Hasta
ahora, las mujeres no habían mostrado su valor decisivo a la hora de combatir a
la dictadura mexicana. Se creía que los cambios deberían venir de parte de los
hombres. Vaya sorpresa que han dado las mujeres para bien de la nación. No
cejan y no se darán por vencidas nunca. El gobierno de Peña Nieto se ha
mostrado en extrema torpeza ante la inteligencia y valentía de Carmen Aristegui
al punto de intervenir para su despido de su trabajo. Todas las dictaduras caen
por sus excesos y sus torpezas. Estamos en el caso concreto, Un sistema
decadente al extremo y un presidente limitado en todos los campos del saber, dando
traspiés de manera permanente, solo lo mantiene su partido como marioneta manejable
a su antojo. Se gobierna desde el Senado, la cámara de diputados, desde la sede
del Partido Revolucionario Institucional y desde las cúpulas empresariales.
El
gobierno, torpe en toda buena administración excepto en la corrupción y la impunidad
no le gusta la sana crítica y la democracia. Creyó que, sus excesos y la
impunidad iban a poder más contra el pueblo mexicano y ha recibido los golpes más
duros y decisivos de donde no los esperaba: las mujeres.
Hoy,
los cambios profundos en política se van a deber a las mujeres. Allí están
Aristegui, Poniatowska, Lidia Cacho, la doctora Dresser y las muchas otras
haciendo el cambio con un valor sin igual. Las mujeres, no cejan, no olvidan. En
definitiva Peña Nieto, con su torpeza ya bien conocida, se metió con las generaciones
equivocadas y con las mujeres equivocadas. Pobre hombre. No podrá salir del trance. Se le avizora
un viacrucis en lugar de gobierno. No se da cuenta que no se da cuenta, dice “The
conomist”, eso en filosofía, de acuerdo a la teoría del conocimiento es el
punto más bajo del saber, casi al nivel de las puras percepciones sin
consciencia. Peña Nieto es solo un “Deus ex machina” de la política mexicana. Los
que gobiernan deben estar preocupados y ocupados, jalando todos los hilos,
tratando de manejar un bulto inanimado.
El
corrupto gobierno mexicano no tiene asidero por ningún lado, el pueblo está en
su contra, por ello recurre a la violencia, al engaño, a la tiranía, a la simulación
tosca, bruta, sin entender que los tiempos en que funcionaba este tipo de
sistema de tácticas psicológicas se ha ido, no del todo, pero se ha ido y no regresará.
Los residuos psicológicos del sistema cerrado que, subyacen en los más pobres e
ignorantes (sin ofensa) ya no le alcanza al gobierno para subsistir. Los jóvenes
que han crecido fuera ya del Priato, bajo nuevas perspectivas, son ajenos a ese
sistema y ya no aceptan la doctrina Estrada, quieren un mundo diferente, una
vida sin ataduras.
Las
mujeres, por mucho tiempo olvidadas como uno de los puntos centrales de la vida
han rebasado por todos lados al género masculino y si bien, muchas han imitado
las formas masculinas, las hay, quienes han forjado un mundo diferente, más
sabroso, más interesante y más peligroso y por ello mismo, más deseable. Dentro
de poco a la par de los ¡Viva Zapata, viva Villa!, se oirá viva tal o cual
mujer. Se lo han ganado a pulso y ninguna persona deberá menoscabar esta valentía
y estos cambios inéditos que han forjado las mujeres de este tipo de manera
lenta pero con una base inquebrantable ya.
Los
hombres estamos en segundo plano, hay que aceptarlo sin las amarguras ni los rencores
a los que somos dados, eso sin llevarlos al extremo, solemos olvidar las
enemistades después de una buena pelea y seguir tan amigos como siempre. Bienvenidas
estas mujeres de cambio profundo de la política, de la vida y por mi parte
estoy a sus órdenes, sin claudicar en lo propio. Salud y reconocimiento para
ellas.