitada, y y estando ellos de la otra parte, hice señal a los nuestros que estuviesen quedos; y ellos también, como vieron que yo les quería hablar, hicieron callar a su gente, y díjeles que por qué eran locos y querían ser destruidos. Y si había allí entre ellos algún señor principal de los de la ciudad, que se llegase allí, porque le quería hablar. Y ellos me respondieron que toda aquella multitud de gente de guerra que por allí veía, que todos eran señores; por tanto, que dijese lo que quería. Y como yo no respondí cosa alguna, comenzáronme a deshonrar; y no se quie3n de los nuestros díjoles que se morían de hambre y que no les habíamos de dejar salir de allí a buscar de comer. Y respondieron que ellos no tenían necesidad, y cuando la tuviesen, que de nosotros y de los de Tascaltecal comerían. Y uno de ellos tomó unas tortas de maíz y arrójolas hacia nosotros diciendo: “Tomad y comed, si tenéis hambre, que nosotros ninguna tenemos. Y comenzaron luego a gritar y pelear con nosotros”[1].

De allí hasta ahora los extranjeros tienen esos comportamientos bastardos. No conocen al pueblo mexicano del cual somos legales y legítimos herederos pero aquí y ahora inicia nuestro renacimiento y si no perezcamos con valor que de todos modos vamos a morir en algún momento, en algún buen o mal día. ¿Qué se han creído estos pequeños bastardos?. ¡Qué forma de vida, de valentía, de cortesía y de saber responder a la altura de cualquier pueblo sometido a un final ya previsto!.

¿Dónde se han dado este tipo de cortesías y de grandeza?. No en el pueblo español en estos momentos ni en estas circunstancias ni en ningún pueblo contemporáneo. Como dice el Maestro Sergio Ruiz arias, no me pidan escribir únicamente con la razón, escribo con las entrañas entrenadas para estos casos.

¿Qué respeto me merece Cortés, cuando casi siempre calla?, poco, muy poco y a los demás farsantes menos. Hoy como ayer vienen con cuentas y espejo a tratar de embaucarnos pero eso nunca fue y se termina la pantomima ahora. Estamos armados hasta los dientes y con el valor de nuestros antepasados. Nuestras ramas la fuerza, la democracia, la libertad, la ciencia, la filosofía, el trabajo y por sobre todo la alta inteligencia y el amor por la vida y la muerte inevitable.

La consigna mexicana a pesar de, es nunca ser vencidos aunque así parezca, nuestras raíces se imbrican sin falsedades hasta Huitzilopochtli, Quetzalcóatl y el Mictlán, pasando por todo el repertorio de dioses mexicas. Avancemos sin miedo ni temor. Esos seres humanos eran increíbles, hagámonos increíbles. Adelante. Voy.  




[1] Cortés. Cartas de Relación.
México. Editorial Porrua. Colección "Sepan Cuantos...”. Págs. 149, 150  

sábado, 20 de octubre de 2018

LA MIGRACIÓN





La migración generalmente es por hambre o por violencia generalizada y estos dos elementos están en los Estados centroamericanos como el hondureño. Y, de esta tragedia colectiva somos responsables todo pero con mayor responsabilidad y culpabilidad los gobiernos de estos Estados y el estadunidense que manipula la economía, impone gobiernos por la fuerza de las armas y permite gobiernos a su conveniencia. ¿Donald Trump con que autoridad de cualquier clase se opone a que los pobres vayan en busca de lo más elemental: comida?. ¿Con que autoridad Enrique Peña Nieto se convierte en policía de los estadunidenses?.

La crisis de autoridad política proviene de la falta de calidad ética, moral y legal de los políticos de todo el mundo incluyendo a los políticos mexicanos de todos los partidos. La corrupción de los políticos mexicanos ha creado a millones de migrantes y la mayoría está en los Estados Unidos. Y, nos cansamos de quejarnos de los malos tratos de los estadunidenses y cuando pisan el suelo llamado mexicano nos convertimos en europeos, en estadounidenses y mostramos nuestros más bajos instintos contra los que deberíamos ver y tratar como lo que son, si no nuestros hermanos, nuestros iguales de pleno derecho natural y positivo.

Son los estadunidenses los que despojaron a México de más de dos millones de kilómetros cuadrados de territorio impunemente con un tratado impuesto por la fuerza de las armas. Es hora de dejar de ser sus sirvientes. Si hemos de morir que, de todos modos algún día pasará, que así sea pero no más vida indigna. ¿En qué diablos nos hemos convertido?.

Esta crisis humanitaria no se va a arreglar con injurias ni a palos ni con la fuerza bruta como están acostumbrados los gobernantes. Que dejen de ser corruptos y en su caso que se les juzgue por ello pero no más totalitarismo represor. Se nos ha enseñado y domesticado a que el mundo tiene dueño y se han armado hasta los dientes los Estados poderosos a efecto de mantener esta mentira. El mundo debe ser de todos y todos debemos tener derecho a vivir en este mundo sin tener que ser de segunda o tercera calidad humana.

Los gobernantes quieren reprimir a otros seres humanos que lo hagan ellos mismos y no solo me niego sino que me opongo a ello porque los gobernantes han sido los responsables directos de tanta pobreza y nosotros los responsables indirectos de lo mismo al elegir a tantos sinvergüenzas sin vigilancia efectiva y soberana.

Este tipo de problemas no se van a resolver con un sí o un no, o siguiendo órdenes inhumanas. Que existen peligros en dejar pasar a los hondureños ni dudarlo pero sería más peligroso e indigno ser los perros guardianes de los culpables de estos desastres. Y, en todo caso somos los herederos de los mexicanos y deberíamos comportarnos con dignidad. ¿No pasa lo mismo en México, hambre y violencia generalizada?. Esta es la causa de que millones de mexicanos hayan ido a  conquistar lo despojado.

Este uno de julio de dos mil dieciocho se ha dicho que por el bien de todos primero los pobres. ¿Cuáles pobres, únicamente los mexicanos pobres?, si es así que pobreza mental y humana. La especie humana es una y lo que afecte a una de sus partes afecta a toda. Quizá un mundo sin dueños y sin el prejuicio de las razas superiores sea una utopía hoy pero no es inalcanzable si en verdad se impone la democracia en todo el mundo. Y, como antiguos poseedores de más de dos millones y medio del territorio ahora estadounidense deberíamos pensar en qué hacer y no obedecer simplemente órdenes. El Derecho impuesto por la fuerza, sea cual sea esta, no es Derecho sino tiranía.

viernes, 19 de octubre de 2018

LOS ESPAÑOLES EN LUCHA CONTRA LOS TLAXCALTECAS




Los tlaxcaltecas fueron guerreros muy valientes y no podía ser de otra manera pues pertenecían al mismo grupo de pueblos que llegaron a poblar en las orillas del lago de Texcoco.  Pero tuvieron problemas con otros pueblos y aunque resultaron victoriosos decidieron emigrar y uno de los tres grupos en que se dividieron llegó a las faldas de lo que hoy se llama “La Malinche”. Sus dominios no eran muy grandes pero eran tan valientes que los mexicanos nunca los pudieron vencer y fueron los que terminaron venciéndolos.

Los españoles como Hernán Cortés y Bernal Díaz del Castillo nos han dejado testimonios de su paso por el territorio de los tlaxcaltecas y como se hicieron aliados. Ahora bien, los demás historiadores siguen a estos dos personajes pero también siguen sus errores evidentes por no decir mentiras. En efecto, si no se piensa en la veracidad de los hechos y se siguen opiniones ciegamente se llega a narrativas inverosímiles.

Es inverosímil lo que cuentan tanto Cortés como Díaz del Castillo cuando pelearon contra los tlaxcaltecas. El consejo de los cuatro partes en que estaba dividido el reino de este pueblo ya habían decido darles guerra a los españoles. Únicamente recordemos que tenían al mismo Dios de la guerra que los aztecas pero lo llamaban Camaxtle y tenían las mismas fuerzas especiales, caballeros ocelote y águilas. Con todo su poderío los mexicanos nunca pudieron vencerlos pero ni de lejos.

Es necesario hacer una revisión detallada, razonable y cuando sea posible comprobable.

Es entendible que quienes estuvieran en tierras extrañas con personas extrañas sintieran miedo o temor extraordinarios y que solo su fortaleza los hiciera salir del trance pero no se puede aceptar que después de pasado el omento sigan sosteniendo sus visiones increíbles como verdades y estos es lo que les pasó a los dos españoles como a los que los siguieron. En lo que ahora es México, los españoles no pasaron de 1,000. Aquí va lo que narra William H. Prescott con base en lo que escribieron Cortés y Díaz del Castillo:

“Los indios sostuvieron el campo por un rato con valor, y luego se retiraron precipitadamente, pero no en desorden.[1] Los españoles, cuya sangre estaba enardecida por el encuentro, continuaron su victoria con más celo que prudencia, permitiendo que el astuto enemigo los condujese a una estrecha cañada o desfiladero, interceptado por un pequeño arroyo, cuyo quebrado terreno era muy desfavorable para la artillería. Avanzando con el fin de salir de esta peligrosa posición, y al voltear un ángulo del camino, vieron un numeroso ejército cerrando la garganta del valle, y extendiéndose sobre las llanuras que le seguían. A los asombrados ojos de Cortés parecieron cien mil hombres, siendo así que ningún cálculo los estima en más de treinta mil. [2].

Después de una escaramuza y ya entrando en plena batalla, esto dicen los españoles que pasó y perdónenme pero me parece más como si los españoles fueran la “Liga de la justicia” o un milagro bíblico donde van acomodando los hechos:

Arrollado el enemigo por la caballería, y despedazado por las herraduras de su fogosos corceles, gradualmente comenzó a ceder el campo. En todo este terrible encuentro, los indios aliados fueron de gran servicio a los españoles. Se arrojaban al agua, acometiendo a sus adversarios con la desesperación de hombres que conocían “que su única seguridad estaba en la poca esperanza que alimentaba de salvarse”.[3] “No veo sino la muerte para nosotros –dijo un jefe cempoalteca a Marina -; nunca conseguiremos pasar vivos.” “El Dios de los cristianos está con nosotros  -contestó la intrépida mujer-, y él nos conducirá salvos y seguros.”[4]

En el estruendo del combate se escuchaba la voz de Cortés alentando a sus soldados. “Si sucumbimos ahora-exclamaba -, la cruz de Cristo nunca podrá plantarse en el país. Adelante, camaradas. ¿Cuándo se ha oído que un castellano vuelva la espalda al enemigo?.[5] Animados los españoles con las palabras y heroica conducta de su general, después de desesperados esfuerzos lograron al fin forzar un paso por entre las espesas columnas del enemigo y salir del desfiladero a un extenso llano.”

Si después de leer esto no sonríe uno por lo inverosímil y se da uno plena cuenta de estar leyendo hechos inexactos que por desgracia no podremos saber cómo realmente ocurrieron por obvias razones, estaremos manteniéndonos en la adolescencia. Se ve clara la intención ideología de hacer pasar como superior lo europeo donde se incrusta lo español. La superioridad de la que se jactan es ilusoria. Con únicamente rodearlos en un terreno que conocían perfectamente, los tlaxcaltecas a los españoles; estos hubieran servido para el sacrificio sin ninguna duda. Está muy lejos de decirse la última palabra verdadera en este tópico.  


Prescott, H. William. Historia de la Conquista de México
México, 2000. Porrúa. Colección “Sepan cuantos…”. Pág. 199, 200




[1] “Una gentil contienda”, dice Gómara, hablando de esta escaramuza. Crónica, cap. 46.
[2] “Rel. seg” de Cortés, en Lorenzana, pág. 51. Según Gómara (Crónica, cap. 46), el enemigo contaba ochenta mil hombres, y lo mismo dice Ixtlixóchitl.  (Hist. Chich., MS cap. 83.1) Bernal Díaz asegura que eran más de cuarenta mil (Historia de la conquista, cap. 63); pero Herrera (Historia general, déc. 2. Lib. 4, cap. 20) reducen el número a treinta mil. Sería tan fácil contar las hojas de un bosque como las confusas filas de los bárbaros. Como este solo era uno de los varios ejércitos mantenidos por los tlaxcaltecas, la suma menor de las sobredichas es probablemente excesiva, pues toda la población del Estado, según Clavigero, quien probablemente no había de reducirla a menos de la que realmente era, no excedía de medio millón. Stor. Del Messico, tomo I, pág. 156.
[3] “Una illis fuit spes salutis, desperasse de salute.” (“Su única esperanza de salvación fue precisamente haber desesperado de ella.”) [MC] P. Mártir de Angleria, De Orbe Novo, déc. V. cap. I. Esta dicho esto con la energía clásica de Tácito.  
[4] “Respondióle Marina, que no tuviere miedo, porque el Dios de los cristianos, que es muy poderoso, y los quería mucho, los sacaría de peligro.” Herrera, Historia general. déc. 2. Lib. 6. Cap. 5
[5] Ibíd., ubi supra.


