Realmente
es de risa el ritual que desplegó Enrique Peña Nieto para destapar a José Antonio
Meade. Es ya, por sí mismo, el sustituto perfecto del mejor cómico nacional,
cayendo en el personaje ideal del “Bufón nacional”, no hay día en que no
deleite al público con un de sus dislates; en ese campo es “genial” por ser un
monstruo por defecto, por sus limitaciones mentales que lo hacen caer en
situaciones chuscas, absurdas, increíbles, inusitadas pero peligrosas.
A
los gobernantes mexicanos se les puede imputar, sin lugar a dudas una
ignorancia olímpica, eso, no es nuevo, Platón, ya sabía esto y propuso que los mejores gobernaran, es
decir, los sabios. El rey filosofo. Un ideal. La realidad es radicalmente
diferente. Los más ambiciosos e ignorantes gobiernan. Maquiavelo también tomó
en cuenta esta deficiencia de los gobernantes a la hora de gobernar; en
consecuencia, escribió su obra más conocida “Del Principado”, de forma lacónica,
breve porque confiesa que los gobernantes no leen.
Leer
no sería tan importante al momento de gobernar si la mayoría de gobernantes no
fueran imbéciles bien vestidos. La materia de los gobernantes es, fundamentalmente
mandar pero ni siquiera este rubro dominan y tienen que hacer uso de engaños,
tretas, apariencias y en primer y último caso, la fuerza del Estado. Hoy, día la
maldición de ser ignorantes los persigue sin descanso y no importa si logran
los más altos grados académicos, desconocen la realidad mexicana y no les
importa conocerla. Docta ignorancia decían los teologos respecto de la filosofía; siguen siendo doctos ignorantes pero ahora de la realidad. Funcionan a control remoto sin ver ni importarles la
realidad. Tienen en la mente y en la práctica mantener la Macroeconomía, lo demás
son efectos secundarios, es la Microeconomía.
Cada
vez que quieren engañar al pueblo lo hacen con la fuerza del Estado y con una
publicidad oficial y oficialista que no para día y noche. Para dar apariencias
de reformas efectivas, hacen chapuzas y las venden como pócimas mágicas. Al
Instituto Federal Electoral (IFE) con el cambio de una letra lo convirtieron en
Instituto Nacional Electoral (INE), con competencia, ambas instituciones, en el
territorio nacional y el servicio en el extranjero para los mexicanos en esos
lugares; a la Procuraduría General de la República, la han convertido en Fiscalía
General de la República con las mismas facultades; o de plano si quieren hacer
un movimiento de control convierten a las fuerzas armadas en policías, diciendo
que todo es legal y únicamente los ciudadanos despiertos ven malas cosas y efectos
nocivos. Todo está en la mente, diría Peña Nieto. Quiere drogar al pueblo con
palabras huecas y saliva venenosa.
Todo
esto nos muestra y demuestra que este sistema está agotado, los gobernantes y políticos
están agotados; en consecuencia, son incapaces de ofrecer una política fuerte,
de verdadera altura para combatir la decadencia, son parte del problema. Es la
hora de los ciudadanos y el gobierno y políticos tienen menester de parar en
seco este movimiento. Por eso, no es raro que se ponga en vigencia una Ley de
Seguridad Interior, violatoria de toda la democracia pues serán los soldados
los que tengan el control del pueblo, de los ciudadanos y estos, estarán destinados
a una nueva dictadura militar mezclada con la hegemonía de los partidos sobre
el pueblo para evitar la democracia.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario