lunes, 16 de marzo de 2015

MÉXICO BARBARIZADO S. A. DE C.V.





Para saber la situación real y en toda su profundidad en México es, necesario no oír ni ver y mucho menos creer en la versión oficial. La democracia no se hace por decreto ni se construye mediante la retórica hueca; se construye siguiendo con la voluntad general del pueblo y en beneficio de este, es esencialmente de facto que formal. Lo demás es, simulación y más simulación. Tal ocurre en la República mexicana. .

El deseo de saber es, el preámbulo del conocimiento; de esta manera lo entendió John Kenneth Turner con relación al gobierno de Porfirio Díaz y la situación del pueblo mexicano. En consecuencia vino a México e hizo un largo recorrido, viendo todo lo que un ser humano podía ver, oír por sí mismo y después analizó los hechos, los actos y las palabras. El resultado fue escalofriante. Mostró al mundo el gobierno tiránico, genocida, despiadado de Díaz, en su obra “México Bárbaro”. Ahora bien, de la lectura del libro se saca en conclusión que, mientras el gobierno se mostraba al mundo como un gobierno progresista y se exhibía a la nación mexicana en paz, los gobiernos extranjeros felicitaban a Díaz por sus buen gobierno, la realidad era otra. El dictador, masacraba a sus opositores, desparecía a todos los que tenían ideas contrarias a la suya, deportaba a los pueblo amantes de su libertad a lugares lejanos bajo las más duras condiciones difíciles de creer, hoy, mientras corrompía todos los órganos de gobierno y todas las instituciones en favor de sus incondicionales.  Era aquella una dictadura personal que destruía a los periodistas independientes o compraba su silencio y, cuando no lograba su propósito los perseguía sin descanso  hasta su aniquilación. Los ejemplos sobran. Eso ocurría hace más de cien años y, parece que, con sus matices, la situación sigue en la misma línea tiránica.

Desde que regresó el Partido Revolucionario Institucional, a través de su personero Enrique Peña Nieto, traía la consigna de volver a tiranizar al pueblo mexicano y alzarse no solo con el poder político sino el económico a cualquier costo de vidas a través de las atrocidades más bárbaras, compitiendo con el régimen de Díaz. Al gobierno Neoliberal mexicano, no le importa el pueblo de México sino las pingues ganancias que puedan lograr. Las garantías individuales y los derechos humanos son nulos. La muerte se ha señoreado por manos de los verdaderos, Peña Nieto es, demasiado corto de ideas y de acción para hacerlo por si, aunque esto no le quita ninguna responsabilidad. Hoy, en México gobierna una dictadura de partido en complicidad con la llamada oposición política y el férreo apoyo de los dueños de las trasnacionales mexicanas y extranjeras. La historia es, demasiado reciente y está en curso para contarla. Sin embargo, el gobierno necesita dar la impresión de paz, de armonía, de trabajo intenso, de democracia, justicia y transparencia y no duda en simular descaradamente, dentro y fuera de México.

Como era de esperase, no todos los mexicanos son afines al sistema y hay críticos especializados que señalan los excesos, las simulaciones, la corrupción y la impunidad sin ningún tapujo. Tal es, el caso de Carmen Aristegui. Los logros de esta periodista van más allá de su ámbito y es referente de la democracia, la transparencia, la honestidad y el deseo de saber. Precisamente esa sed de verdad la ha llevado a investigar lo que, el Procurador General de la Republica debería haber indagado, si este fuera un gobierno democrático y no el mismo corrupto de siempre, la enorme corrupción generada desde el Ejecutivo Federal y los Secretarios de Despacho.  Carmen Aristegui sola ha hecho más por la democracia que todo el gobierno junto. Sus investigaciones han incomodado hasta la rabia al gobierno y en especial a Peña Nieto.

