martes, 29 de marzo de 2016

HOMENAJE LUCTUOSO



El gobierno de Peña Nieto le hace un homenaje a Fernando Solana, personaje auténticamente de cuño priista. Es lamentable dicho acto y solo nos queda verlos con ojos ceñudos. Ese funcionario nunca trabajo en el sentido estricto de la palabra. Claro debemos separar a la persona privada del funcionario público. A la persona la debemos respetar absolutamente, sería muy bochornoso y un desatino que no fuera así; sin embargo, al funcionario público lo debemos cuestionar por las razones ya conocidas, de ser un producto del régimen autoritario.

El gobierno actual ha socavado y tirado al olvido los logros alcanzados en el rubro social y ahora, pretende erigir ídolos emanados del poder político; evidentemente no pasaran la prueba del juicio popular, debido a sus inconsistencias. Imagino que secretamente, este gobierno se auto alaba con este tipo de actos. ¿Quién les va a creer que estos ídolos de papel van a servir de incentivo para el pueblo?. Menos cuando es el gobierno quien los trata de elevar.  


viernes, 25 de marzo de 2016

INDIO E INDÍGENA



Un pueblo que solo sirve como receptáculo de las ideas y creaciones ajenas está condenada al vasallaje. V. M.


De común la Humanidad toda se equivoca y transmite por tradición esos mismos errores a las siguientes generaciones que, sin razonar siguen reproduciendo esas equivocaciones hasta que se arraigan y se usan indiscriminadamente. Eso pasa en todos los ámbitos incluyendo el lenguaje. En México y, en otras partes del mundo, se usa y se abusa de dos términos: indio e indígena; el primer concepto se usa para designar a los nativos de lo que hoy, llamamos América, el segundo, se abusa en el mismo sentido. Sin embargo, la palabra indio, es, o mejor dicho era el gentilicio de los indígenas de la India; es decir, los nacidos en esa parte del mundo. 

Ahora bien, ¿por qué se usa la palabra indio para designar a los habitantes naturales de este continente (América)?, por la peregrina razón de que, Cristóbal Colón, en su búsqueda de hallar la India y con ello a los indios, topó con estas tierras y creyó haber llegado al lugar buscado y, al regresar a Europa llevó la noticia de haber encontrado la India. Desde entonces, erróneamente, se dice indios a los indígenas de este continente; porque la palabra indígena designa a los habitantes naturales de determinado lugar. En este sentido todos los seres humanos somos indígenas por haber nacido cada quien en un lugar determinado del planeta Tierra. 

Es increíble que, hasta las personas cultas y con grados académicos se dejen llevar por la estúpida tradición de llamar indios a los descendientes de los pueblos prehispánicos con los dos términos, agregando mayor confusión en el uso correcto del lenguaje y, por ende, en detrimento de la verdad. Esto podría parecer solo una anécdota; sin embargo, esto va más allá de ello, indio e indígena. En México dichas palabras generalmente, se usan de forma despectiva para denigrar a los descendientes de los pueblos originarios. Por el momento, no he encontrado un historiador, antiguo o contemporáneo, que no use la palabra indio para designar a los pueblos prehispánicos o sus descendientes. 

Si una de las acepciones de Filosofía, es amor a la verdad y uno de sus fines, es encontrarla, con los requisitos que la misma impone; tal parece que, en México, se filosofa poco. Tenemos muy buenos historiógrafos de las diversas filosofías pero muy pocos filósofos, lingüistas, historiadores, maestros entre otros profesionistas que se preocupen y ocupen de traer a la luz lo que está en la oscuridad. Es tal el abandono de toda buena cultura, ciencia y filosofía que, mucho me temo que ya es imposible corregir este rubro. Con todo, no es correcto que se abandone la lucha. Tirar la toalla es propio de conformistas y fatalistas.  

Por ello, cuando oigo hablar sobre el tema a personas con determinado grado de estudios no les perdono su ignorancia; esto se agrava cuando las mismas personas usan y abusan de dichos términos para tratar de ponerse por sobre los demás seres humanos, tratando de discriminar ridículamente a personas con determinadas características, entre ellas la pobreza. Con ello solo muestran y demuestran que, si bien puede ser que tengan dinero y bienes materiales la pobreza intelectual les luce desde lejos y mucho más de cerca. La buena cultura debe cultivarse con mucho esmero y el lenguaje, una característica humana, bien usado puede ser constitutiva de belleza, de sabiduría y respeto por el otro, para ti, para todos y, ser la base de una vida más digna. 


lunes, 21 de marzo de 2016

MÉXICO REPUBLICANO Y MONÁRQUICO




México ha estado en constante lucha por definirse como una monarquía o como una república. Al pronto mi aseveración parecerá descabellada, increíble; con todo, no es así. En toda la Colonia la forma monárquica prevaleció con tintes de corrupción y desacato de las leyes. Esto bien podría resumirse en la siguiente frase: Cúmplase pero no se observe. Eso es indefinición.

Después de la independencia, no se sabía si México sería una monarquía o una república y surgió el imperio con Agustín de Iturbide quien cayó y se instauro la república; sin embargo,  el deseo de que, México fuera una monarquía estaba en las cabezas de los conservadores; quienes sin más, se aliaron a Maximiliano para imponer un gobierno de nobles. Estaba gobernando la republica Benito Juárez, la mente más preclara y dueño de la acción política más efectiva de todos los tiempos de la república mexicana, porque supo consolidar el Estado mexicano. Sorteo con éxito las amenazas exteriores e internas con maestría sin par, encabezando un grupo compuesto de verdaderos patriotas. Esto sin soslayar los errores cometidos y que no se pueden ocultar.

Entre los que, estaban en ese grupo se encontraban: Justo sierra, Guillermo Prieto, Porfirio Díaz, Mariano Arista, Ignacio Comonfort, Ignacio Manuel Altamirano, Miguel Lerdo de Tejada, Manuel Doblado, Sebastián Lerdo de Tejada, Francisco Zarco, Santos Degollado e Ignacio Ramírez entre otros. Se puede seguir la historia mexicana para contrastar los grupos surgidos en las diferentes épocas y ver los alcances de cada grupo.

Si se contrasta el grupo que encabezaba Juárez, con el presente grupo en el poder, en definitiva no tiene que hacer al lado de aquel. Son por lo pronto dos posiciones totalmente antagónicas. A Juárez le correspondió hacer saber al mundo que, el Estado mexicano era una republica soberana. La muerte de Maximiliano fue el símbolo de esa soberanía republicana. Así surgió México en la escena internacional.  En lo interno se dividió el Estado civil del Estado eclesiástico y el gobierno mexicano asumió las actividades respecto a la vida de las personas en el ámbito civil: registro de nacimientos, casamientos y defunciones. Estas solas acciones merecerían y merecen el reconocimiento de las generaciones siguientes hacia el gobierno de Juárez.

El momento actual ya no se le puede pedir al gobierno en turno acciones soberanas sino por lo menos legitimidad (el reconocimiento del pueblo) y legalidad (estar apegadas las conductas del gobierno a las leyes), esto no ocurre por casi ningún lado. La corrupción proviene directamente de la residencia oficial del gobierno federal. El símbolo de la corrupción y de la impunidad lo es ese mismo gobierno.

Los contrastes no pueden ser más claros. El gobierno de Juárez, le correspondió la consolidación de la republica soberana; al actual la destrucción de esa república y la instauración de una monarquía maquillada de república y de democracia. No es que, ahora se haya generado esta monarquía bastarda, no, ya se había gestado desde hace tiempo pero, ahora se manifiesta con mayor fuerza. Todos los partidos políticos han contribuido a la construcción de una clase noble revestida de formas republicanas pero francamente de fondo monárquica.

Al actual gobierno a lo menos se le debería pedir que gobernara y pusiera coto a las trasnacionales en su paso de rapiña; sin embargo, después de ser impuesto por una televisora, esto no es posible y el gobierno en turno solo está de Gerente General de las grandes empresas, quienes son las que verdaderamente gobiernan. }

Al gobierno de Juárez no lo cegó el poderío de los franceses ni las insidias de los conservadores panista de aquellos tiempos; al gobierno actual se segó totalmente con la adquisición sospechosa de casas y otros bienes, bien supieron las trasnacionales maicear (engañar) al presidente y gabinete, que no tienen otra misión ordenada de vender todo lo público a precio de cochera y desentenderse de gobernar.

Por todo ello se debe dar a cada cual lo que merece sin hacer caso al descocado que, con toda trompetería manifiesta ser el mejor presidente (Fox) de toda la historia de México, incluyendo a Juárez.

