Este
es el rimbombante nombre del ex presidente de México; nombre largo que
significa su vida pasada presente y futura. Para Felipe Calderón, el nombre lo
es todo tal y como lo dice la Biblia “En el Principio existía el Verbo, y el
Verbo estaba con Dios y el Verbo era Dios”, es decir, el nombre y no cualquier nombre
sino el propio porque como dice el evangelio “y, el verbo se hizo carne”, en
Felipe Calderón claro está. Este es el
tipo de ser humano que se cree elegido por la divinidad para cumplir lo que está
escrito, según ellos, en las Sagradas Escrituras.
No
fue casual que Felipe Calderón se lanzara contra todo pronóstico a convertirse
en candidato del Partido Acción Nacional, a la presidencia de la república en
el 2005 y cuando se convierte en presidente electo, todas las promesas divinas
se tornan realidad. Su nombre es ya una elección divina “Del Sagrado Corazón de
Jesús”, es su justificación. La divinidad intervino en su vida y en toda la
realidad para que se diera su elección. Porque
para los panistas todo está regido por Dios; sin su voluntad no hay
cosa, persona o fenómeno que suceda.
Ahora
bien, esa locura únicamente les sucede a los fanáticos que se creen tocados por
la divinidad y sienten que tienen una misión y, la misión de Calderón es
mandar, dirigir al pueblo, al rebaño descarriado; ya Vicente Fox había iniciado
esta locura, pues sin el mandato de un iluminado no hay orden sino caos, pecado
sin límites y, por ende la condena al infierno. En efecto, este pensamiento y práctica
son contrarios a la vida política, al buen gobierno porque se aparta de la
realidad.
El
desastre de la mala administración, de Calderón, está fuera de toda
controversia y, que se recuerde no ha dado una sola idea buena de como reformar
el Estado mexicano, lo único que le importa es el poder por el poder en el
contexto divino. Este deseó de poder lo acicatea día y noche y no le importa
afrontar obstáculos, por el contrario, son motivos y pruebas que le pone Dios
para saber si está a la altura de su misión.
La
misión de salvar el mundo no puede parar, por lo tanto, Calderón, debe
continuar aunque sea a través de su
mujer, Margarita Zavala, ella es la respuesta divina, la solución al problema.
Que el Partido acción Nacional se niegue a seguir los mandatos divinos no es
impedimento para que Margarita Zavala, intente llegar a ser presidenta de México,
y, con la ayuda de Dios todo es posible, incluso si Margarita se póstula como
independiente.
Con
todo, si Calderón que es el más adelantado en política, no ha dado una sola
idea que sea benéfica al pueblo mexicano la pregunta salta a la vista. ¿Qué tipo
de gobierno haría Margarita en caso de llegar a la presidencia?. Muchas
personas apuestan por Margarita y la ponderan positivamente; hay serias dudas
con los antecedentes y relación matrimonial que tiene con Felipe Calderón. Ya
padecimos al iluminado de Calderón y, la locura sigue con los que pretenden que
su mujer sea presidenta de México. La suma de ceros es cero. Imaginen la suma negativa de estas dos personalidades.
Vende Patria Eso Es, Y Lo Que Peor A Los Españoles Que Ha Secado De México, Oro, Administración En Los Aeropuertos, Puertos, Electricidad, Etc, Etc..
ResponderBorrar