La crítica de Aristegui ha sido mal vista por los gobiernos en turno. Felipe Calderón se enfureció tanto que intentó que los dueños de la empresa para la cual trabajaba la despidieran. La presión social, de periodistas solidarios y de intelectuales evitó tal exceso. No obstante, por fin el gobierno actual ha logrado que los dueños de MVS despidan a la periodista para evitar se le siga investigando y acallar la verdad. Hoy, como hace más de cien años, los órganos e instituciones de gobierno están corrompidas por el gobierno en favor de unos pocos y en detrimento del pueblo. Las voces críticas se compran, se persigue o se desparecen para evitar que la buena imagen del gobierno mexicano se muestre con toda su crudeza tiránica y despótica.

Turner, descubrió por sí mismo que la paz, la democracia y el buen gobierno de Díaz era una falacia perversa. Vio la barbarie en cada una de los actos y hechos del gobierno dictatorial que no tuvo más remedio que llamar a su obra “México Bárbaro”. Ahora bien, para ser más preciso en el titulo Turner, debió llamar “México Barbarizado”,  ya que era el gobierno quien barbarizaba al pueblo de las formas más espantosas posibles. No era que, el pueblo fura bárbaro por si sino que se le mantenía sin derecho humano alguno, sin garantías individuales, sin democracia, sin leyes efectivas para poder vivir bajo la razón; en suma se le mantenía barbarizado a efecto de poder mantenerlo sujeto a la dictadura. En efecto, la falta de todos los rubros citados no pueden llevar a otra cosa que no sea a la barbarie. Parece imposible que en pleno siglo XXI, se pueda hablar de barbarie bajo las condiciones señaladas y, con todo, es cierto, solo es menester tener sed de verdad y experimentarlo, verlo y oírlo por uno mismo para llegar a tal conclusión como una sentencia definitiva inapelable. El actual régimen no difiere en lo esencial ni de fondo ni en los métodos.

Solo se debe agregar que, en la actualidad una obra del régimen actual se debería llamar “México Barbarizado S. A de C. V”, ya que es, el gobierno, las trasnacionales y los partidos políticos quienes han cortado de tajo todo avance hacia la democracia, la paz, la justicia en aras de explotar todos los bienes y servicios, todos los minerales, flora y fauna y los que les deje ganancias bajo el imperio de la barbarie y sin importarles los muertos que crecen exponencialmente sin que se castigue a los responsables porque son ellos mismos. Han convertido al Estado mexicano en una gran empresa en donde los dueños son una sociedad anónima, de capital variable que está más allá de la democracia, de las leyes, viviendo con toda impunidad con el garrote en una mano y la espada en la otra y la violencia legítima a flor de piel. 


domingo, 15 de marzo de 2015

LA CORRUPCIÓN SOMOS TODOS




El lema “La corrupción somos todos”, es una generalidad oscura en donde se esconden los corruptos políticos mexicanos y desde donde responsabilizan y culpan a los ingenuos ciudadanos que no son duchos en la retórica hueca de los políticos corruptos mexicanos.

De la corrupción somos responsables todos los ciudadanos mexicanos solo que la Republica se corrompe por la inacción, pasividad de la gran mayoría de los ciudadanos comunes y corrientes y por, la acción corruptora y permanente de los gobernantes y políticos que se han lanzado como marabuntas sobre lo público para privatizarlo y en el camino alzarse con grandes ganaciales económicas y políticas.

Los gobernantes y políticos mexicanos son los directamente responsables de la gran corrupción del gobierno mexicano. No hay día que no se sepa de una corruptela a gran escala protagonizada por los mismos. Y, en ese rubro son responsables en las áreas del Derecho penal, civil y administrativo, solo que no se les aplica debido a la gran alianza de impunidad que han concertado todos los partidos en este rubro.