Ya no tenemos patriotas, ya no somos patriotas. En consecuencia, los ciudadanos deben intervenir directamente en la política e imponerle su propio sello al gobierno. Esto, tratando de quitar las malas hierbas que se han revestido de “independientes”. La ciudadanización de la política es inevitable. A menor intervención del gobierno en la rectoría de la economía y el desastroso actuar de los políticos tradicionales y la liberación del gobierno de las obligaciones de los derechos alcanzados con el Estado de bienestar: derecho al trabajo, a la educación, a la salud, a las pensiones, a vivienda, no queda otra vía que la ciudadanización de la política.

El Liberalismo económico liberó a los siervos de la nobleza, el Neoliberalismo liberó a los gobiernos de sus obligaciones tradicionales ya señalados. El individuo moderno se híper individualizó con el Estado híper moderno. Ahora el individuo esta mas solo, más libre pero más inseguro de su futuro. La seguridad obtenida con el Estado moderno se terminó no queda otra vía que, actuar cada quien con sus propias fuerzas para obtener lo necesario para vivir, sobrevivir o pervivir.


Y, en medio de todo esto una clase política y rica comportándose como verdaderos nobles sin ningún interés por los gobernados a pesar de sus discursos huecos, sin sentido. Claro el pueblo tiene su cuota de responsabilidad. Es evidente que, ahora, por la híper individualización, es mucho más difícil la unión del pueblo para intervenir en la política y todavía las viejas formas de hacer política siguen rigiendo. Tiempos de construcción de un nuevo Estado en medio de la crisis económica y política. Definir lo indefinido. Amen.


domingo, 20 de marzo de 2016

LA PUEBLA DE MORENO VALLE



Puebla es una ciudad con dos aspectos fundamentales en sus construcciones, su imagen y su vida. Por un lado, se tiene una ciudad construida para los ricos y para los turistas; por el otro, una ciudad con cinturones de miseria, llena de baches, llena de desempleados o con empleos mal pagados. Este último aspecto es el que, el gobernador en turno Rafael Moreno Valle quiere ocultar. 

Al más puro estilo de los faraones y de Cayo Julio Cesar Augusto dice a través de toda la maquinaria publicitaria a su servicio: “Mirad, encontré una Roma en ladrillo y, os la dejo en mármol”. Moreno Valle y el partido Acción Nacional, han puesto la obra pública como ariete para sus campañas políticas, esto sin contar con la consabida corrupción que es alrededor del veinte por ciento del costo total de la obra y que va a parar a los bolsillos de los gobernantes.

Con la campaña infame: ¿Te acuerdas de la Puebla de hace 5 años?, en donde se trata de hacer un contraste entre el gobierno de Mario Marin y el de Moreno Valle, se nos dice que estamos en Morenolandia, un lugar de maravilla en donde la vida es pura vida. Claro esto es una vil mentira. El aspecto de una ciudad impoluta, llena de bienes y servicios turísticos, llana de cultura es solo oropel.

Hay una Puebla que está abandonada a su suerte y la misma es siniestra. Una Puebla donde la gente lucha día a día para sobrevivir. Sin servicios, sin oportunidades, sin esperanzas y donde la delincuencia campea a sus anchas. Ciertamente, la Puebla que promueve Moreno Valle es solo de Puebla, el resto del Estado es un verdadero desastre. Miseria por todos lados en la realidad y una ciudad de Puebla resplandeciente en la realidad virtual.

Pongo a Moreno Valle como un gobernante peor que Mario Marín, sin que esto sea una justificación para este último. A los gobernantes no les importan sus gobernados sino solo el poder por el poder. Con la Puebla de Moreno Valle y del panismo, se ha logrado empeñar por varios sexenios a los poblanos. Las obras faraónicas no son gratis y, no las pagan los gobernantes sino el pueblo.

Si verdaderamente a Moreno Valle le importara la gente debería invertir en bienes y servicios para el pueblo, después en el pueblo y por último en el pueblo. Por el contrario invierte permanentemente, hasta que su gobierno acabe, en su imagen, en la piedra, cal y cemento para darse la importancia cesariana que, como idea baila locamente en su cabeza. El terror de todo político se acerca: el fin del poder político y Moreno Valle, siente que el vacío se abre bajo sus nobles pies. Se va y ha superado en todo lo malo al anterior gobierno. Deja una Puebla de relumbrón para los ciegos y turistas y una deuda de alarido.

viernes, 18 de marzo de 2016

18 BRUMARIO (¿DÍA DE LA EXPROPIACIÓN PETROLERA?)



El dieciocho de marzo se instituyó como un día de celebración por haber sido el día del año 1938 en que se nacionalizó la industria petrolera; eso fue un acto de soberanía, del mismo grado que, el fusilamiento de Maximiliano por el gobierno de Juárez. Con el correr del tiempo y en concreto, desde los gobiernos priistas de Miguel de la Madrid, pasando por los neopriistas Vicente Fox y Felipe Calderón hasta llegar al ínclito Enrique Peña Nieto, han hecho venta de cochera de todos lo público a tontas y locas y, este último gobierno de la industria petrolera bajo las condiciones más vergonzantes y contra los intereses de la nación mexicana.

Las tan trompeteadas reformas estructurales no han sido otra cosa que el barniz de la venta a bajo precio de lo público en medio de la corrupción más espantosa y cínica de la historia mexicana con toda la impunidad a galope. No hay cosa alguna que celebrar por parte del pueblo mexicano. Si bien la soberanía mexicana es relativa era posible poner orden a las inversiones extranjeras en lo público y regular las nuevas relaciones entre las trasnacionales y los gobernados y no haberse retirado el gobierno mexicano de lo más elemental en lo público y volverse una gerencia a modo para las grandes empresas petroleras, el sector privado, el propio Vicente Fox y secuaces para rapiñar los despojos de Pemex.

Los únicos que pueden festejar la quiebra y abandono de Pemex son las grandes empresas petroleras extranjeras, los gobiernos extranjeros, el sector privado, el gobierno y los que ordeñan los ductos de  la industria petrolera, otrora mexicana.

El resultado es desastroso aunque el cuentista de Hamelin, enrique Peña Nieto, diga lo contrario. Durante décadas la obra pública, los programas sociales y las instituciones se veían beneficiadas por los recursos que recibían de los ingresos de Pemex, ahora dicen que se han diversificado los ingresos del gobierno cuando en realidad, el gobierno se ha dedicado a dilapidar lo público y, a incrementar los impuestos al pueblo que no a las grandes empresas.

El actual gobierno hecho toda la carene al asador y ha quemado su último cartucho en materia económica y desde el inicio del sexenio todos los cartuchos en todos los rubros. Ya no tiene que ofrecer más que la palabrería hueca. Timoratos, los funcionarios del gobierno esperan y desesperan porque termine su desastroso gobierno e irse a disfrutar lo mal habido. Aun así, se verán ceremonias ridículas y sin sentido festejando la quiebra de Pemex: ¡Viva la quiebra de Pemex que tanto ha beneficiado a unos cuantos!. ¡Viva el 18 Brumario mexicano!.


martes, 8 de marzo de 2016

MÁXIMA SOLEDAD



Cuando se vive en la máxima soledad: la intelectual, no se puede ser ñango, ni Peña Nieto y eso es todo o casi todo. La soledad física o sentimental son poca cosa. ¿Qué significado puede tener el termino: Humanidad?, se tiene que suspirar y volver a suspirar. Los conceptos esos son, conceptos. Miedo, temor son conceptos: su práctica es otra cosa. Ni aun así tendré opción de vivir o morir. Soy un viejo topo que vive en las profundidades, en lugares oscuros, inaccesibles e inentendibles para los demás y ¿qué?, ni que el ser humano actual haya encontrado la salida del laberinto, eso me corresponde a mí y solo a mí. A mi edad un ser humano nuevo, novísimo para durar. En la buena hora caminamos y nos precavemos que la Lechuza, la Minerva no levante el vuelo sin que pase algo interesante antes de la tarde. Y, ¿en este momento que puede ser nuestra máxima soledad?.



¡Oh patria soledad...!, Nietzsche.


jueves, 3 de marzo de 2016

LA VIDA Y SU DISMINUCIÓN AXIOLÓGICA



El viejo problema de la vida se vuelve a presentar bajo el aspecto económico. No es que, en el pasado no haya existido este problema; sin embargo, no era el problema central. En la antigüedad la vida estaba bajo la presión del mito. Toda la vida se explicaba a través de la mitología en todo el mundo. No hay pueblo alguno que no haya utilizado al mito para explicar la realidad, la vida.

La humanidad avanzo hacia otro tipo de explicaciones y se afirmó en la metafísica teológica. La vida tenía su centro de gravedad fuera de la vida misma.  Hacían falta seres perfectos, inmutables, omnipresentes, llenos de amor y todopoderosos para darle sentido a la vida.