LA GRAN HIPOCRESÍA SEXUAL




La diversidad sexual ha existido desde que la humanidad tiene existencia. Eso no lo tenemos documentado. Lo que si tenemos documentado es que los gobernantes egipcios que eran familiares se casaban entre sí como una forma de no degenerar, según ellos pues se creían divinos. Pero la diversidad sexual no nació espontáneamente existió antes de que se documentara.  

Lo que si tenemos documentado es que entre los griegos la homosexualidad ni la pedofilia eran vistos como pecados o fuera de la ley. Era normal y común que los hombres tuvieran relaciones sexuales y no por ello dejaban de ser hombres. Se sabe que el conquistador griego por excelencia, Alejandro Magno era abiertamente homosexual y bisexual, tuvo relaciones con hombres pero su preferido fue Hefestión uno de sus lugartenientes y tuvo diversas esposas.

Entre los romanos también era normal y común que los hombres tuvieran amantes hombres pero se veía mal que los hombres tuvieran el puesto o actitud pasiva. Tal es el caso de Julio Cesar quien al estar en bitinia se dice que tuvo una actitud pasiva en una relación sexual con el rey de Bitinia; incluso sus soldados le cantaban verso al respecto. Como se sabe el Cesar fue quien termino con la república romana y dejo puesto todo para el imperio romano. Conquistó la Galia, fue escritor y un hombre muy valiente y culto.

Con la caída del imperio romano se cambió la escala de valores y se tuvo como pecaminosas lo que no estuviera de acuerdo al modelo de la familia que se describe en el Génesis: padre, madre e hijos. Toda una larga vigencia de la teología  cristiana a proscrito la diversidad sexual a los rincones, al ocultamiento, a la represión de los impulsos.

La sociedad ha adoptado la teología católica y la impuesto a los usos sociales con lo que la represión, persecución y condena de los comportamientos sexuales diversos a los dictados por los religiosos. Ahora bien, se ha ocultado y reprimido la diversidad sexual pero no ha desaparecido porque es inherente a la Humanidad en general y, a ciertas personas en lo particular. En efecto, si esto no fuera así no se verían comportamientos sexuales de pederastia, homosexualidad y cualquier práctica considerada desviada entre los sacerdotes. Pero los mismos sacerdotes pederastas que condenan la diversidad sexual que nos les place la practican con sumo deleite en lo íntimo y no tan íntimo. Ser decadentes  a la vez que se predica la castidad y las prácticas sexuales morales cristianas, es la gran hipocresía sacerdotal desde el Vaticano hasta el templo religioso más modesto.

La salud de los seres humanos es lo principal y desde hace mucho las reglas sexuales están puestas y deben observarse y aumentarse en bien de los que deben protegerse, los menores de edad.

1.- Que la práctica sexual no sea dañina para uno mismo.

2.- Que la práctica sexual no dañe a otro u otros.

3.- Que sea consensuada.

4.- Que se proteja a los menores de edad pues son los más vulnerables y no tienen la madurez mental ni física, más que en contadas excepciones, para valorar si esta en aptitud de practicar su sexualidad.

5.- Que se castiguen los delitos sexuales que se cometan contra cualquier persona y en especial contra las niñas, niños y adolescentes de ambos sexos.

Se debe pasar de valorar las prácticas sexuales desde la moral cristiana para pasar a ser valorada desde el Derecho básicamente y ampliar en todo momento la protección a favor de los menores. Hoy hemos avanzado en los derechos a favor de las niñas, niños y adolescentes y sabemos las razones de salud física, mental y social por las cuales se les debe proteger; por lo tanto, queda la pederastia como esta en calidad de delito y deberían ampliarse las protecciones efectivas. Que los moralistas prediquen con el ejemplo porque este pueblo católico condena todo desde su moral pero práctica todo lo que daña a los seres humanos. Que gran hipocresía.



miércoles, 17 de octubre de 2018

LA MANIPULACIÓN DE LAS LEYES POR LOS MORALISTAS TEOLÓGICOS



En occidente, existen tres grandes cuerpos de leyes para regular tres grandes áreas del comportamiento humano. El primero cuerpo de normas es el, de la moral cristiana  y, regula el comportamiento humano de los creyentes y no tiene fuerza coercitiva material. El segundo es el, de los usos sociales que sanciona la forma de vestir y, comportase en determinados lugares y no tiene fuerza coercitiva material. El tercer cuerpo de normas es el, de las leyes jurídicas que sanciona las transgresiones y tiene la fuerza del Estado para sancionar materialmente aun en contra de la voluntad de los individuos.

Desde antes que se tome consciencia se forma a los seres humanos en estas tres regiones de normas, se debe saber ser moral, cumplir con las normas y saberse comportar socialmente. Sin embargo, los primeros ritos a los que son sometidos los menores de edad  es al de la moralidad cristiana que inicia con el bautismo y no paran ni después de muertos los seres humanos. Los sacerdotes enseñan el creacionismo; es decir, que este Universo y todo lo existente fue creado por un ser divino llamado Dios. Este ser divino creo al hombre primero, a la mujer después para consolación del hombre. Fijan la familia como papa, mama e hijos heterosexuales y ponen este modelo familiar como inamovible en las mentes de los creyentes.

Para cuando se inicia la educación sexual de los alumnos ya la visión de la familia está determinada en sus mentes y por necesidad debe entrar en contradicción con la que se les va a enseñar. La realidad aquí es rechazada por los prejuicios morales. Y, hecho lo anterior, las posteriores etapas de educación ya están contaminadas con la moral cristiana. En todo momento los sacerdotes acechan u azuzan a los creyentes para que presionen a los órganos del Estado para que se legisle con la moral como rectora. Se hace patente el fracaso del sistema educativo ya se han sembrado antes los prejuicios, los dogmas, los pecados que afloraran ante un modelo familiar diferente al establecido desde la Biblia, el compendio de cuentos más espantoso. El infierno con todos sus tormentos espera a quien ose ser diferente.

