domingo, 31 de diciembre de 2017

PROGRESO: EL TRIUNFO DE ESTE RÉGIMEN



La Macroeconomía (la economía de las trasnacionales), está asentada en la fuerza laboral barata, la privatización de lo público con toda la corrupción posible y la exención de impuestos mientras la Microeconomía (La economía de los pobres), se va haciendo más paupérrima. Por un lado la acumulación ilimitada de la riqueza material para pocos y, la miseria para muchos y, a eso, los priistas y panistas le llaman progreso.




viernes, 29 de diciembre de 2017

LA TERMINACIÓN DEL RÉGIMEN PRIISTA




El régimen priista murió totalmente con la Reformas Estructurales que son reformas privatizadoras; con estas reformas el presidente en turno pierde definitivamente la rectoría de la economía y esta pasa plenamente a las trasnacionales; el monopolio político ya lo había perdido con el surgimiento de los diversos partidos.

El Partido Acción Nacional, tuvo la oportunidad de terminar con el régimen priista; por el contrario, lo adopto para hacerse de dinero público y para corromperse a la manera priista.

El Partido de la Revolución Democrática siguió los pasos del PAN y se corrompió hasta la médula, volviéndose sirviente del PAN. Por ello, esta alianza es incapaz de proponer un Nuevo Modelo de Estado y, únicamente proponen un cambio de gobierno pero no la creación de un Nuevo Estado; en suma, piden seguir con las privatizaciones con la misma corrupción.


En consecuencia, de debe proponer y crear un Nuevo Estado que responda a las nuevas circunstancias; las relaciones de los ciudadanos con las trasnacionales, de los ciudadanos con el gobierno, del gobierno con las trasncionales y del ciudadano y su vida en este nuevo orden. Que la vida no siga bajo lo material, bajo las ruedas de la economía sino como digna de ser vivida y donde las cosas, los objetos ideales y los valores tengan pleno sentido.


martes, 26 de diciembre de 2017

NAVIDAD TIEMPO DE REFLEXIÓN




25 de diciembre. Amaneció con un silencio sepulcral. Calles desiertas y perros solitarios que deambulan sin rumbo en busca de un pedazo de vida. Por mi parte me siento discontinuo como un perro viejo que ha perdido su estrella polar, su mensajero estelar. No somos diferentes en circunstancias esos hermanos perros y yo, vivimos inopinadamente. El mundo es como es y, por momentos pierde su continuidad ante mis ojos.  El mundo funciona bajo los mandamientos de los poderosos. Trabaja duro, consume más duro, baila come y salta a las órdenes o, a las señales al subconsciente y a eso llámale felicidad o democracia.

¿Cuántas cosas o hechos que consideramos propios lo son realmente?. La democracia es por excelencia la voluntad del pueblo que debe ser ejecutada por una persona, un presidente en nuestro caso, los dos restantes órganos y todo el aparato estatal. Sin embargo, el gasto indiscriminado de miles de millones de pesos en publicidad para engañar al pueblo no puede ser democracia.

Un gobierno republicano supone austeridad en el gasto y el bien común para todos. ¿Cómo se ha logrado beneficiar a unos cuantos y convertir a la república en una maquinaria para producir millones de pobres, aun antes de nacer, sin ninguna verdadera oportunidad poder alcanzar los bienes materiales e intelectuales para poder vivir dignamente?. La respuesta es compleja pero tiene dos vertientes: la corrupción de la clase política que vive con formas de la realeza y la inacción política del pueblo.

¿En qué parte de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, dice que se deba permitir la acumulación ilimitada de bienes y servicios  públicos a favor de únicamente algunos nacionales y extranjeros en detrimento del pueblo?. Pues no está escrito; es decir, no es la voluntad del pueblo que eso se haga y sin embargo, los gobernantes lo hacen con toda impunidad en complicidad con algunos cuantos, los beneficiados del sector privado.

¿En qué parte de la Carta Magna, dice que el presidente, sus Secretarios y miembros de su partido pueden desviar miles de millones de pesos para mantenerse en el poder?, claro, en ninguna parte pero lo hacen contraviniendo todas las leyes jurídicas y toda la ética y moral. No les importa porque desde hace más de ochenta años tejieron una extensa y larga red de corrupción e impunidad a través de todos los medios, complicidad y hegemonía del partido único de Estado, sujetar al pueblo a través de los tres grandes sectores Obrero, Campesino y Popular, fuera de estos no hay participación en lo público y privado, terror pánico contra el pueblo a través del control policiaco, donde la prueba reina era la confesión sacada por cualquier medio, incluyendo los mas brutales; en consecuencia el valor justicia era un fantasma que se aparecía a través del discurso oficial; la lucha a muerte contra los disidentes con la participación del ejercito con la consigna de erradicar a los inconformes o guerrilleros por medio de los métodos propios de las dictaduras y esta era una dictadura.

La retirada del gobierno en turno de la seguridad pública es con el fin de aterrorizar a la población en general y, lograr que paguen por su seguridad propia y hacerles saber que es necesaria la militarización, pues en caso contrario lo que queda es el caos, la anarquía y, el plan de fondo es mantener el control de las elecciones y su represión en caso de descontento.

En resumen, lo  público y lo privado están en las manos del gobierno corrupto en sus tres niveles. Esto ha sido posible  al permitir que un ignorante pero funcional corrupto como Carlos Romero Deschamps controle por treinta años o más el poderoso sindicato petrolero, que una maestra al más puro estilo del también maestro rural Carlos Hank González  dirigiera el sindicato de maestros y este regenteara el Distrito Federal. Otro caso lo es Alejandra Barrales que de azafata pasó a ser una poderosa política y dirigente del Partido de la Revolución Democrática.

Todo esto es viejo. No solucionamos un problema y ya tenemos otro. Los políticos más prominentes, los que deberían dirigir bien el Estado mexicano, van de escándalo en escándalo. Ese perro solitario, abandonado a su suerte y yo, tenemos el mismo mal de origen: la corrupción y la impunidad de los políticos. La diferencia entrambos, es que yo tengo la posibilidad de salvarme por mi mismo si no me aniquilan antes, en cambio el está perdido para siempre. Esto se agrava al visitar los lugares más lejanos y olvidados; ellos tampoco entran en el esquema del nuevo orden a no ser que sean como consumidores y no como ciudadanos.


“Me parece que caemos de nuevo en el planteamiento impersonal, donde todo se perdona, aun los más atroces crímenes y delitos.  Tenemos que movernos en un esquema en donde el valor justicia sea válido. Vamos a funcionar bien cuando la corrupción deje de tener mérito. Cuando alguien piensa “El problema no depende de erradicar la corrupción y llevar ante la justicia a los corruptos”, es que no entiende el problema de fondo. Con seguridad ha de ser un cómplice de los corruptos y el, mismo un corrupto con la misión de encontrar a toda costa la impunidad general.


lunes, 18 de diciembre de 2017

LA CONTINUIDAD DE RÉGIMEN COMO PROTECCIÓN DE LAS PRIVATIZACIONES



La cúspide de la privatización de los servicios y bienes públicos en México se realizó el año 2015 y también  fue la cúspide de la debilitación del gobierno en todas las áreas que no fueran necesarias para mantener esa privatización.  De este modo era menester mantener al ejército, la marina y todas las fuerzas públicas apuntalando esas reformas llamadas estructurales. No fue suficiente la privatización sino se garantizaba su seguridad a través de la continuidad del régimen. El fraude electoral en el estado de México en el 2017 es parte del paquete de seguridad ofrecida por el gobierno a los dueños de lo público convertido en privado.

Para las elecciones del 2018, el gobierno de Enrique Peña Nieto debe mantener la continuidad del régimen para evitar dos circunstancias; la primera, es mantener las privatizaciones marcadas por la corrupción en plena vigencia y seguras de no ser tocadas, por lo menos hasta que sean hasta el siguiente sexenio; después ya se verá; segundo, mantener la impunidad personal y de sus cómplices por tan desaseadas privatizaciones.