Esto ha sido posible porque la vida misma no tiene fundamento alguno más allá de la vida misma. La vida se haya en suspenso constante. Flota sobre un abismo terrible. El vacío se abre a cada paso que se da. Esta es la raíz de todas las angustias humanas. La vida exige toma de decisiones rápidas y permanentes. Queda entonces la toma de decisión de cómo darle sentido a la vida propia, de cada uno.

Se tiene la convicción de que, las épocas anteriores han sido inferiores en todo a la actual. Cuan lejanas nos parecen las conductas de nuestros antepasados. La mitología nos entretiene y la teología parece no dar respuesta alguna viable para la vida. Con todo, la Edad Media supo poner, por lo menos, lo económico al servicio de la vida.

¿Ha sabido el ser humano actual darle sentido a su vida?, la respuesta es inquietante, no. El liberalismo en todos sus ámbitos dio libertad a los seres humanos. Toda la Ilustración tuvo su base en el “Sapere aude”, (Atrévete a saber), en donde iba implícito el individualismo. Esto significaba que los seres humanos debían dejar los símbolos de autoridad como los sacerdotes, maestros, padres (por lo menos de manera acrítica), entre otros y con la sola razón abrirse paso en la vida y darle el sentido libremente.

¿Qué sucedió?, toda la época falló. Los seres humanos no pudieron entender y practicar la libertad y tres casos nos muestran las torcidas formas que surgieron en pleno siglo XX: el fascismo italiano, el nazismo alemán y el totalitarismo japonés. Los seres humanos postrados ante los líderes que ofrecían cosas extremas. Estos modelos fallaron estrepitosamente con un alto pago en vidas y destrucción.

Sin embargo, la amenaza sobre cuadrar la vida, encartonarla y ponerla bajo control no desapareció sino que se vistió y revistió  de democracia a lo occidental. Todo lo que no se asemeje a la democracia occidental es el enemigo. ¿Qué nos ofrece la democracia occidental?, cuerpos de leyes que favorecen a las grandes trasnacionales y desde allí, moldear la vida. La consecuencia ha sido, poner la vida bajo la pesada loza económica. Quienes tengan los caudales de dinero ponen los valores de la vida. La vida vale menos que lo meramente material. La vida, ente metafísico puesto de rodillas ante lo meramente material.

Los seres humanos no hemos sabido darle sentido a la vida desde la vida misma. En muy raras ocasiones se ha visto que se viva por solo vivir. En la mayoría de los casos, aun hoy, la vida está sujeta a las explicaciones mitológicas, a la teología (fatalmente) y al pragmatismo material del Neoliberalismo.

En el caso mexicano se debería entender el símbolo de Huitzilopochtli como una forma extrema y furiosa de darle sentido de supremacía de los aztecas sobre los demás pueblos. Sin embargo también muestran otra faceta, la razón y las virtudes humanas encarnadas en Quetzalcóatl. Sería bueno transformar el símbolo de la guerra en la duda como método y la razón como su ariete para darle sentido a la vida, sin buscar fuera de la vida misma su centro de gravedad. La búsqueda de modelos ajenos al pueblo mexicano ha resultado en desencuentros e imposiciones.

La nueva forma de disminución del valor de la vida debe ser tomada por los cuernos y no solo por los cuernos, para tratar de darle un sentido propio a la vida, libre en lo posible de mitos, teología, mercantilismo y cualquier otra forma de desviación de la vida.

Por desgracia no hay un movimiento unificado que luche por los derechos humanos y por las garantías individuales base de una vida digna. Al contrario del pensamiento hegeliano, en donde el Estado está por encima de los seres humanos, es decir, de la vida, en occidente (no todo está perdido), se piensa que, el Estado debe dejar una esfera de libertad a los gobernados para ejercer su vida en libertad, sea cual sea esta libertad.


Finalmente se debe subrayar que, la mayoría de los mexicanos siguen explicando sus vidas desde la mitología, la teología y aceptando la determinación de sus vidas desde lo económico. La vida es responsabilidad individual en muchos de sus ámbitos y esto implica obligaciones de hacer pero se han elegido las de abstención, las de no hacer. El Neoliberalismo ha moldeado ya a los mexicanos actuales en el fundamento de sus vidas. Es hora de despertar de este sueño dogmático.