No es casual que legiones de católicos se unan en torno a sus prejuicios, dogmas e ignorancia para salir a marchas, protestas en todos los lugares que puedan para estar en contra del aborto, del matrimonio entre homosexuales, contra la participación de transexuales en concursos de belleza y todo aquello que crean que va contra su escala de valores cristianos. Los moralistas que deben serlo en lo personal se convierten en legisladores de lo público, tratan de usurpar el poder político para sus intereses. Eso es demasiado.

Al Estado le corresponde legislar sobre lo público y no a los sacerdotes porque desde el principio y hasta el final son los sacerdotes están detrás de las personas que exigen a los órganos de gobierno y en particular a los legisladores no permitir la igualdad entre el matrimonio heterosexual y los diversos. Pero esto no es suficiente ante la preponderancia del Estado y entonces para ello, crean partido políticos como el Partido Acción Nacional, de creación ya con décadas o como el Partido Encuentro Social de reciente creación y desaparición.

Se debe rechazar que los religiosos con sus dogmas, sus prejuicios e ignorancia basada en el creacionismo intervenga con su moral en la creación de leyes pues se debe separar claramente lo que es moral del Derecho para que no se introduzca de manera peligrosa la teología en lo público. La moral debe ser individual y en todo caso se debe dar en los templos religiosos y constreñirse a ese ámbito.

Los argumentos vertidos por los conservadores es partir del Libro del Génesis y pariendo de ahí, racionalizan este dogma hasta lograr armar todo un entramado que oculta su moral como base de su política. Es fácil perderse y la gente, sin advertirlo, los sigue en sus propuestas intolerantes hacia lo diferente. No importa si una buen porción del pueblo ha logrado títulos universitarios desde su infancia les han instalado las ideas morales católicas; en consecuencia, seguirán ese patrón familiar. Esto sin contar que es raro que los moralistas hayan analizado lo que defiendan porque son actos de fe ciega.

Para los teólogos hay personas dignas si son religiosas y siguen ciegamente los lineamientos morales del catolicismo e indignas si no son religiosas o si no encuadran en el modelo familiar de papa, mama e hijos sin ninguna salirse de la heterosexualidad; todos estos son hijos de Satán, anormales y se les debe marginar cueste lo que cueste y con cualquier método. Claro, su fe rabiosa topa con el Estado; entonces se debe marginar y degradar a través de las leyes. Ese es el fin que tienen los partidos políticos conservadores en México. Ahora bien, ¿esto será cierto, estará bien discriminar a los que están fuera de este modelo familiar?.

En realidad los que son anómalos y perversos son los moralistas cristianos pues, no se debe vivir como en la Edad Media. Estamos en l siglo XXI; los adelantos científicos son ya muchos más avanzados, el pensamiento jurídico es ya mucho más amplio y las personas razonables se han liberado de los dogmas, de las supersticiones y se rigen por la Ciencia, la Filosofía y el Derecho.

En efecto, para los juristas las tendencia sexuales de los seres humanos es irrelevante pues es una libertad personal que no se debe legislar; esta fuera de su campo de acción. Para el Derecho los seres humanos son sujetos de derechos y obligaciones y, mientras cumplan con estos parámetros no le importa su vida privada y sus accesorios. Pero los moralistas se escandalizan por esto y, sin más, se lanzan a inyectar su moralidad al Derecho y, no pocas veces logran que las leyes estén infectadas de moral y huelen a moral católica.

Los moralistas católicos quieren que los demás vivamos con su moral a toda costa pero el Estado ya no es confesional ni la religión católica es la única. Lo que no saben ni podrán ver ni mucho menos aceptar es que, el matrimonio entre personas de diversas preferencias sexuales no iguala físicamente a estos con los heterosexuales sino únicamente jurídicamente. Las diferencias naturales de los heterosexuales con el resto seguirá existiendo pero no el pensamiento dogmático e infantil del miedo imbuido por los teólogos.

El grado de manipulación sobre los seres humanos, por parte de los sacerdotes, es tal que no hay forma de volverlos curdos y siguen con su cantaleta sobre su paradigma familiar. Prefieren usar los puños antes que la razón. Sin embargo, se debe seguir trabajando para salir de este oscurantismo impuesto por los sacerdotes que por lo demás están en el total descrédito a nivel mundial por toda su decadencia y al sentir que pierden el negocio manipulan a los incautos que para su desgracia son la mayoría.



EL PRESIDENCIALISMO HA MUERTO EN LA PRÁCTICA





No hay duda que el Presidencialismo ha muerto en lo fundamental; el Presidencialismo priista. Este tema lo ha tratado ya con abundancia y no lo trataré aquí. Los remito, si tienen a bien a esos escritos, disponibles en el blog. Bien. Sin embargo, un régimen no muere en su totalidad así como así sin más sino cuando deja de tener vigencia, vida si se quiere, en la mente humana. Y, en la mente de la mayoría de los mexicanos, me parece, sigue vigente el Presidencialismo aunque la necesidad directa sea la democracia. Esto no es raro ni debe de preocuparnos ni ocuparnos en demasía pues es tanto como cuando un hijo o hija se separa del seno familiar, sienten el frío de la libertad y hay una natural negación a perder la calidez del hogar. Y, eso es lo que está pasando en México; los mexicanos o mejor dicho los ciudadanos siguen pensando como en el régimen priista que, aún no se termina del todo en la realidad y menos en las cabezas de millones.


El último presidente priista, Enrique Peña Nieto, aún sigue en la práctica con los despojos del Presidencialismo haciendo lo que debe hacer, pasearse en espera del último minuto de su ejercicio para dar fe del fin de una época. Y, los demás también deben ser testigos de este fin, pues no es menor el hecho ni más ni menos que el fin de la hegemonía del partido único de Estado y con ello, el fin de toda una época. Pero como he dicho la vigencia de una ley o de una práctica no termina con los hechos sino con su erradicación en la mente del colectivo, del pueblo.