El mecanismo es el mismo. Se debe extender la acción del ejército, la Marina y la policía federal en pie de guerra para sostener las privatizaciones. El terror a lo Maximilien Robespierre aplicado al pueblo debe ser suficiente para ese continuismo y esa impunidad. La dosificación de ese terror debe ser tal que vaya controlando a los inconformes, debe ser tal que se evite la persecución de los corruptos.

Se dice que La Ley de Seguridad Interior es necesaria para la actuación del ejército y Marina  pero eso resulta sospechoso y, falso pues ya habían transcurrido 11 años en los cuales no había sido necesaria esta ley. De las constantes violaciones de derechos humanos, desapariciones forzadas y masacres, ejercito y Marina no han entregado cuentas ni han sido castigados los responsables y pocos culpables. Porque responsable es Peña Nieto como comandante de todas las fuerzas armadas y culpables aquellos que han sido declarados por los tribunales.


Ahora bien, la corrupción es un problema para Peña Nieto y compañía y, la atendió poniendo un candidato panista en lo formal pero priista en la realidad que no cargue con la podredumbre del régimen. Pero no es suficiente esta estratagema, es imperioso que la protesta social se criminalice, se tenga la oportunidad de reprimir a través  de la Ley de Impunidad y represión Interior. Es evidente que el desastre de Atengo en el estado de México dejo una enseñanza permanente en Peña Nieto. La represión debe ser legal y selectiva. En efecto, otorgado el poder económico y político a las trasnacionales se les debe garantizar que el imperio económico no sea tocado. Ley y fuerza pública puestas al servicio de la iniciativa privada. A las trasnacionales no les importa la democracia sino las ganancias.

Se puede alagar que, la oposición es mayoría y que no permitirá el continuismo ni el menoscabo de lo público. El Partido Acción Nacional, es decir, la derecha, se ha vuelto tan corrupto como el Partido Revolucionario Institucional y en ocasiones lo ha rebasado. Por su parte el Partido de la Revolución Democrática, partido formalmente de izquierda, se ha convertido en el sirviente, en el lacayo de la derecha y, lo único que se puede esperar es que, luche con todas sus fuerzas y rabia a favor del panismo. Todo esto únicamente fortalece al régimen actual pues no han propuesto ni propondrán realmente un cambio de régimen sino solo de quien lo encabece. Para eso está hecha esta alianza anómala.


En resumen, el régimen Presidencial está agotado y rebasado al haber entregado el poder político y económico a las trasnacionales. No obstante,  el gobierno actual debe garantizar sino el control total del pueblo mexicano si por lo menos el manejo del mismo, bajo circunstancias que puedan ser manejadas las ganancias con el mínimo riesgo. Para ello era necesario legalizar la represión de las protestas públicas ante el continuismo solo posible a través de la profundización de la corrupción de la política. Es sabida la capacidad de corrupción del régimen para llevar a cabo fraudes electorales y su capacidad de mutación en los métodos. No se debe esperar un siguiente fraude al estilo estado de México sino uno con sus propios métodos inéditos.


jueves, 14 de diciembre de 2017

LA LEY DE SEGURIDAD INTERIOR, UN GRITO DESESPERADO



El pueblo mexicano es realmente el soberano aunque esta soberanía está siendo ejercida de manera indiscriminada por los tres órganos como si fueran ello, los verdaderamente los soberanos. Esto es bueno porque el pueblo debe darse cuenta cabalmente de estar siendo manipulados. La Ley de Seguridad Interior es una vuelta más a la rueda. La presión que ejerce el gobierno sobre los gobernados es inaudita como si estuviera tanteando la reacción y ver si puede construir desde ahora un nuevo fraude electoral en el 2018. La Ley de Seguridad Nacional no es otra cosa que la Ley del Garrote, la camisa de fuerza contra los electores que pudieran protestar por la corrupción electoral. No hace falta para el fraude electoral más que un pequeño porcentaje, digamos un tres por ciento de ventaja a la hora de contabilizar los votos. Sin embargo, en esta sagrada hora en que los ciudadanos han sido liberados del paternalismo del Estado, estos son verdaderamente libres aunque no actúen como tales pero es posible que un nuevo fraude gatille las protestas sociales. Es menester que se les aterrorice y en último caso se reprima a los inconformes; la Ley de Seguridad Interior es la el instrumento para ello, incluso matar sin responsabilidad, sin culpabilidad. Enrique Peña Nieto no olvida la lección y la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos que condena a su gobierno en el estado de México. A toda costa debe evitar este riesgo. Es posible que vaya a la cárcel o que durante mucho tiempo se siga en los tribunales persiguiendo su mal gobierno. Con esta ley queda protegido. Matar será legal.

Con todo, este régimen se ha desmoronado. El poder presidencial ha pasado a los demás partidos, a sus aliados, a las Organizaciones no Gubernamentales y fatalmente, a los ciudadanos. No hay forma de parar la caída del régimen pero es posible transformarlo en otro régimen torcido, totalitario para escamotear al pueblo el ejercicio directo de su soberanía, de su poder político. Peña Nieto es el Can Cerbero de este régimen podrido, es cobarde e ignorante pero el miedo, el temor fundado y sus secuaces tras bambalinas lo acicatean para abandonar el gobierno con toda impunidad. La Ley de Seguridad Interior es una muralla casi inexpugnable para quedar a salvo. El plan perfecto.

Ahora bien, el pueblo no se ha dado cuenta que es el origen de todo poder, que es el poder en sí. Emilio Gamboa, nació creció y desea morir en un régimen político en donde el, sea uno de los monarcas. Un verdadero Luis VXI que, aunque sandio sea el rector de la creación de las leyes, pues esta Ley de Seguridad Interior, como muchas otras ha sido creador y promotor, es el poder tras Peña Nieto que, maneja los hilos, es el titiritero que no asoma el rostro mientras no sea necesario. En este momento salió y mostró su rostro autoritario. Dice respetar al pueblo, a las organizaciones civiles pero aquí decidimos 128 Senadores. Se ha mostrado como el verdadero tirano. No se olvide este nombre y las cuentas que debe al pueblo, es necesario cobrar esta afrenta monstruosa en las siguientes elecciones. La Ley de Seguridad Interior también es un grito desesperado pues ante la imposibilidad de que, el gobierno y políticos puedan gobernar a través de la política sana imponen una ley represiva como medio de gobierno y como instrumento de fraudes.  

La respuesta a este golpe de Estado dado por el mismo gobierno de Peña Nieto en complicidad de panistas y priistas, debe ser inteligente, con toda energía y de manera constante. El pueblo se debe organizar y mostrar su madurez a la hora de votar para botar a estos corruptos cínicos. Comités, hace falta hacer comités u organizarse en asociaciones civiles para que, organizados no se de tregua a los líderes de este régimen y se pueda tomar un rumbo diferente a este poder político corrupto y corruptor sin límites de ambición. Llevemos ante la justicia a todos los corruptos. Desmantelemos a este régimen de apariencias republicanas pero que viven como la más rancia nobleza europea.

En efecto, es posible desmantelar a este régimen injusto y poner a los corruptos, empezando por quien se ostenta como presidente,  ante los tribunales. La condena social debe, igualmente ser general y permanente. No hay que dar marcha atrás, eso sería cobardía y los tiranos tendrían las puertas abiertas para seguir saqueando a placer lo público, libres para seguir matando sin responsabilidad y menos culpabilidad, estarían bebiendo sangre como vampiros con sed insaciable y seguirán chupando la energía del pueblo, la vida del pueblo.

Una ley vigente la tiene siempre y cuando se practique e incluso puede ser derogada o abrogada y, los culpables llevados a la cárcel por las consecuencias negativas, por sus efectos  nefastos sobre el pueblo. Una mala ley ante la voluntad del pueblo no es más que una mosca molesta, claro, siempre y cuando ese pueblo haga uso de su soberanía. No puede haber poder por sobre el pueblo ni sobre los pueblos y, no los hay siempre y cuando actué y, Peña Nieto y sus compinches siguen cavando su tumba política y dando motivos al pueblo para actuar con inteligencia, enérgicamente y de manera constante hasta acabar con este régimen político corrupto. Y cuidado, este régimen a través del PAN, del PRD, del PV y demás cómplices encabezados por el PRI tratan de imponer la dictadura de los partidos. Pasamos de la dictadura personal de Porfirio Díaz, a la de partido único de Estado, del PRI y ahora quieren la dictadura de partidos.

No deben olvidarse  los nombres de Emilio Gamboa, Manlio Fabio Beltrones, César Camacho,  Felipe Calderón, Vicente Fox, Ricardo Anaya, Alejandra Barrales, Jesús Zambrano, Jesús Ortega,  Dante Delgado y sus cómplices. El 2018 ya está aquí y aquí debe estar el pueblo en asamblea permanente y en acción política contra estos corruptos, contra estos zánganos humanos.




martes, 12 de diciembre de 2017

UNA MENTIRA CONVERTIDA EN MILAGRO



A los seres humanos nos gusta la fantasía, lo extraordinario para contrastarlo con nuestras limitaciones humanas y sentir, por lo menos que hay algo o alguien trascendental que nos sostenga más allá de lo material. Joseph Goebbels, decía que “Una mentira repetida mil veces se convierte en verdad”, eso lo pusieron en práctica muchos años antes los teólogos españoles en México.

Las tradiciones, por lo general, no se cuestionan, se aceptan y practican de generación en generación y pocos, se atreven a buscar sus orígenes. El mito (Cuento), de la aparición de la Virgen María, a Juan Diego, como una mentira para hacer que los naturales de la Nueva España, dejaran de practicar sus ritos y se convirtieran al catolicismo. Esto no iba a ser posible con razones ni la violencia como no es posible hoy, quitar la fe religiosa con estos métodos, fue menester una puesta en escena. No se sabe lo que realmente paso pues este supuesto hecho no es histórico sino de fe.

Ahora bien, no es posible creer en la aparición de la Virgen María porque sale de la esfera factual, de la comprobación histórica y científica de tal hecho pero si se puede atisbar la preparación de la engañifa. ¿Por qué se le presentó, la Virgen a una sola persona?. ¿Por qué se le presentó a un natural en la capital de la Nueva España y no en otro lugar?. ¿Por qué se tuvo que transformar de blanca en morena?. Estas son solo algunas de las preguntas sin respuesta.

Una posible y más probable respuesta es que, los sacerdotes encabezados por Juan de Zumárraga, hayan orquestado todo un plan para atraerse a los naturales hacia el catolicismo y lo lograron con el engaño. Buscaron un y encontraron en Juan Diego el perfecto instrumento para que, bien aleccionado, llevara flores en su ayate y, por órdenes del mismo Zumárraga se presentara ante el mismo, simulando que las órdenes eran de la Virgen María. A esta chapuza se le dio tanta publicidad que tuvo el efecto deseado la conversión de los naturales al catolicismo. Fin de esta historia.

No es raro que por medio del engaño, el catolicismo se imponga a todo un pueblo, tal y como ocurrió con el pueblo romano. Constantino gobernaba el imperio romano cuando se presentó una batalla y, se dice que tuvo una visión de una cruz brillante bajo la cual se podía leer “In hoc signo vinces”, (Bajo este símbolo vencerás), al ir a la batalla ganó la misma y, el emperador Constantino se convierte al cristianismo. Poco después, se hacía oficial. Fin de otra historia.

En efecto, la aparición de la Virgen María es un engaño. En Extremadura España existe una imagen de la Virgen de Guadalupe en el monasterio de Guadalupe. Las personas razonables, después de ver, oír y razonar aceptan que la imagen de la virgen de Guadalupe que está en España, es el origen de la de México. Es interesante que los religiosos de España no quieran tener relación con la imagen de Guadalupe en México. Se niegan, y los religiosos mexicanos reconocen en privado que allá están los orígenes de la de acá pero públicamente cambian el discurso. El negocio y control del pueblo mexicano se les iría de las manos. Fin de otra fea historia. Momento, la historia no es bonita ni fea sino simplemente eso historia. Fin.


El pueblo mexicano puede seguir con sus tradiciones pues es incapaz de seguir sus orígenes pues se pierden en las brumas del tiempo y, es mejor aceptar las tradiciones que ponerse a pensar, a investigar. Que los pastores del rebaño hagan ese trabajo. Ya lo dijo Séneca: “La religión es considerada por la gente común como verdadera, para los sabios como falsa y por los gobernantes como útil”. Estos días de ceguera total por parte de los fieles religiosos son un remanso para los políticos y religiosos pues el rebaño se porta tan dócilmente que enternece a cualquiera.



domingo, 10 de diciembre de 2017

EL NUEVO ESTADO MEXICANO



El Estado moderno en México se terminó con las “Reformas Estructurales” de Enrique Peña Nieto, y que no son más que, la profundización y ampliación de la privatización de lo público. Eso que es producto del esfuerzo de muchas generaciones de mexicanos se vuelve privado por ministerio de Ley. Con esto también se dio muerte a los últimos vestigios del Presidencialismo ya con una larga agonía desde la perdida de la presidencia a manos de los panistas en el año 2000. Doce ad sin quien alimentara los ritos priistas fueron suficientes para cavar la tumba. Faltaba el enterrador.

La puesta en escena de Enrique Peña Nieto al destapar al candidato del Partido Revolucionario Institucional, José Antonio Meade, se asemejó en la forma a los ritos en los mejores años del Presidencialismo pero en el fondo no fue otra cosa que un grito silencioso y desesperado al no tener otro recurso que la imitación hueca. Los tres grandes sectores que aglutinaban a la nación mexicana en torno al partido único de Estado, Obrero, Campesino y Popular son antiguallas con mal funcionamiento; la otrora poderosas, Confederación de los Trabajadores de México (CTM), la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP) y la Confederación Nacional Campesina (CNC), son reminiscencias de un México del recuerdo, de la historia.  Nunca volverán a ser lo que fueron porque tenían como alimentar y cumplir la voluntad casi todopoderosa del presidente en turno y dar continuidad y fortaleza al Presidencialismo, muerto este, los tres grandes tentáculos han quedado acéfalos.

La herencia del PRI fue la ampliación y profundización también de la corrupción e impunidad ejercida en todos los partidos en el gobierno con sus matices. La tremenda caída del partido oficial trajo consigo una crisis política al resquebrajarse el monopolio de la política y pasar buena parte del ejercicio político a los demás partidos. A esto debe sumarse la perdida de la rectoría de la economía. Son las grandes corporaciones las que determinan el mercado. Las crisis se padecen pero difícilmente las entiende el pueblo. Las crisis políticas son al pueblo lo que la enfermedad al paciente.

Es muy interesante ver como los políticos han reaccionado ante esta crisis de poder. Se han enfrascado en proponer ideas viejas, discordantes con las nuevas circunstancias, con las nuevas relaciones entre los gobernados, gobierno y trasnacionales. No logran encontrar el hilo conductor que los saque de Laberinto del Minotauro. El monstruo exige sacrificios y estos son inmediatos. Hace falta un Teseo de la política bien ayudado por su correspondiente Ariadna.

Ahora bien, al filósofo no le es licito ser adivino pero si le es posible delinear de manera general los resultados con base en las observaciones de los hechos más significativos. Por ello se puede adelantar que no se está buscando por ningún político la construcción del nuevo Estado mexicano en esta era llamada por Lipovetsky “híper moderna”, denominación que sigo por las razones expuestas por el filósofo francés sin que sea seguro que en definitiva sea nombrada de esta manera. En efecto, lo único que quieren los políticos tradicionales es seguir perteneciendo a la clase política que detente el poder sin ningún cambio y sin ninguna amenaza. Que el pueblo, los ciudadanos sigan en “Capitis Diminutio”, es decir, en la adolescencia, y, eso es imposible.