Por el otro lado, el pueblo es, responsable por su pasividad y en la inacción lleva la pena: la pobreza extrema. Sin embargo, los gobernantes y políticos quieren hacer creer al pueblo con su retórica hueca y cínica que todos somos culpables del lamentable estado en que se encuentra la República. Más que políticos son empresarios de lo público y no tienen empacho en mostrar lo mal habido con excesos dignos de la decadencia más oscura. “La corrupción somos todos”, un invento del gobierno de Miguel de la Madrid, un priista que sintió que era hora de una “Renovación moral” pero que se cuenta entre los corruptos.

Los responsables de la corrupción y que deberían ser culpados y sancionados son los gobernantes y políticos mexicanos. Son los que tienen y ostentan la riqueza del pueblo mexicano en los más variados rubros sin ningún empacho y con todo cinismo. Son los millonarios del nuevo milenio. 


DEL DICHO AL HECHO…CORRUPCIÓN E IMPUNIDAD





Cuando se creía que ya no se podía corromper más la República mexicana Enrique Peña Nieto mostró que es tonto en todo lo positivo pero un experto en la corrupción, poniendo como Procuradora de la Republica a Arely Gómez y como Ministro de la suprema Corte de Justicia de la Nación  a Eduardo Medina Mora, ambos cuestionados; la primera por sus nexos evidentes con Televisa, a través de su hermano Leopoldo Gómez y, el segundo, por su desempeño en el cargo de Procurador de la Republica y como espía del gobierno al estar como Director de CISEN. Ambos puestos, claves, el primero por su importancia en el combate contra la delincuencia y que al depender del presidente de la República queda como mera personera del mismo y como fiel sirviente en la impartición de justicia. Que no nos asombre si la persecución política se intensifica. El segundo, es clave para el control de la Suprema Corte de Justicia.  Un hombre sin experiencia alguna en la impartición de justicia al más alto nivel no puede ser otra cosa que una pesada carga a la hora de interpretar la Constitución General pero muy valioso a la hora de defender los intereses de Peña Nieto y del Partido Revolucionario Institucional.

La corrupción y la impunidad se promueven desde el Ejecutivo Federal. Este es un gobierno cínico y de simulaciones. En cada viaje al extranjero se visten con las galas de la retórica y todo, en México, es democracia, seguridad, justicia, bienestar, trabajo intenso mientras que hacia dentro todo es todo lo contrario. Y, no puede ser de otro modo, la genética priista está compuesta de estos dos elementos: corrupción e impunidad coronados de cinismo.

El nuevo Estado híper moderno mexicano ha liberado al gobierno de la responsabilidad social, es decir, ya no existen verdaderos programas sociales que traten y erradiquen la miseria, que traten sobre la educación o pongan el derecho más fundamental de todos al alcance de los más pobres y necesitados: el derecho a la alimentación. Ahora bien, si el gobierno en sus tres niveles esta ya al servicio de las grandes trasnacionales y de sí mismo, se debe hacer un rediseño del Estado mexicano y acotar las enormes facultades que tiene el presidente y que sea el pueblo quien disponga en lo fundamental, dejando la aplicación al gobierno, bajo una vigilancia estrecha y permanente. En efecto, el Neo presidencialismo de Peña Nieto se distingue primariamente del presidencialismo anterior, en los fines. El presidencialismo del viejo PRI estaban encaminados a mantener el poder y el control absolutos en la política, el nuevo PRI (que es el viejo PRI), tiene como fines acatar, legitimar y legalizar la privatización de lo público a favor de las grandes trasnacionales y usar la violencia llamada legitima del Estado (la represión y la cárcel), para imponer a toda costa sin importar las consecuencias la voluntad de los dueños del dinero.

Así las cosas, los altos cargos públicos en la Suprema Corte de Justicia de la Nación ya no deben ser  propuestos por el presidente de la Republica (el corruptor número uno de la misma), sino ser propuestos por académicos, estudiosos independientes, periodistas desvinculados del poder político y económico, instituciones superiores de educación, organizaciones no gubernamentales y en general por el pueblo, a efecto de no depender del jefe del Ejecutivo Federal y actuar como meros empleados suyos.