Es evidente que el uso del poder presidencial unipersonal durante décadas moldeó la forma de pensar y que esto no es fácil de cambiar como no se puede cambiar la forma de hablar o de caminar de un día para otro. Se puede cambiar porque incluso varía la forma de caminar o de hablar de las personas en los pueblos como en las ciudades. Esta resistencia al cambio se puede ver en la realidad.


En esta resistencia al cambio esta una muy buena parte del pueblo mexicano y no solo el pueblo mexicano sino también los periodistas, intelectuales y comunicadores pues tienen las expectativas casi exclusivamente en un personaje, en el presidente electo Andrés Manuel López Obrador sin tomar en cuenta el pueblo. Se habla hasta la saciedad de lo que va a pasar con el gobierno de López Obrador como si él, con su sola voluntad pudiera cambiar el desastroso estado en que se encuentra el Estado mexicano. Incluso cuando el Presidencialismo estaba en su esplendor el presidente en turno tenía necesidad de que el pueblo en su conjunto hiciera lo necesario para que el Estado funcionara en su unidad y coordinación en los tres órdenes de gobierno; si bien, esta unidad y coordinación eran impuestas sin pedir el consenso libre del pueblo.


Y, no es que la pretensión sea que el pueblo gobierne o se entrometa arbitrariamente en lo que atañe a los gobernantes electos pero si se trata de que el pueblo este enterado de lo público y pueda actuar en consecuencia cuando haya corrupción. Y, la corrupción es la más grande tentación que tienen los servidores públicos y que, en no pocas ocasiones caen y, esto en cualquier parte del mundo. En México la corrupción se implantó como una forma de hacer fortuna por todos los servidores públicos con toda impunidad posible. El presidente en turno tenía tanto poder que nunca presidente alguno ha sido juzgado legalmente por sus hechos y actos de corrupción y este modelo se trasladó y reflejó en gobernadores, presidentes municipales y todos los demás servidores públicos.


La caída del régimen Presidencial priista en la práctica debe seguir como es debida la iniciación del hábito de la democracia hasta que esto se haga costumbre práctica y después mental. Ese convencimiento es lo más difícil de instalar en la mente de los seres humanos y requiere un largo ejercicio en donde se deben ir corrigiendo los excesos o carencias. La democracia tomará por sorpresa a casi todos, incluso a los políticos tradicionales pues ellos menos que los demás tienen el hábito y menos la costumbre de la misma. A esto debe sumársele la negativa de la rendición de cuentas puntual y claramente. Es una vieja práctica de los políticos por ocultar la información sobre sus cargos políticos.


No se puede saber, de antemano, cuál será el futuro con precisión pues esto es futurólogos; la realidad se va construyendo de acuerdo a diverso factores y es el resultado de todos ellos lo que nos da como resultado una u otra realidad. La realidad es posibilidad en diversos sentidos. Pues bien, hay que escoger por una posibilidad diferente a la existente en remanentes y tratar de construirla, alcanzarla en su realidad. Para ello es necesario terminar con los remanentes del Presidencialismo, evitar un nuevo brote en otra modalidad y esto será posible si se trabaja por el hábito hasta alcanzar la costumbre tanto en lo material como en lo intelectual. Y esta tarea es general con todos sus factores.

martes, 16 de octubre de 2018

CRISIS GENERAL DEL PODER





No hay duda de que estamos en crisis total o casi total. Con todo, la crisis más grave es la política, la del poder, la del saber y poder mandar. Esto es el resultado de la decadencia del régimen priista. Durante su mejor momento (El peor momento para la democracia), el Presidencialismo tenia y mantenía la unidad del Estado. La nación, en general, estaba ordenada en tres grandes sectores, el obrero, el campesino y el popular bien sujeto por sindicatos y organizaciones que todo lo mantenían en perfecto o casi perfecto orden al servicio del Partido Revolucionario Institucional para marchar política-económica-social y hasta artísticamente en pos de un fin la supremacía del Partido único de Estado sobre el pueblo. Pero eso se terminó. Se agotó para no volver más nunca, aunque haya muchos románticos nostálgicos. Hay por lo pronto un descrédito de los partidos políticos y de los políticos en general.

¿Significa eso que ya no son necesarios los partidos y los políticos?, de manera alguna. Para que una sociedad marche más o menos ordenada hace falta siempre quien o quienes manden. Crisis en la Humanidad las ha habido desde siempre y las ha superado. No debemos perder la calma. Hoy todo el mundo en general está enojado y más los que mandan pues están en la silla de acusación salvaje y no tan salvaje por parte de los gobernados. Está enojado el Papa Francisco I, por tanta crítica a la corrupción y decadencia de los sacerdotes; está enojado el pueblo norteamericano y por ello, eligieron al salvaje bien vestido de Donald Trump; están enojados los europeos y los británicos; están enojados Carlos Salinas, Enrique Peña Nieto, Vicente Fox y Felipe Calderón y está enojado el pueblo mexicano.

Ahora bien, la mayor preocupación la tienen los políticos pues todas las formas de autoridad están siendo críticas y presionadas al punto de que se salen de sus casillas. El poder eclesiástico se ha visto impotente ante sus problemas el Papa Francisco ha salido a echarle toda la culpa al Diablo por la pederastia y violaciones cometidas por los sacerdotes a lo largo y ancho del mundo. ¿Se habrá visto mayor impotencia papal?, no y esto es grave para los poderosos. Los estadounidenses y europeos ponen el grito en el cielo ante los problemas económicos y reaccionan con homofobia que no son otra cosa que sus miedos e impotencia ante los problemas mundanos. Hemos visto en el escenario nacional a Fox decir una retahíla de sandeces contra el nuevo orden; todo el viejo régimen fue aplastado literalmente y andan los antiguos poderosos muy molestos; no aceptan haber perdido el poder político y económico. Están al acecho. En efecto, el poder llamado espiritual y el poder político están en plena crisis y no aciertan a salir de su estupor y parálisis pues no tienen ni idea de cómo lidiar con esta revolución social. Los del poder económico es el único solido pero no están tan seguros de no estar en peligro. Todo está revuelto y hace falta poner orden y francamente no se ve quienes puedan hacerlo. No por ello se debe estar inactivos sino trabajar para construir un nuevo orden, un nuevo régimen y si es posible las bases de un nuevo Estado mexicano.