Los ciudadanos deben y pueden cambiar este lamentable estado y circunstancias como lo concibe José Ortega y Gassert, y, es posible encaminar al nuevo Estado hacia un nuevo derrotero, no libre de peligros pero si libre de miedo y de temor barato. Morir vamos todos, vivir, pocos.


martes, 5 de diciembre de 2017

LA TRANSFORMACIÓN DE UN ESTADO TOTALITARISTA A UNA DICTADURA MILITAR



Llevar al Estado moderno mexicano a su agotamiento, desmantelarlo hasta hacer inútil  a sus órganos e instituciones, volverlo enteco para no poder ser dinámico y, por ende terminarlo fue el objetivo del régimen priista. De esta manera se prepararon las circunstancias para la militarización del territorio nacional con la clara intención del control del pueblo para las siguientes elecciones. La fuerza pública se utiliza como terror de Estado para permitir la mutación del régimen en otro que permita seguir gobernando a los priistas en mancuerna con una parte de los panistas y demás partidos satélites. Se utiliza la precaria seguridad pública como pretexto para imponer un régimen militar que no deje lugar a la democracia como hace 80 años en cualquier lugar de Latinoamérica.

La constante violación a los derechos humanos desaparece con La Ley de Seguridad Interior porque se vuelve legal todo tipo de muertes, desapariciones forzadas, tura de masacres y, violaciones incluso a el primer y último reducto de los ciudadanos sus casas, su intimidad y, por consecuencia su seguridad personal. Agotado el régimen priista se tuvo la necesidad de sostener a como dé lugar las apariencias de vigor, de entusiasmo mientras se preparaba la llegada de José Antonio Meade como única alternativa del priismo. A este nivel de desprestigio llegaron los priistas. Manlio Favio beltrones, Cesar Camacho, Miguel Ángel Osorio Chong, Aurelio Nuño, Emilio Gamboa y toda la cúpula priista tuvo que reconocer que eran impresentables ante los electores. Un nuevo fraude electoral con el mismo estilo que en el estado de México no era viable, una nueva estrategia para un nuevo fraude. Que mejor que el control social por medio del ejército.

En general las fuerzas armadas bajo el mando del presidente son el arma más poderosa para controlar a la población; su disciplina, su estructura de mando, su eficacia de control para con la población civil, su armamento y el dinero destinado quedan a la perfección para que el régimen priista mute de un régimen totalitarista a uno militar y después, a lo que dicten las cúpulas priistas y panistas.

Las nuevas generaciones de mexicanos, al parecer, desconocen el miedo, el temor y el terror que pueden desatar las fuerzas armadas en contra de la población. Es factible un control a través de la sola presencia de militares y no es necesario que todo el pueblo este controlado pero si una buena parte del mismo para que el Partido Revolucionario Institucional gane las elecciones del 2018. Un porcentaje del 10%  de los votantes es suficiente para que el priismo siga vigente y mute en lo que quiera siempre y cuando mantenga el poder político.

La treta que usan los pristas de postular a José Antonio Meade como un buen mexicano por medio de toda la parafernalia de hace 40 o 50 años tiene como fin cegar a la población y hacerlo parecer como un buen candidato, dicen que hasta culto es, quienes lo promueven. El discurso usado por Meade es el mismo que uso Luis Echeverria, Miguel de la Madrid o Carlos Salinas de Gortari. Dice Meade que hará de México una potencia, ignora, evidentemente que dicha palabra tiene su origen en el término latín Potentia y que Aristóteles distingue como en activa y pasiva y que es una fuerza para llevar a cabo la mutación en otro o en sí mismo o la capacidad de sufrir una mutación por otro o por si mismo, la capacidad de cambiar para bien antes que para mal y la capacidad de resistir cualquier cambio.

Claro, Pepe Toño, es político y no es obligado que sepa metafísica aristotélica pero, sin embargo, nos lo presentan y se presenta como culto; entonces debemos ponerlo a prueba para saber si lo es o no. Ahora bien, Meade debería conocer la relación entre potencia y acto. No puede haber acto sin la potencia. Pasar de ser mera potencia a ser acto. Las semillas contienen en potencia lo que eventualmente serán, flores, verduras, árboles frutales o lo que ya está contenido en las semillas como potencia.