La independencia del órgano judicial se debe hacer realidad y no como en el presidencialismo una extensión más del órgano Ejecutivo Federal y como ahora, una alianza subordinada entre Peña Nieto y el más ilustre ignorante de los Ministros Medina Mora. Lo que se juega no es un simple puesto sino la profunda corrupción de la República y la impunidad de los gobernantes y políticos en turno desde hace, a lo menos cuarenta años (hace cuarenta años viven del erario y ahí vienen sus retoños), o la sanidad de la nación mexicana, de los órganos de gobierno, las instituciones y organismos de todo tipo y en especial de la vida tan deteriorada que han dejado estos malos gobiernos. Los corruptos dominan la política y la economía, dejando a millones en la pobreza y, en vez de solucionar los problemas de fondo corrompen más la Republica y endurecen las leyes para los desposeídos, los pobres, los ignorantes que ávidos de alimentos y oportunidades protestan. Esta es la democracia que se pregona en el extranjero pero que no aparece en al escenario nacional mexicano.

Los Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación deben ser electos por votos directos a propuesta de los ya mencionados en líneas anteriores y ser calificados en los rubros de idoneidad, rectitud, independencia, intelecto y práctica y todos aquellos que sean necesarios para el desempeño de sus facultades. Deben estar sujetos a los derechos consagrados en el artículo 35 constitucional de ser votados con relación al artículo 39 constitucional que señala los alcances de la soberanía nacional del pueblo mexicano. 


sábado, 14 de marzo de 2015

EL DIABLO Y LOS ACTOS HUMANOS





La iglesia católica se ha degenerado a grados inéditos y le hace falta una renovación limpia de delincuentes pero, antes de ello, le hacen falta que verdaderos líderes inteligentes que tengan bien definidos los tres campos de normas que regulan la vida. A saber, las normas morales, las sociales y las jurídicas. A menudo se mezclan los intereses, la moral se cuela en las normas jurídicas o sucede lo contrario o se confunden los campos por donde deben transitar y se da al traste con los fines de cada una de estas regiones.

Los dos últimos Papas, anteriores al actual, batallaron contra los grandes avances científicos y filosóficos que han corrido el velo de lo que, antes se podían considerar misterios o milagros. Con el paso del tiempo los pueblos, gradualmente, se van alejando de las religiones, transitando hacia el nihilismo pasivo. ¿Cómo encarar, desde la teología, la nueva realidad?. Los líderes católicos no logran siquiera a darse cuenta lo atrasados que están con relación al nuevo Estado híper moderno y por ende, de las diversas naciones, siguen con dogmas absurdos que ya solo creen los muy inocentes.

Ahora bien, el Papa Francisco I, parecía que era la respuesta al tremendo atraso de la realidad que, los teólogos tienen respecto a la actualidad; carismático como una estrella de rock, escalando popularidad y adeptos que ven en él, la respuesta al desprestigio y una renovación moral de toda la iglesia cristiana. En efecto, quien pude poner en duda que los príncipes de la iglesia lograron elegir al mejor de todos los elegibles y por si fuera poco, argentino. En Europa los templos se vacían al ritmo en que el nihilismo avanza y ya no es, terreno fértil para incrementar la cosecha de fieles. No obstante lo anterior, aún quedan naciones dispuestas a creer en la metafísica teológica.

De un Estado político y económico principalmente, la iglesia ha pasado a ser una más de las trasnacionales, quizá la más grande y fructífera económicamente. Ya tenía la estructura, faltaba la visión y practicas netamente mercantilistas. Con o sin la participación de Francisco I, esta trasnacional de las almas y de los bolsillos de sus fieles ha amasado cantidades sin precedentes. Se calcula que los activos de Los Legionarios de Cristo, ascienden a unos escalofriantes $25, 000, 000, 000.00 de dólares cifra que, bien los puede situar dentro de Forbes.  

Latinoamérica fue la respuesta para mantener y aumentar el número de fieles, de ingresos económicos y el apuntalamiento del poder político del Vaticano en el mundo.  Un Papa latinoamericano (los mexicanos soñaban con uno de la misma nación mexicana), bien podría detener y aumentar los fieles y no estaban equivocados. En este rubro no se puede decir que la iglesia católica no logró su cometido. Hoy, Latinoamérica puede sentirse orgullosa de tener un Papa que se identifica con los pueblos, que habla el mismo idioma para las mayorías, el español, un éxito rotundo.

Si en el campo de lo material no se puede hacer una criticar que la iglesia católica no haya alcanzado su objetivo, no se puede decir lo mismo en el campo intelectual ya sea este filosófico, teológico o del Derecho. El Papa Francisco I, manifestó que “El Diablo castiga a México porque ahí se apareció la virgen María”, palabras más, palabras menos, llegando al extremo de no ver como responsables de muertes, desapariciones, corrupción e impunidad a los gobernantes sino a todos los mexicanos. Este desvarío no puede ser creído bajo ninguna circunstancia. Se sabe a ciencia cierta la forma en que se creó el sistema político, económico y social en México y la manera en que se fue volviendo en totalitarismo, corrupción e impunidad. Los hechos y los actos ilícitos, las desapariciones forzadas, la guerra sucia contra la guerrilla y los grupos opositores al Partido Revolucionario Institucional, el nacimiento de los carteles y la corrupción en que entraron los demás partidos no son, producto de Diablo alguno (producto de la imaginación humana), ni de Huitzilopochtli (identificado por lo españoles como el Diablo), sino de un sistema creado para someter a la nación mexicana por parte de la clase política, la propia iglesia y los dueños de las grandes trasnacionales. Los ex presidentes, los grandes ricos y los políticos ricos (un político pobre es, un pobre político decía Carlos Hank González), tienen una historia mundana de excesos, ilícitos y toda clase de inmoralidades, bien documentadas pero impunes dentro de un sistema político y de Derecho a modo.

Por otro lado, ¿qué razones podría tener el demonio con forma de Huitzilopochtli, en tardarse casi 500 años en castigar a los descendientes de los pueblos prehispánicos por abrazar una religión que ha resultado tan mala y cruel como la que desplazó?, (véase la pederastia, las traiciones al pueblo mexicano, los múltiples delitos cometidos por los sacerdotes). Las declaraciones e interpretaciones del Papa Francisco I, no tienen asidero alguno ni pueden aceptarse, a no siendo como creaciones humorísticas o desvaríos.

Lo que no puede tomarse a broma, son los efectos nocivos para la nación mexicana que, si bien, es responsable del lamentable estado en que se encuentra el gobierno por su pasividad, no puede ser culpable por la continua y efectiva corrupción imperante en los tres niveles de gobierno sin importar que partidos políticos gobiernen. Lo que suena a carilla, le cae al gobierno como una autentica bocanada de aire fresco ante su desordenado y perverso proceder. Las reformas estructurales (la privatización de lo público), simplemente no da los resultados esperados de jauja, la corrupción que va desde el presidente de la Republica hasta el más modesto presidente municipal, se simula y se acalla. Es cierto que, muchos mexicanos no creerán semejantes declaraciones papales pero, no ocurre lo mismo con la mayoría del pueblo que, tal como lo dijera Juan Pablo II, “México, siempre fiel”, (entiéndase siempre fanático, irracional), que siempre está dispuesto y obediente a las palabras del vicario de Cristo.