Me parece que también hay una crisis del pensamiento filosófico y por ende, político por haberse abandonado. La crisis tomó a todo mundo desprevenido. Hay románticos empedernidos e incautos que dogmáticamente criticaron al antiguo régimen priista y hoy, dogmáticamente quieren que no se critique al nuevo poder político; eso sería un craso error, sabiendo que hay entre los nuevos políticos sendos inútiles, arribistas, convenencieros, mercaderes, corruptos y de más fauna maligna.  A los gobernantes se les tiene que criticar sus excesos y corrupción pues es una prerrogativa ciudadana escrutar al gobierno en turno para que se corrija o no se tuerza.

El pueblo debe pensar y actuar para saber qué tipo de régimen se debe construir, cuanto poder se le debe dar a los nuevos gobernantes, cuáles deben ser los límites y sanciones. Se debe transitar de un régimen totalitario como lo fue el priista a uno democrático con las modalidades propias para el pueblo mexicano.   

Es seguro que el régimen priista no volverá pues se vació de todo contenido y por ende, de sentido. La caída del régimen tuvo factores externo e internos, mismos que ya he tratado en otros escritos y sería ocioso volverlo hacer; en lo interior el pueblo mexicano, en general, ha decidido hacer tabla rasa de la política; eso significó el triunfo de MORENA. El Partido Revolucionario Institucional debe desaparecer y desaparecerá como parte fundamental de la política. El Partido de la Revolución Democrática ha anunciado a través de Jesús Zambrano su desaparición. El Partido Acción Nacional debe recomponerse y este no desaparecerá como no desaparecerán los conservadores católicos pero, le será muy difícil volver a la escena central de la política.

¿Qué queda?, que el pueblo no abandone la política; que se ponga a trabajar y participar en la política de manera decidida a menos que quiera volver a caer en las garras de los políticos. Que por lo demás son lerdos en su generalidad, no tienen ni idea de lo que deben hacer con relación al nuevo régimen ni el nuevo Estado. Hay serio peligro de que lo hagan mal. De cómo se han desarrollado las tres anteriores Transformaciones ya he tratado y por ello digo que hay un verdadero peligro de que lo hagan mal. Hay necesidad de que el pueblo los apoye y que, los que piensan seriamente den luz sobre el tema.

Hace falta nuevamente unidad y coordinación en el Estado mexicano pero no a la manera priista bajo el totalitarismo represor del poder político sino en el marco de la democracia con rasgos propios que sirva a los mexicanos en general y evitar la creación de una clase política que se vuelva cerrada, inamovible e intocable.

Como pueblo los mexicanos debemos consolidar una nueva identidad que no tenga los mitos impuestos por el Partido Revolucionario Institucional pues la revolución no se pude institucionalizar sin matarla y eso precisamente fue lo que pasó mientras se mantenía la mentira por medio de la fuerza bruta de la dictadura del partido único de Estado. Todos los ritos emanados de la ideología priista deben ser cambiados por fechas que se deban conmemorar libres de mentiras.

Finalmente, se debe tener cuidado en acabar con los vestigios del régimen Presidencial pues ya no tiene sentido. Con el Partido Revolucionario Institucional pasará lo que dice el Gustavo Adolfo Bécquer: “Volverán las  oscuras golondrinas a tu balcón sus nidos a colgar, y otra vez con el ala a sus cristales jugando llamaran”…” “Pero…aquellas que aprendieron nuestros nombres, ésas…¡no volverán!. Y volverán los políticos como oscuras golondrinas a nuestras puertas a llamar pero aquellos que aprendieron nuestros nombres; esos no volverán.



sábado, 13 de octubre de 2018

CRISIS GENERAL DEL PODER, SUS TIEMPOS Y SUS FRUTOS




Sin la libertad la especie humana se marchita; se vuelve una sombra de sí misma; queda en segundo plano para ser solo el marco donde los líderes o gobernantes hagan su voluntad. La democracia es la fórmula política que encontraron los atenienses para limitar el poder de los gobernantes. Sin embargo, parece que esto funciona del todo bien. A pesar de haber pasado, más o menos, dos mil quinientos años la democracia sigue siendo escamoteada por los gobernantes en detrimento del pueblo. Y, en México no es la excepción. Con cada nueva Transformación se anhela llegara a la tierra prometida de la república democrática pero estamos como “Alicia en el País de las Maravillas”, que, aunque corre con todo el ánimo no avanza un centímetro.

¿Es posible que se lleve a cabo la Cuarta Transformación en su totalidad?, es decir, ¿se puede implantar la república democrática, en donde, efectivamente el pueblo sea el soberano que mande y los gobernantes y políticos manden obedeciendo?. Es posible pero hay que ver la cruda realidad sin idealismos infantiles.

¿Cuándo inició la Tercera Transformación?, en 1910 contra la dictadura de Porfirio Díaz y duró más o menos seis meses y después siguió una lucha interna por el poder político. Producto de este movimiento revolucionario fue creada la Constitución Política de los Estados unidos Mexicanos de 1917 con tintes sociales. Con esta Carta Magna se recobraba la propiedad de la industria petrolera entre otros rubros.

Pero no basta con recuperar los bienes nacionales en las leyes; es menester que se lleve a cabo en la realidad. El artículo 27 constitucional ponía como propiedad de la nación o mejor dicho del Estado, los recursos petroleros; con todo, el petróleo seguía en manos extranjeras. El deseo de recuperar el petróleo estaba en la consciencia colectiva desde por lo menos inicios del siglo XX. Tuvieron que pasar 28 años de iniciada la revolución y 21 de la promulgación de la constitución del 17, para que en 1938 el general Lázaro Cárdenas del Río con el apoyo del pueblo, lograra la expropiación de esta industria.

 Como se ve los frutos de esta Tercera Transformación no fueron inmediatos, muchos de los que habían luchado por lograr el cambio ya habían muerto o estaban en la senectud sin que esto signifique que fueron beneficiarios de la expropiación petrolera. La vieron y vivieron pero no la gozaron. Esto tampoco significa que haya sido malo sino que así son los hechos reales, libres de idealismos, retórica o ideología.