En este sentido el priismo no está mutando en bien sino en su propia línea del mal. Otra génesis diversa a la aristotélica y que acabamos de ver. El PRI es incapaz de mutar hacia algo bueno, su simiente esta desde su inicio podrida y de lo podrido no puede venir algo sano, de lo torcido no puede surgir lo recto, el priismo no tiene la potencia para mutar hacia lo bueno pero si de presentar apariencias engañosas como esta elección de su virtual candidato hacia la presidencia de la república. 


viernes, 1 de diciembre de 2017

LAS TRETAS COMO POLÍTICA



Realmente es de risa el ritual que desplegó Enrique Peña Nieto para destapar a José Antonio Meade. Es ya, por sí mismo, el sustituto perfecto del mejor cómico nacional, cayendo en el personaje ideal del “Bufón nacional”, no hay día en que no deleite al público con un de sus dislates; en ese campo es “genial” por ser un monstruo por defecto, por sus limitaciones mentales que lo hacen caer en situaciones chuscas, absurdas, increíbles, inusitadas pero peligrosas.

A los gobernantes mexicanos se les puede imputar, sin lugar a dudas una ignorancia olímpica, eso, no es nuevo, Platón, ya sabía esto  y propuso que los mejores gobernaran, es decir, los sabios. El rey filosofo. Un ideal. La realidad es radicalmente diferente. Los más ambiciosos e ignorantes gobiernan. Maquiavelo también tomó en cuenta esta deficiencia de los gobernantes a la hora de gobernar; en consecuencia, escribió su obra más conocida “Del Principado”, de forma lacónica, breve porque confiesa que los gobernantes no leen.

Leer no sería tan importante al momento de gobernar si la mayoría de gobernantes no fueran imbéciles bien vestidos. La materia de los gobernantes es, fundamentalmente mandar pero ni siquiera este rubro dominan y tienen que hacer uso de engaños, tretas, apariencias y en primer y último caso, la fuerza del Estado. Hoy, día la maldición de ser ignorantes los persigue sin descanso y no importa si logran los más altos grados académicos, desconocen la realidad mexicana y no les importa conocerla. Docta ignorancia decían los teologos respecto de la filosofía; siguen siendo doctos ignorantes pero ahora de la realidad. Funcionan a control remoto sin ver ni importarles la realidad. Tienen en la mente y en la práctica mantener la Macroeconomía, lo demás son efectos secundarios, es la Microeconomía.

Cada vez que quieren engañar al pueblo lo hacen con la fuerza del Estado y con una publicidad oficial y oficialista que no para día y noche. Para dar apariencias de reformas efectivas, hacen chapuzas y las venden como pócimas mágicas. Al Instituto Federal Electoral (IFE) con el cambio de una letra lo convirtieron en Instituto Nacional Electoral (INE), con competencia, ambas instituciones, en el territorio nacional y el servicio en el extranjero para los mexicanos en esos lugares; a la Procuraduría General de la República, la han convertido en Fiscalía General de la República con las mismas facultades; o de plano si quieren hacer un movimiento de control convierten a las fuerzas armadas en policías, diciendo que todo es legal y únicamente los ciudadanos despiertos ven malas cosas y efectos nocivos. Todo está en la mente, diría Peña Nieto. Quiere drogar al pueblo con palabras huecas y saliva venenosa.

Todo esto nos muestra y demuestra que este sistema está agotado, los gobernantes y políticos están agotados; en consecuencia, son incapaces de ofrecer una política fuerte, de verdadera altura para combatir la decadencia, son parte del problema. Es la hora de los ciudadanos y el gobierno y políticos tienen menester de parar en seco este movimiento. Por eso, no es raro que se ponga en vigencia una Ley de Seguridad Interior, violatoria de toda la democracia pues serán los soldados los que tengan el control del pueblo, de los ciudadanos y estos, estarán destinados a una nueva dictadura militar mezclada con la hegemonía de los partidos sobre el pueblo para evitar la democracia.