Al parecer el Papa Francisco I, solo tiene el tino de mantener y aumentar el capital material y de fieles pero es, incapaz de poner el pensamiento teológico a la par de los tiempos actuales y prefiere seguir con sus interpretaciones libres de toda lógica, de toda realidad, dándole el hombro del Vaticano al gobierno de Peña Nieto. No creo en los diablos metafísicos pero si en los demonios humanos. Días negros para la nación mexicana.

lunes, 9 de marzo de 2015

EL SOL Y SU ENERGÍA





No dudéis que cuando se utilice la luz del Sol como energía aquí, en la Tierra, el Congreso General, que dice representarnos, privatizará el uso de dicha energía, diciendo que no se privatiza sino que solo se da paso para que la iniciativa privada invierta en ello y que tal energía, es de todos. Siempre habrá un Beltrones o un Cesar Camacho, dispuestos a venderse al mejor postor con todo cinismo e impunidad. 


domingo, 8 de marzo de 2015

EL FONDO DEL NEOLIBERALISMO



“El sueño americano”, no es otra cosa que, la máscara del monstruo llamado Neoliberalismo. Monstruo articulado por los dueños de las trasnacionales y sus respectivos gerentes generales que fungen como gobernantes de los Estados nacionales. Así, pocos sienten y disfrutan los beneficios materiales y el resto, es decir, la mayoría, la pobreza extrema, ninguno los efectos sus efectos vitales, carece de ellos. 

El Neoliberalismo ha rebajado la vida al punto de estar por debajo de lo material; la vida, el ente más radical de la metafísica, el ente independiente que no depende de los demás entes: las cosas, los objetos ideales y los valores, puesta bajo la dependencia de las cosas. ¿Habrá una cosa más monstruosa?. Y, el Neoliberalismo no solo nos invita a poner las relaciones sociales, de amor y amistad bajo la mediación de las cosas sino que nos lo impone.  

¿No sé cómo se puede estar aceptar que la vida pueda ser sana ingiriendo refrescos de cola, comiendo hamburguesas, pizzas y hot dogs a la hora que suena el reloj de la vida?. La ultra rapidez de producción va aparejada con un híper consumo de comida chatarra que inicia y termina por enfermar a los seres humanos?.

La irresponsabilidad a la que han llegado los Neoliberales primarios, es decir, los multimillonarios dueños de las trasnacionales, es espeluznante; depredan todo el reino animal, todos los recursos naturales, todos los minerales, los bienes y servicios, contaminando todo, envenenando todo, destruyendo la vida misma por su enferma ambición de ganar hasta el mínimo centavo como si hubiera más mundos habitables. Han hecho a su imagen y semejanza a los gobiernos de los Estados en subdesarrollo para explotar todo sin ninguna responsabilidad. El mundo entero puesto al servicio de unos pocos mientras la mayoría consume veneno camuflado de alimento. 


LA MITAD DE LA HUMANIDAD: UNA VISIÓN Y UNA META DIFERENTE



La vida siempre ha sido una lucha tenaz, ininterrumpida y hasta terrible, no hay día que no se tenga hacer derroche de energía. El hombre tomó la delantera en lo físico y en lo intelectual, creando la desigualdad de géneros.  Los viejos presupuestos de ser el hombre más apto para la lucha y el pensamiento profundo, debe dejarse atrás, aun si esto es cierto. Por otro lado, si se acepta que, la mujer ocupa el segundo lugar por la tiranía masculina también se debe abandonarse tal hecho. Ambas cosas deben abandonarse en virtud de la razón, la solidaridad, la justicia, el amor que debe existir entre ambos géneros de manera simple y llana. Las mujeres son madres, hermanas, hijas, compañeras y la razón del existir del hombre, se quiera o no. Se ha dejado el estado de naturaleza desde hace mucho tiempo y se vive ya en sociedad bajo el Derecho y sobre el mismo se debe construir la sociedad y los derechos. La mitad de la Humanidad la compone el hombre la otra mitad la mujer sin una no puede existir la otra.

La brutalidad de la vida se ha impuesto al género femenino. De entre, las esclavitudes y demás injusticias, la mujer es, la más injustamente tratada. En la esclavitud el llamado sexo débil le tocó la peor parte, era la esclava sin voz ni voto entre los esclavos. La cosa no ha cambiado de fondo solo ha mutado de formas diversas en el transcurso del tiempo. Si la sociedad civil está fundada en el Derecho, es decir, en la razón, no se debe permitir que se siga luchando por los derechos civiles y se siga relegando o postergando la búsqueda de igualdad (un tema con matices, solo matices), entre los dos géneros. En la medida en que se logre dicha justicia se tendrá una Humanidad más completa más integrada con todos sus retos y dificultades pero libre ya de una injusticia.

La igualdad de los géneros es no solo posible sino deseable. La mujer tiene el derecho y existen los medios y se deben crear más medios pero hace falta la voluntad del hombre pero por encima de la mujer. La ciencia nos iguala; allí está el Derecho señalando ya esa igualdad, el conocimiento de cualquier otra rama del saber funde las barreras de la desigualdad. No se puede cambiar esto de un día para otro pero si acelerar y todos los días son días de demolición de las viejas tradiciones y construcción de nuevas formas de vida que se deben ir reformando según las necesidades y el tiempo. Hay mujeres que todavía viven a la manera feudal y más allá. Inaceptable.
Con lo que respecta a nuestro caso. Hace falta un nuevo tipo de mujer mexicana, libre de la tutela masculina, de la autoridad teológica, libre de la tradición absurda de la sociedad y de la familia, de ser el segundo y hasta el cuarto lugar en la vida y que por sobre todo invente e imponga  una forma de ser propia y no como hasta ahora que, sigue los patrones varoniles en la política, en el trabajo, en la vida.  

Al parecer la liberación femenina (como cualquier otra liberación empieza con la imitación), empezó con sus balbuceos y pasos inseguros y se desbordó con la imitación del lenguaje masculino, con la repetición de las poses varoniles y la copia del pensamiento del hombre. Es común oír a las mujeres hablar con el lenguaje hecho por el hombre e inmediatamente se nota la artificialidad, cierto es, que el lenguaje está la ahí existente y es, más fácil usarlo que inventar nuevas palabras apropiadas a su género, sin embargo deben ser conscientes, críticas e inventivas al respecto. La asimilación de las poses masculinas no están prohibidas para la mujer pero, no deben ser su esencia sino labrar una identidad que no se aleje del otro género, que ni se confronte artificialmente sino que se complemente de la mejor forma. En el futuro se verá esta necesidad insoslayable. Seguir el pensamiento masculino es aumentar y apuntalar la corrupción en todos los ámbitos y por poner un solo rubro véase la política, la mujer ha entrado y se ha acomodado bien en la corrupción sin cuestionar este cáncer social y político.

Las mujeres se han lanzado a la conquista del mundo bajo la perspectiva masculina. Reinas, presidentas, Senadoras, diputadas, abogadas y todo el mundo donde han puesto el pie y la mano se han dejado llevar por la moda, la inercia, la política en vigencia. Los hombres somos responsables de muchas cosas malas y las mujeres han entrado para apuntalar el Neoliberalismo cuando gobiernan, a la corrupción en la política, tienen la misma visión de éxito que los hombres y no han reparado, en general, que, eso es un error que nos costará si seguimos inconscientemente estas pautas. Mujeres y hombres somos responsables de la política, la economía, la vida y el destino de la vida.  Las mujeres son irremplazables, necesarias con todos sus derechos vigentes pero, necesitamos que tengan una visión y una meta diferente de la vida, la actual esta errada desde su cimiento y ellas tienen la palabra y deben tener el apoyo total, irrestricto del género masculino lo contrario es, irracionalidad.

viernes, 6 de marzo de 2015

LA RAZÓN NATURAL Y LA ARTIFICIAL



Desde que se consolidó el Estado nacional moderno, se hizo una división del trabajo respecto de los órganos que ejercen la soberanía y se hizo pertinente para evitar abusos de los titulares de esos órganos, darles facultades específicas a cada uno de ellos; así al órgano Legislativo se le dieron atribuciones de crear leyes, al Ejecutivo, la administración de lo público y al Judicial la impartición de justicia.

En México, se ha evitado de manera sistemática la división del trabajo entre los órganos de gobierno a nivel federal y a nivel estatal, en el primero, con la hegemonía del partido único de gobierno se implantó el totalitarismo y el presidente de la República decidía el funcionamiento del Estado, imponía a Ministros de la Suprema Corte, Senadores y Diputados, a gobernadores, diputados de los estados, funcionarios de toda clase y era el presidente del Partido Revolucionario Institucional. A esto se le llamo presidencialismo. El órgano Ejecutivo estaba por encima de los dos restantes y con ello nunca fueron independientes los órganos, legislativo y el judicial. En la actualidad se intenta hacer lo mismo por el presidente de la República en detrimento de la incipiente democracia mexicana.

En los estados los gobernadores hacen la misma función respecto de los órganos legislativo y judicial con lo que son treinta y un obstáculos para la democracia y se le debe sumar el gobierno del Distrito Federal.

Los intentos de mantener el presidencialismo son evidentes, por parte del actual titular del Ejecutivo. Sin embargo, los tiempos han cambiado y las circunstancias son ya diversas al totalitarismo agonizante. Ha propuesto como candidato a  Eduardo Medina Mora sin atenerse a la idoneidad de su candidato a la Suprema Corte de la Nación, no tiene la experiencia y es muy difícil que llegue a obtenerla. Enrique Peña Nieto no entiende que para bien gobernar y en su caso impartir justicia son necesarios dos atributos: razón y experiencia.

Hay un ejemplo muy ilustrativo sucedido en Inglaterra a la sazón gobernada por Jacobo I, quien pretendía tener la razón suficiente para juzgar cualquier causa. Esta es la discusión que tuvo con el Justicia Mayor. “De acuerdo con la Ley de Inglaterra –dijo el Justicia-, el rey en persona no puede juzgar causa alguna; todos los casos civiles y penales, tendrán que fallarse en algún tribunal de justicia, de acuerdo con la ley y la costumbre del reino”. A lo que le respondió el rey,: “Creo que la ley se funda en la razón; yo, y otros poseemos tanta razón como los jueces”.

“Los casos que atañen a la vida, a la herencia, a los bienes o al bienestar de los súbditos de su Majestad –replicó Coke-, no pueden decidirse por la razón natural sino por la razón artificial y el juicio de la ley, la cual es un arte que requiere largo estudio y experiencia, antes que un individuo pueda llegar a conocerla a fondo”. [1]

Para el caso de Medina Mora es, evidentísimo que a su edad sería una locura que fuera investido con tan alto cargo sin haber previamente tenido un tiempo largo de estudio y ejercicio sobre la impartición de justicia que le diera la experiencia para formarse una razón artificial a la medida del cargo para el desempeño de sus funciones que ni más ni menos son la interpretación ultima de la constitución General de la República. Se estaría imponiéndole a la Suprema Corte una carga costosa, inútil y perniciosa para la nación mexicana.

En el caso de que se impusiera a Eduardo Medina Mora como Ministro de la suprema corte de Justicia de la Unión, se estaría debilitando a este supremo cuerpo colegiado más de lo que ya está y aumentando este intento de Neo presidencialismo ya fuera de las nuevas circunstancias y exigencias de la actualidad y el futuro próximo. Es evidente, que el Peña Nieto trata de socavar aún más la impartición de justicia con la imposición de Medina Mora con el apoyo de los Senadores de su partido.





[1] Tena Ramírez, Felipe. Derecho constitucional Mexicano.
México, ed. Porrúa, 1981.