La salud pública tuvo su inicio institucional en el año de 1943 con la creación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que inicio de manera modesta para irse expandiendo a muchos más trabajadores. Pasaron 33 años de iniciada la Tercera Transformación lograra Manuel Ávila Camacho este derecho para los obreros y 33 años después de entrar en vigencia la Constitución de 1917.

Otra de las industrias básicas para el desarrollo lo es la industria eléctrica. Bien, la expropiación la realizó el gobierno de Adolfo López Mateos expropiara la “Mexican Light and Power Company”, para convertirla en 1960 en “Compañía de Luz y Fuerza del Centro”. Pasaron 50 años desde el inicio de la Tercera Transformación y 43 desde la promulgación de la constitución del 17.

La construcción de instituciones que beneficiaran a los obreros, campesinos, y al pueblo en general es gradual y por lo general lenta, tanto como lo permiten todos los factores humanos, de riqueza, de tecnología, de poder político externo e interno, económicos entre otros. No se pueden esperar milagros. No hay una varita mágica que logre esto.

La creación del Instituto Nacional de la vivienda para los trabajadores (Infonavit), fue creado en 1972; 62 años de iniciada la Tercera Transformación y 55 de promulgada y puesta en vigencia la Norma Fundamental y lo hace Luis Echeverría Álvarez.

Para ponernos en contexto. El régimen Presidencial priista ya iniciaba su desmoronamiento que igual tuvieron que pasar tantos años hasta llegar 2018 para que se inicie su desmantelamiento; es decir, 50 años.

Esta llamada Cuarta Transformación recién se inicia y todavía no logra destruir el régimen priista en lo medular pues sigue funcionando a pesar de sus limitaciones y fracasos y esperemos que con la toma el uno de diciembre de dos mil dieciocho, se inicie su desmantelamiento y el inicio de la democracia.

El trabajo es inmenso. Las reformas contrarrevolucionarias de Enrique Peña Nieto han puesto fuera de lo público la riqueza de la nación mexicana y se quiera o no, se tendrá que luchar contra el régimen económico global para salir airosos. Si la idea de los revolucionarios de 1910 era ser soberanos en lo económico, el actual gobierno nos ha puestos en estado de dependencia económica de los gobiernos extranjeros y de las trasnacionales nacionales e internacionales.

La destrucción del viejo régimen es necesaria así como la construcción de un nuevo régimen político y la batalla contra el régimen económico global y esto requiere de trabajo sesudo constante y con el esfuerzo conjunto del gobierno y del pueblo; si es que esto es posible.

Ahora bien, ¿significa esto que debemos desalentarnos, que esta lucha es inútil?, de manera alguna; por el contrario, significa que debemos poner todas nuestras fuerzas mentales y físicas para cimentar de una vez por todas las bases de una república democrática; es decir, que realmente lo público sea de todos y que, los ciudadanos puedan efectivamente ejercer en lo individual sus derechos y en lo colectivo imponer el rumbo que debe seguir el Estado mexicano hasta donde esto sea posible.

Al paso del tiempo las futuras generaciones ponderarán, valorarán y dictarán su juicio sobre nosotros de diversas maneras pero eso no nos debe importar sino el trabajo actual con el compromiso concienzudo de tener frente a nosotros trabajo incesante, enemigos de todo tipo y todo en contra. A pesar de todo esto hay un horizonte que se abre ante nosotros y allá vamos con el ánimo de quienes saben que no tendrán lo material sino el sacrificio. El paso es lento por eso debemos apurarlo.

viernes, 12 de octubre de 2018

DOCE DE OCTUBRE




Hubiera sido muy bueno que pasara por lo menos un siglo para que se encontraran los habitantes de Europa y América. El desarrollo que hubieran alcanzado en el comercio, la filosofía, la axiología, lo social y lo artístico el pueblo mexicano hubiera sido interesante. Sin embargo, se destruyó mucho de lo existente por ignorancia o prejuicios de los españoles. De esto ya no hay remedio. En fin, la realidad es otra y con ella hay que lidiar.

Ahora bien, no tiene caso alguno en seguir lamentándose porque con ayes de dolor no se logra cambiar en lo mínimo lo ya hecho; es pasado, historia. Ahora bien, el imperio mexica estaba en franco desarrollo y maduración pero no lo logró en todo su esplendor por la llegada de los españoles. Los factores que tuvieron efecto para la derrota fueron múltiples. El mito del regreso de Quetzalcóatl, la entrega del poder político de Moctezuma a favor de Hernán Cortés, la aparición del cometa, la unidad artificial del imperio mexica, la opresión sobre los pueblos sometidos, la alianza de los tlaxcaltecas, huejotzincas, cholultecas y demás aliados con los españoles, la epidemia de viruela que azotó a los naturales de lo que hoy, es México.

La historia de la humanidad ha sido una lucha constante por dominar unos pueblos sobre otros. Los españoles no han estado exentos de ser dominados. Los romanos llegaron a Hispania en el 218 A. C. y fueron sustituidos por los visigodos a principios del siglo V D. C., es decir, alrededor de 7 siglos dominaron los romanos a buena parte de los españoles. España sería dominada por diversos pueblos y los visigodos dominaron hasta el 711 de nuestra era.  

Los musulmanes (árabes, sirios, bereberes entre otros), dominaron desde 711 hasta 1492 cuando los españoles se sacuden la dominación musulmana. Pero este tipo de dominaciones no fueron puramente negativas pues enriquecieron económica, social y culturalmente a los españoles que traerían esto a América. No gusta a ninguno la dominación pero es inevitable en un mundo tan complejo.

Los pueblos prehispánicos fueron dominados por los mexicanos y el descontento era general pues aparte de los impuestos, les imponían dioses y un trato duro hasta llegar a la guerra para la captura de prisioneros para los sacrificios humanos. Bien se puede decir, que los mexicanos no eran bien vistos más bien odiados por su crueldad en aras de su imperialismo. Hoy, vemos con otros criterios la historia prehispánica y mexicana  pero debemos valorar desde su contexto y no desde el nuestro.

La unidad del imperio mexicano era artificial y no pudo madurar al punto de resistir la alianza de los tlaxcaltecas y demás pueblos que se fueron sumando a los españoles. El pase de lista del ejército antes de la conquista de Tenochtitlan fue de menos de 1,000 españoles y de 75,000 tlaxcaltecas, cholultecas, huejotzincas y demás aliados. Un día antes de la caída de Tenochtitlan menos de 1,000 españoles y alrededor de 150,000 de aliados.

El sentimiento de nosotros los mexicanos es de dolor y, rechazo y, esto es comprensible pero no vamos a ganar corregir el pasado, se trata pues de asimilar con entereza estos hechos históricos, buscar ampliar y profundizar la unidad ya no artificial sino natural de la nación mexicana y fortalecer al Estado mexicano. El pasado debe servir como referencia y la historia como maestra de lo que no se debe hacer ante los demás pueblos; siempre con la hermandad pero con la fuerza suficiente para mantener la unidad e identidad.

Es muy compleja la nación mexicana y muchos sus problemas pero dolerse del pasado es evitar la comprensión de la realidad de los pueblos que conforman la especie humana y a partir de esto pensar el futuro. La vida no es fácil pero es más difícil viviendo en el pasado. Muchos de nuestros problemas son causados por nosotros mismos tanto en el pasado como hoy mucho me temo que mañana.

¿Qué hubiera pasado si los tlaxcaltecas hubieran sido parte del imperio o amigos del imperio mexicano?. La historia sería otra. Seguramente no hubiera caído el imperio de la manera en que cayó y quizá se hubiera logrado que en lugar de vasallos los pueblos prehispánicos hubieran sido pueblos con intercambio comercial, cultural, social, artístico pero no fue así por las propias circunstancias internas.

Ahora bien, de lo que se trata ahora es de trabajar intelectual y materialmente para lograr convivir con los demás pueblos con la base de que se vive en Estados nacionales y que, esto vuelve más difícil esto. En efecto, la desunión ha sido un factor de nuestra dominación y lo seguirá siendo. Los rubros más importantes: axiología, el arte, la economía, lo social y filosofía deberían ser nuestra prioridad y no la añoranza de lo que no se va a cambiar.  Doce de octubre como cualquier otro día debe ser el día de mostrar la fuerza y creatividad del pueblo mexicano.

jueves, 11 de octubre de 2018

32 ESTRAGO DELAS VIRUELAS. MUERTE DE CUITLAHUATZIN Y DEL PRÍNCIPE MAXIXCATZIN. ELECCIÓN DEL REY CUAUHTEMOTZIN



32 ESTRAGO DELAS VIRUELAS. MUERTE DE CUITLAHUATZIN Y DEL PRÍNCIPE MAXIXCATZIN. ELECCIÓN DEL REY CUAUHTEMOTZIN

Como en anteriores notas digo que los historiadores ponen a los españoles como los personajes más importantes sin serlo en el sentido de número y de valor; cada uno debe ir tratando de darse cuenta que los naturales fueron de vital importancia para la derrota de los mexicanos y que fueron diversos los factores que los hicieron caer. Como en lo que hoy, llamamos México los pobladores no habían padecido algunas enfermedades no habían generado anticuerpos para combatir estas enfermedades traídas de Europa.  En concreto está el caso de la viruela. Va el texto de Francisco Javier Clavijero al respecto.

Las victorias de los españoles y la multitud de aliados que tenían a su devoción engrandecieron de tal suerte su nombre y conciliaron a Cortés tan grande autoridad en la tierra, que él era el árbitro de las diferencias que ocurrían, y el que daba o confirmaba la investidura de los señoríos que vacaban, como se vio en el de Cholula y en el de Ocotelolco en Tlaxcala, vacantes uno y otro por muerte ocasionada de las viruelas.

Este terrible azote del género humano, ignorado hasta entonces en aquel Nuevo Mundo, lo llevó consigo un negro esclavo de Narváez; contagiáronse con su comunicación los cempoaltecas y de allí se propagó el mal por todo el imperio mexicano con indecible daño de aquellas naciones. Perecieron muchos millares de hombres y quedaron algunos lugares despoblados. Aquellos cuya complexión prevaleció a la violencia del mal se levantaron tan estragados y con tan profundos vestigios del veneno en los rostros, que causaban espanto a los demás.

Entre los estragos que causó esa nueva enfermedad fue muy sensible a los mexicanos la pérdida de su rey Cuitlahutzin a los tres o cuatro meses de reinado, y a los tlaxcaltecas y españoles la del príncipe Maxixcatzin. Los mexicanos eligieron en lugar de Cuitlahuatzin a su sobrino Cuauhtemotzin, porque ya no vivía hermano alguno de los pasados reyes. Era joven de 25 años y de mucho espíritu, y aunque por poca edad poco práctico en la guerra, llevó adelante las providencias militares de su antecesor. Tomó por mujer y reina a su prima Tecuichpotzin, viuda del rey Cuitlahuatzin e hija de Moctezuma.

La muerte de Maxixcatzin fue de gravísimo sentimiento para Cortés, así por la estrecha amistad con que se habían unido sus ánimos, como porque a su influjo se debía principalmente la buena armonía entre los españoles y tlaxcaltecas. Por lo cual, después de haber asegurado el camino de Veracruz y de haber enviado a la corte de España al capitán Ordaz con una relación muy cumplida de todo lo sucedido hasta entonces, y al capitán Ávila a la isla de Santo Domingo a solicitar nuevos socorros para la conquista de México, partió de Tepeyac para Tlaxcala, y entró en aquella ciudad vestida de luto y haciendo otras demostraciones de dolor por la muerte del príncipe su amigo.

Dio, a instancias de los mismos tlaxcaltecas y en nombre del rey católico, el señorío vacante de Ocotelolco, uno, como ya hemos dicho, de los cuatro principales de aquella república, a un hijo del difunto, niño de solo doce años, que en el bautismo se nombró don Juan de Maxixcatzin[1] quedando el nombre del padre por sobrenombre del hijo  y de toda su ilustre posteridad; y por hacer alguna mayor distinción en atención a su padre, lo armó caballero al uso de Castilla.


Clavijero, Francisco Javier. Historia antigua de México.

México. 2009. Editorial Porrúa. Colección “Sepan Cuantos…”. Págs. 531, 532



[1] Solís dice que se llamó don Lorenzo, pero este fue el nombre de su padre. El del hijo fue don Juan, como consta en Torquemada.